26 agosto 2010

DEL CORREO DEL BLOG

COMO DARLE LA VUELA EN LA COMPRA DE MEXICANA A TRAVES DE UNA EMPRESA DE PROPOSITO ESPECIFICO


Ya ven. Si pienso mal, acierto ¡Ya salió el peine!, y le pido que lo leas literal: ¡el peine! Con eso de que el maestro Juan Molinar  está en el ojo del huracán y no ha gozado de la mejor asesoría en esto del tema aeroportuario, todas las rifas del tigre que le presentan a él o a su subsecretario de Transporte, Humberto Treviño, parecen buenas.

Ahí tienes lo de Fumisa. Te dije que lo que estaba en juego en esta partida de Advent y Fumisa, es la concesión de las tiendas Duty Free y todos los establecimientos comerciales que se rentan en el AICM -Terminal I que dirige Héctor Vázquez, pues de frente pusieron sobre la mesa el lograr que se les prorrogue la concesión que vence en 2013 y que, de suyo, causó una fuerte polémica en la última revisión cuando Pedro Cerisola era el titular de la SCT.

 Han puesto 200 mdd de saliva sobre la mesa y para darle la vuelta a la Ley de Inversión Extranjera y el marco legal en transporte aéreo, han creado un "purpose vehicule", denominado Tenedora K en la que aparecen como principales socios aportadores de capital Grupo Arizan de Vicente Aristegui y Grupo Omega de Andrés Rozental.

Pero da la casualidad de que ambos son socios en Advent International, Dufry Latin America, Aeroplazas de México, donde Aristegui es director general, Sintres Holding Ltd/Dufry Investment Ltd, Imobiliaria Fumisa y Almacenadora de Valle de México que permite el almacenaje de los artículos que se expenden en Dufry. ¿Te suena?

Hasta donde se puede saber, la suspensión de operaciones para Mexicana y sus líneas filiales representa una pérdida de ingresos como de 80 mdd por concepto de ventas negativas en Duty Free Sales (Dufry), conceciones de comida (La Mansión, Cúcara, Casa Ávila, Bistrot Mosaico), todas concesiones que terminan y tendrían que volverse a licitar en 2013. Si lo recuerda, perdieron en el T2 y, dada sus concesiones en aeropuertos, no puede ser socio mayoritario de una aerolínea mexicana. De ahí que le dan la vuelta a la ley (vez por qué insisto en que de una vez por todas se revise este tema como parte de la política pública pura corrupción).

El asunto es que si le aceptan esta extensión a Fumisa y la estructura para encubrir la propiedad, luego no le digan que no a las otras concesiones aeroportuarias, incluyendo GAP, OMA y Asur cuya concesión está pronta a ser revisada.

Por lo pronto, el arreglo acordado es: poner esos mismos 80 mdd bajo otros nombres/socios (Tenedora K), quienes ponen un mínimo adicional para que siga volando, reestructurarla y, de paso, lograr el acuerdo con la SCT para que les extiendan su concesión y a los dos o tres años, vender su 95 por ciento en 130-150 mdd, es decir, más de 100% de ganancia.
¿Ahora si queda claro qué tipo de rescate quieren?

Nos dicen que tomado el control accionario, y el viernes, sorprendentemente comenzaron a pagar algunos de los servicios críticos porque soltaron algo así como tres mdd para lograrlo. Los pagos son a cuenta gotas y enfocados a que no les suspendan la operación, salvo sueldos caídos, dado que están dimensionando a la aerolínea con un tercio menos de operación, pero con contratos colectivos que cuesten al menos 50 por ciento menos que los originales.

Sólo te comento: necesitan pagar salarios caídos para levantar la huelga, resolver el problema de arrendamientos de aviones vencidos (por cierto, hay tal enojo entre las arrendadoras de aviones con el abogado Carlos Sierra Vázquez porque más parecía abogado de la quiebra que de ellos, que no sólo lo sustituyen sino que fueron directo con Juan Molinar a quejarse y han movido a toda la FAA para que la SCT no impida que les devuelvan sus aviones, porque no le creen a nadie), además de turbosina, derechos, servicios de aeronavegación, etcétera.
Dicen que a Mexicana la dirige ya Rodolfo Salgado, quien era el Jefe de la Oficina del cambio estructural con el ex secretario Pedro Cerisola. ¿Te vuelve a sonar?