28 febrero 2021

Focos rojos en Aeromar

 

Focos rojos en Aeromar

Estimados lectores, me resulta preocupante lo acontecido en las últimas horas dentro de la empresa Transportes Aeromar; no es cosa menor ni nada que podamos dejar pasar, haciéndonos de la vista gorda.



Ya en ocasiones pasadas he tocado el tema de la falta de seriedad de la administración de la empresa Aeromar. Una de ellas fue la columna “Transportes Aeromar aquí y ahora”, publicada en el portal de Hans Digital, y fui puntual en decir que buena parte de responsabilidad la han tenido los sindicatos, no en un evento singular, sino a lo largo de mucho tiempo.

Así es señoras y señores, tengo que decirles que hoy de manera dramática se prenden los focos rojos. Un tripulante de cabina me hizo llegar vía correo el contenido de la circular que la empresa Aeromar les mandó a sus sobrecargos. Y si a la empresa ya se le olvidó que a sus trabajadores les debe dotaciones de uniformes, y que ha prorrogado una y otra vez las revisiones contractuales y salariales, si pretende olvidar que tiene adeudos en diferentes pagos, aquí dejamos constancia de que a la planta de sobrecargos no se le han olvidado ninguno de esos rubros. Por ello están sorprendidos e indignados de que ahora les pidan que acepten que sus pagos salariales llegarán en “abonos chiquitos”, al igual que sus vales de despensa.



Un franco y total atropello a sus derechos laborales mínimos, y en ASSA (Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación) se han quedado ciegos, sordos y mudos, pues no han hecho absolutamente nada. Caso contrario de lo sucedido en ASPA (Asociación Sindical de Pilotos de Aviación), pues el sindicato de pilotos no ha dudado un instante en realizar un extrañamiento por escrito, solicitando que la empresa cumpla con las obligaciones adquiridas y establecidas en su contrato colectivo.



Lo anterior, sostengo, es una actitud “normal” (esperada y deseada) de la representación sindical de pilotos. Sin embargo la empresa Transportes Aeromar lleva meses enteros sin entregar la cuota sindical correspondiente a ASSA. No es chisme, esa información se desprende y así consta en las diferentes circulares la asociación sindical de sobrecargos ha emitido para documentar los “Ingresos y Egresos” del sindicato.

No puedo dejar de pensar ¿quién se está jineteando el dinero, la empresa, el sindicato, ambos?, son meses los que adeuda la empresa y parece que a la representación simple y sencillamente no le importa en lo más mínimo.

Pongamos en orden estas ideas. El sustento del sindicato de sobrecargos proviene  de las cuotas sindicales pagadas por sus agremiados; tan es así que por eso ASSA tuvo con colapso financiero cuando Mexicana de Aviación y Click fueron bajadas de vuelo; más de la mitad de sus ingresos se vieron mermados de un día para otro.

¿Cómo es que la institución sindical puede sobrevivir con sólo dos cuotas sindicales, las de Aeromar y las de Aeroméxico?, observemos que no hubo ningún adelgazamiento al personal administrativo que trabaja en la sede sindical, tampoco hubo algún recorte en el gasto corriente, tampoco existe un plan de ahorros con la finalidad de seguir subsistiendo.

De manera inexplicable, el sindicato ha estado recibiendo una extraña “ayuda sindical por parte de la empresa Aeroméxico”, cuyos montos fluctúan desde los 90 mil pesos hasta más de 5 millones de pesos, mensuales. ¿Quién me lo dijo? Lo dice ASSA en sus circulares oficiales.

¿Es posible vivir, como sindicato, sin la cuota de los trabajadores de Aeromar?, ¿es suficiente lo que se recibe de cuotas y sanciones sindicales de los trabajadores al servicio de la empresa Aeroméxico?



Pareciera que los sobrecargos de Aeromar, agremiados a ASSA no son para nada importantes para la representación. Es cierto y evidente que el número de agremiados es mucho menor que el de los de Aeroméxico pero, eso no es motivo suficiente para que los consideren “menos importantes”.

La delegada de Aeromar, recién electa, ha mandado escritos a los sobrecargos de su empresa, avisando que nadie de la representación sindical le ha hecho entrega de la cartera, y que cualquier duda o requerimiento por parte de los sobrecargos la dirijan al Secretario de Conflictos, Emilio Caro, o en su defecto a la Secretaria de Trabajo de ASSA, Sandra Carrillo, también electa en el proceso electoral de noviembre pasado, terminando su gestión como delegada de Aeroméxico.

Podemos creer, mis estimados lectores, que lo anterior es algo extraño y fuera de lugar, pero no lo es. La actual delegada de Aeromar no es parte del equipo del Secretario General, por lo tanto está siendo relegada, tratando de hacerla “entrar al aro”, se cuadre y rinda pleitesía al “dueño” de ASSA Ricardo Del Valle.

La empresa Aeromar lleva mucho tiempo abusando de los trabajadores, pero no es sólo culpa de la empresa; el sindicato ha dejado de ser ese lugar necesario donde se defienden los derechos de sus agremiados, y se ha convertido en una ventanilla más de la empresa para atender al trabajador. De poco o nada le sirve al trabajador esa entelequia famélica y carísima.

¿Ven por qué digo que los focos rojos están encendidos? Es insostenible la actitud negligente y abúlica del sindicato de sobrecargos. No puede ser que los trabajadores no tengan a dónde acudir para defender sus derechos, debido a la colusión entre el sindicato y la empresa. Es la representación sindical la que está facultada y moralmente obligada a dar un buen manazo en la mesa y decir: ¡ya basta!

Para nadie es un secreto que la actual Secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa Alcalde es hija del asesor jurídico del sindicato de sobrecargos. No digo que sea ilegal, pero debo ser enfática en señalar que nadie en el Gobierno Federal ha hecho eco de las denuncias que se suscita por conflicto de intereses. Ya sé que no existe ninguna ley que lo prohíba, pero no parece un movimiento coherente con quien trae un discurso de “regeneración nacional”. En los hechos, los trabajadores están una vez más en la plena indefensión, como si estuviéramos en el siglo XIX y bajo el porfiriato.



Compañero trabajador, no aceptes el discurso que te pide “agradecer que tengas trabajo”. Tienes todo el derecho de cuestionarte: “Sí, tengo trabajo, pero ¿a qué precio?”. Aquellos que tienen en sus manos, y en sus decisiones, la vida de los trabajadores, deben darse cuenta que no es pecata minuta ignorar sus demandas. Cada vez son más los signos de hartazgo y cansancio por el abuso empresarial. Cada vez son más los que están dispuestos a exigir el respeto a sus derechos. Tan solo el mundo aeronáutico ya tiene muchos focos rojos encendidos; ¿vale la pena dejar que se calienten todavía más los de Aeromar?

Ximena Garmendia

28 de febrero 2021

 

 

 

 

21 febrero 2021

Las cuentas opacas de ASSA

 

Las cuentas opacas de ASSA

Hace muchos años, antes de que el actual, y sempiterno, Secretario General Ricardo Del Valle llevara las riendas del sindicato de sobrecargos, la transparencia y claridad en las cuentas financieras de la asociación era algo un poco más que imperativo, es decir, un deber inexcusable, sobre todo después de los fraudes cometidos en la última gestión de Alejandra Barrales; este tema lo abordé con anterioridad en la columna “Siguiendo los pasos de su mentora”, publicada en este mismo espacio.



Sin embargo, hoy traigo de nueva cuenta el tema de los “ingresos y egresos” del sindicato, y es que a cuenta gotas, la representación sindical ha ido “subiendo” al iPad de la empresa Aeroméxico las circulares que se deben emitir mes con mes, con la finalidad de tener transparencia en el manejo de los recursos económicos del sindicato.

Gracias a los compañeros he podido recolectar las circulares; el 11 de febrero tuvieron a bien enviarme tres circulares más, todavía queda pendiente la circular de “Ingresos y Egresos” del mes de enero del año pasado, pero en esta ocasión, sólo hablaré de las tres más recientes, mismas que corresponden a los meses de agosto, septiembre y diciembre de 2020.

Desglosaremos las mismas para hacer un análisis de su contenido. La circular del mes de agosto comienza con los ingresos que obtiene ASSA por diferentes rubros, como son:

  • ·         Cuota sindical de los sobrecargos de la empresa Aeroméxico
  • ·         Sanción sindical a los sobrecargos de la empresa Aeroméxico
  • ·         Ayuda Sindical Aeroméxico
  • ·         Cuota sindical de los sobrecargos de Aeromar
  • ·         Sanción sindical a los sobrecargos de Aeromar
  • ·         Otros

Me enfocaré con el tema de “Ayuda Sindical Aeroméxico”; dicen que en el mes de agosto le dieron al sindicato $90,000 pesos. En el Contrato Colectivo de Trabajo con dicha empresa, lo único que recibe de “ayuda” por parte de la empresa en cuestión, es por el concepto de “Becas Escolares”, mismas que están estipuladas en la cláusula 70 del CCT; posteriormente está la cláusula 71 que se refiere al “Festejo del Sindicato”, y del cual la empresa aporta una cantidad anual.

Ustedes deben saberlo, pero en ningún lado del Contrato Colectivo de Trabajo existe el rubro “Ayuda Sindical Aeroméxico”. Aquí comienza la opacidad, porque el sindicato no puede recibir “ayuda” de la parte empresarial, pues sería equiparable a comprar la voluntad de la representación sindical.

Pero continuemos, la circular desglosa los egresos de cada Secretaría y omite los gastos de las Comisiones de Vigilancia, Hacienda y del Tribunal de honor y Justicia, como si no formasen parte de la representación.

Quiero ser enfática, y sólo haré señalamientos a los rubros que se salen de toda lógica. Primero, en el caso del Secretario General, hay un pago de $3,500 pesos por concepto de “Comisión Política”, pero al comisionado se le pagan los mismos emolumentos, como si fuera representante sindical ¿por qué pagar $3,500 pesos más?

Pasando a la Secretaría del Interior, surge la duda: ¿por qué pagan por un servicio de televisión de paga en el sindicato?, en mis años de gestión jamás se pagó por un servicio de televisión por cable, y dicho pago está integrado al pago de telefonía y ¿nextel?, pero sí llevan años en el sindicato que nadie usa Nextel. ¿Ya vieron que todo suma $33,751 pesos?.

Desde el mes de marzo el sindicato está cerrado, ¿por qué se pagó por equipo de protección y sanitización en el mes de agosto $641,372 pesos?

Debo hacer notar que después de muchas circulares en las que no se hizo mención a la Guardería del sindicato, por fin aparece el rubro de “Seguro de la Guardería” y se pagan $37,836 pesos, sin especificar la periodicidad del pago ¿es anual, mensual, bimestral…? ¿dónde había estado este tema?

Llegamos al rubro de “Sueldos y Salarios”. Supongamos que se refiere a los emolumentos de los representantes sindicales. La erogación fue por $1,030,887 pesos; si lo dividimos entre 25 representantes sindicales, les tocaría de aproximadamente de $41,235.48 a cada uno. Sin embargo, este rubro de “Sueldos y salarios” es más bien referente a los salarios de los trabajadores administrativos del sindicato. En todo caso, debería de aparecer como “Emolumentos a la representación sindical”.

Otra erogación que me llama mucho la atención es la relativa a que, desde el mes de marzo el sindicato completo se encuentra haciendo “Home-office”. Vuelve a aparecer “Mantenimiento y reparación del edificio”, el cual tuvo un costo de $129,642 pesos. Y los baños siguen sin tornillos, así que, ¿a dónde se fue ese dinero? porque en la sede sindical no se ve.

Baño de la planta baja del edificio sindical, foto tomada en noviembre

Baño de la planta baja de la sede sindical, foto tomada en noviembre


El último rubro es referente a la Secretaría del Interior. Se refiere al “equipo de cómputo”, esto es, han estado renovando el equipo del sindicato, y en el mes de agosto fueron $51,999 pesos destinados a la adquisición de computadoras.

Ahora vayamos con la Secretaria Tesorera; aquí aparece una erogación por demás curiosa y es la denominada “Gastos de operación”, ¿son los emolumentos de los representantes o son los salarios de los trabajadores administrativos?, no queda claro, pero el gasto fue de $896,500 pesos. Además, se le paga a un despacho contable para que haga el trabajo de la Secretaria una cantidad de $149,640 pesos. Sí el sindicato estaba cerrado desde marzo, ¿por qué en agosto se pagaron $22,195 pesos por concepto de “Traslado de valores”? Y se repite el gasto de “Telefonía”, $16,612 pesos. ¿Podrían ponerse de acuerdo?, o paga el teléfono la Secretaría del Interior, o la paga la Secretaria Tesorera.

Y ya para concluir, en la Secretaría de Previsión Social se pagó por concepto de “Asesoría Médica” $34,800 pesos, ¿pero por qué? y en el caso de la Secretaría de Prensa, se está pagando un “rediseño” de la página web del sindicato que sigue sin realizarse, eso sí, en el mes de agosto se pagó $791 pesos.

Antes de pasar al siguiente mes, pregunto ¿dónde está el concepto de Cuota sindical de los sobrecargos de Mexicana de Aviación?, porque a los sobrecargos de estaban en Mexicana y ahora vuelan en Aeroméxico, les cobran doble cuota sindical, la correspondiente a la Compañía Mexicana de Aviación y la cuota de Aeroméxico.

Pasemos al siguiente mes, septiembre. Aquí me llama la atención que desaparece el rubro de “Cuota Sindical Aeromar” y “Sanción sindical Aeromar”, lo que me lleva a cuestionarme ¿en el mes de septiembre la empresa Aeromar no pagó absolutamente nada de cuotas sindicales de sus trabajadores?, esto sería una gran irregularidad, y el sindicato jamás se ha pronunció al respecto.

Ante la falta de este rubro con la empresa Aeromar, aparece de nueva cuenta “Ayuda Sindical Aeroméxico”, pagando $1,965,000 pesos, ¿cómo es posible que el mes anterior sólo diera por “Ayuda Sindical” 90 mil pesos y ahora desembolse la aerolínea del caballero Águila casi dos millones de pesos? Queridos lectores, ¿ustedes le encuentran alguna lógica?, porque yo no.

Otra vez en la Secretaría General, se erogaron $3,500 pesos para la Comisión Política. En la Secretaría del Trabajo se pagaron $5,189 para las “Comisiones Mixtas”. Cuando yo era representante sindical se les pagaba la mitad del emolumento por el tiempo de trabajo en las juntas con la empresa.

En septiembre y con sindicato cerrado, la Secretaría del Interior reporta el gasto por insumos de cafetería, cuyo monto asciende a $4,720 pesos ¿Quién va a ASSA a tomar café y paga por equipo de protección y sanitización por Covid $4,576 pesos?, ¿no les parece muy disparado que el mes anterior pagaran más de medio millón de pesos por dicho concepto?

Para los que no lo recuerden, les informo que fui adjunta de la Secretaría de Actas del 2004 al 2007. Luego fui electa para el periodo 2007 al 2011 como titular de la Secretaría de Actas, así es que conozco a la perfección el presupuesto de la cartera, y el único rubro autorizado es para pagar las copias certificadas de las Tomas de Nota del sindicato; el presupuesto anual de aquel entonces no sobrepasaba los 10 mil pesos, pero en la revisión que ahora hago de la circular correspondiente me encuentro con un rubro de “Eventos”, en el mes de septiembre, con una erogación de $197,461 pesos. Ojo!!!, la Secretaría de Actas no hace eventos, no está dentro de sus funciones estatutarias ¿a quién pretenden verle la cara?, de verdad, como si no existieran circulares de gestiones anteriores donde podemos comprobar los rubros de erogación del sindicato.

En el rubro de la Secretaria Tesorera, otra vez aparece el traslado de valores por más de 22 mil pesos en un sindicato cerrado. Otra vez la asesoría médica por $34,800 de la Secretaría de Previsión Social y en el caso de la Secretaría de Prensa, el pago por el “rediseño” de la pagina web, ahora por $3,044 pesos.

Llegamos finalmente a la circular del mes de diciembre, y aquí las cifras se disparan aún más. Comencemos por los ingresos; además de la cuota sindical, ahora ya no está el rubro de “Sanción Sindical”, pero sí aparece la “Ayuda” de parte de Aeroméxico, en esta ocasión por $5,835,373 pesos. De nuevo en el caso de la empresa Aeromar no aparece ni la cuota ni la sanción sindical. Lo cual es preocupante, ¿el sindicato no ha hecho un requerimiento de pago a la empresa Aeromar?, ¿por qué?

En el mes de diciembre, en la Secretaría General aparecen tres conceptos que me inquietan; todo se ha hecho “Home-office”, así que ¿por qué cobra $17,732 pesos por “Gastos de representación? Si en dicho mes estuvimos en semáforo ROJO.

De nuevo aparece el pago a la Comisión Política por $3,500 pesos y el último es el pago a jubilados de Mexicana de Aviación de la primera generación por $1,213,568 pesos. Hasta donde tengo información, en el año de 2010 eran cerca de 25 sobrecargos, ya casi todos rondando los 90 años… y pregunto ¿a qué sobrecargos se les pagó, en caso de que sigan vivos?

Vayamos a la Secretaría del Interior; por concepto de “Salarios y Sueldos”, se dispuso de $2,354,669 pesos, que confirma que dicho monto es referente al pago del personal administrativo, porque los representantes no reciben ningún sobre pago, sólo los emolumentos, que dicho sea de paso, no aparecen en ninguna de las circulares del sindicato.

Se pagó por equipo de protección y sanitización a un edificio cerrado y sin gente la nada despreciable cantidad de $497,991 pesos. Recordemos que las elecciones fueron en noviembre; para el mes de diciembre, con semáforo rojo y sin nadie en el edificio sindical ¿se gastó casi medio millón de pesos?

Sigamos, “Comida de fin de año”, en pleno semáforo rojo ¿de verdad quieren que crea que le hicieron su comida al personal administrativo del sindicato?, por la cual supuestamente pagaron $199,520 pesos. Y ya ni hablemos del pago a sistemas, mientras en los meses de agosto y septiembre en promedio se pagó 40 mil pesos, en diciembre se desembolsó $80,386 pesos. Voy a ser la mar de reiterativa ¿en un edificio sindical cerrado?

El mes de diciembre, la Secretaria Tesorera vuelve a pagar un traslado de valores, ahora por $24,309 pesos, sí, ya lo saben, en un edificio cerrado.

A la Secretaría de Previsión Social hay que sumarle los $34,800 pesos de “ayuda médica”, y casi cinco mil pesos de “arreglos florales” ($4,775 pesos, para ser exactos).

Y de ahí nos saltamos a la Secretaría de Prensa, quien está “pagando” por el rediseño infinito de la página web, que lleva años igual, la cantidad de $2,630 pesos,  y habrá que añadirle el mantenimiento de la misma; sólo el primer semestre de 2021, representó el gasto de $951,200 pesos.

Sabemos que los sobrecargos le tienen pavor a la representación sindical, pero sería un momento excelente para realizar una auditoría externa, que aclare por qué existen pagos dobles de teléfono, una inexplicable “ayuda de la empresa Aeroméxico”, cobros no reflejados en los ingresos como lo son las cuotas sindicales de los sobrecargos de Mexicana que ahora vuelan en Aeroméxico, gastos de operación hechos en pleno semáforo rojo y con la sede sindical cerrada; pregunto ¿a quién demonios quieren verle la cara?, ¿será por eso que se han negado a realizar las asambleas ordinarias y las de presupuesto?

Todas estas serían preguntas incómodas si yo estuviera pidiendo cuentas de lo que hacen los representantes sindicales con sus emolumentos. Pero estamos hablando del patrimonio de la Asociación Sindical a la que están afiliados los sobrecargos. Y ese conjunto de bienes, y de dinero provienen de las cuotas que todos y cada uno de ellos, que aportan y son descontadas religiosamente de sus sueldos. Ninguno de ellos puede decir que los últimos doce meses han sido fáciles. Todos han resentido en sus bolsillos una merma considerable, en la que cada peso, cada centavo es importante y necesario. ¿Por qué dejar que la representación sindical tenga este desaseo en las cuentas? Como quedó desglosado, no son tres pesos de lo que estamos hablando. Son fuertes cantidades, y lo peor es que si no se hace nada ahora, ese tipo de prácticas seguirán siendo cometidas.

¿Los sobrecargos están de acuerdo en que siga la opacidad en el manejo financiero del sindicato? La Secretaría de Trabajo y Previsión Social, en manos de Luisa Alcalde, lo dice cada que puede: “no se puede entrometer en la autonomía sindical”. Traducción: que los trabajadores seguimos en el desamparo total, ni a quién acudir. Pero esa respuesta está muy lejos de ser el punto final de esta historia. Hay muchas cosas que se pueden hacer, y una de las primeras, es exigir las cuentas claras, y el chocolate espeso.

Anexo todas las circulares aquí desglosadas

Ximena Garmendia

20 de febrero 2021








 

 

 

14 febrero 2021

La huelga de Interjet

 

La huelga de Interjet

Hoy más que nunca es imperante saber por qué la aerolínea Interjet está en huelga; para ello debemos hacer un viaje en el tiempo, así que les recomiendo se pongan cómodos y me acompañen en esta travesía.



El tema debe subrayarse, porque después pasa que en el imaginario popular, la gente cree que hay empresas que cayeron en desgracia por culpa de una huelga. Ustedes pregunten, y la mayoría de las personas creen que es el caso de Mexicana de Aviación; y esto no es cierto, la empresa fue arteramente bajada de vuelo por las autoridades para solapar el fraude de un empresario. Jamás los trabajadores estallaron una huelga.

Regresando al tema de Interjet, he de señalar que su crisis viene aproximadamente dos años antes de la pandemia por Sars-Cov-2. Sin lugar a dudas su situación financiera es consecuencia de las decisiones de sus dueños, los Alemán, quienes anunciaron que ponían la empresa a la venta en noviembre de 2018, pero que en 2019 optaron por cambiar de director.

Desde su fundación, en el año de 2005, el director de la compañía fue José Luis Garza, y el cambio parecía obedecer a que en el año 2018 la empresa registró pérdidas por $979.8 millones de pesos, en tan sólo en un trimestre. Anunciaron con bombo y platillos el arribo de William Shaw, un experimentado CEO en diversas compañías aeronáuticas y con vasta experiencia en el mercado de las “bajo costeras”.

Esto sin olvidar que desde 2018, a la empresa del caballero Águila se le metió entre ceja y oreja que su “competidor más cercano” era Interjet y buscaba aniquilarlo. El método usado por Aeroméxico para mermar a su competencia fue simple pero eficaz, y gracias al sindicato de sobrecargos ASSA (Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México), un representante sindical se apersonó durante las temporadas altas en la Terminal Uno (T1) del aeropuerto capitalino para “invitar” a los sobrecargos a dejar tirados sus vuelos (esto es, a no presentarse al vuelo sin que les importaran las consecuencias que estos actos conllevan: cancelaciones, demoras, etc.) y que mejor fueran al sindicato, para que de forma exprés les dieran entrada en la aerolínea del caballero Águila.

Es fácil adivinar el resultado de esa estrategia; por dos años Interjet sufrió una desbandada de sobrecargos que le traían dos problemas inmediatos: las demoras y cancelaciones, así como el tener que contratar personal nuevo e inexperto, con los consecuentes gastos de adiestramiento, uniformes, y un largo etc.

A todo este caldo de cultivo hay que sumarle la decisión tomada por la administración de Interjet de comprar equipos Sukhoi Superjet 100-95B (SSJ100); para unos representa el equipo que estuvo dando servicio hasta los últimos días de actividades de la Aerolínea; para otros, fue la tumba de Interjet, que no tenía por qué dejar a los equipos Airbus de lado.

Y si todo lo anterior no fuera ya suficiente para “liarla parda” (dirían los españoles), en mayo de 2019, Interjet solicitó un préstamo a Bancomext por 150 millones de dólares. En los bajos mundos de la aviación hubo quienes afirmaban que era “un rescate disfrazado de la 4T”, otros señalaban que era para que los Alemán pudieran terminar de comprar una radiofónica, y algunos más dijeron que era para pagarle a Cabal Peniche, quien supuestamente iba a invertir 150 millones de dólares.

Con ese escenario llegamos al fatídico 2020. Por muchos meses la empresa trató de salir a flote, pero las deudas se la iban comiendo cada vez más; al ver disminuidas las operaciones, era obvio que la bomba de tiempo estallaría en cualquier momento.

Para no mancharse las manos, los Alemán hicieron un cambio en “la mesa de accionistas” y pusieron a los Del Valle, padre e hijo, a dar la cara con el discurso de que serían ellos los que afrontarían los retos para sacar avante a la aerolínea. Hoy sabemos que el Pleno de la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) impuso una multa de 955 mil 680 pesos a Interjet, así como a la compañía HBC Internacional, propiedad de los Del Valle (padre e hijo como accionistas, e hija como única administradora) por no notificar a tiempo la concentración de recursos entre ambas y por tanto violar lo establecido en la Ley Federal de Competencia Económica. ¿Se les habrá olvidado dar el aviso?, ¿También habrán olvidado avisarle a la SCT, al SAT, a ASA?

Sin embargo, cuando estos personajes hacen su aparición en la puesta en escena, ya comenzaban los adeudos con su personal, los “no-pagos” empezaron a acumularse y la desesperación hizo mella en los trabajadores. Este grupo, a pesar de todo, fueron los que, en aras de continuar manteniendo su fuente de empleo, estuvieron trabajando sin salario por meses, dando lo mejor de sí, hasta donde les fue humanamente posible.

Estoy segura de que ustedes, como yo, nos hacemos las mismas preguntas: ¿y dónde estuvieron las autoridades todo este tiempo?, ¿dónde estuvo la Secretaría de Comunicaciones y Transportes?, ¿sabía que parte del trabajo de la SCT es realizar de manera anual una auditoria a las concesiones, en este caso a Interjet?, ¿por qué permitió el gobierno que la empresa dejara de pagarle al SENEAM? (es quien brinda los servicios de aeronavegación), ¿dónde estuvo la Secretaría de Trabajo y Previsión Social cuando la empresa dejó de pagarle al Fonacot, dependencia que valga la redundancia depende de la STPS?, ¿por qué se permitió dejar de pagar IMSS, Infonavit, ISR? ¿y la deuda por pago de turbosina y servicios aeroportuarios a ASA?, y así me podría seguir.

De esta forma llegamos al 18 de diciembre, día en que a través de un correo electrónico la empresa informó a sus trabajadores que hasta el 31 de diciembre dejarían de prestar servicio de aero-transportación a sus usuarios, poniendo en una lista los números de vuelos, y los días a cancelar.

Evidentemente los trabajadores tuvieron que asumir la responsabilidad de dar la cara a los pasajeros, y hacer malabares para explicarle a un furioso monstruo de mil cabezas alguna razón lógica y creíble que hiciera inteligible una decisión inverosímil: que simplemente los dueños de Interjet, de manera unilateral tomaron la decisión de ya no operar ningún vuelo.

Ante este panorama los trabajadores, que llevaban meses sin cobrar su salario, con el miedo justificado de algunos a perder el techo donde viven, por la falta de pagos de la empresa al Infonavit, presionaron a su sindicato a tomar medidas al respecto; la propuesta de estallar la huelga llevaba meses en la mesa, pero su fecha de estallamiento se prorrogó en varias ocasiones, por el deseo de los trabajadores de seguir sacando adelante a su empresa.

20 días después de que la patronal dijo “no volamos”, los trabajadores optaron por estallar de una buena vez la huelga, en una empresa que ya no estaban operando los vuelos, con la única finalidad de salvaguardar los pocos bienes de la empresa y hacer que las autoridades voltearan a verlos.

Sin embargo, para decepción de los trabajadores, la autoridad laboral admitió el argumento interpuesto por la empresa de que cuando se estalló la huelga “no lo hicieron todos al mismo tiempo…” (y tomados de la mano entonando Cumbayá), así que nuestras autoridades, tan competentes, sugirieron que a más de un mes del estallamiento, se haga un nuevo “recuento”, para ver sí los trabajadores están de acuerdo o no con la huelga, y entonces estar en condiciones de declararla “válida o inválida”.

Mientras los trabajadores siguen perdiendo tiempo y vida, a los dueños y a las autoridades parece no molestarles en absoluto todo lo que se pierde con la salida de Interjet del mercado nacional. Hace unos días American Airlines anunció nuevas llegadas a Mérida y Cancún, en lo que ellos llaman sin empacho “la conquista del sureste mexicano”.

Como lo he explicado en diversos videoblogs, tanto en Facebook como en la plataforma de videos YouTube, hay varias salidas dignas para el caso de la empresa Interjet, el chiste es que los involucrados quieran y tengan la altura de miras para resolverlo. Y si mi punto de vista es erróneo o incompleto, ya va siendo hora de que el debate suba a la palestra.

No podemos quedarnos cruzados de brazos dejando que en el imaginario colectivo, una vez más, seamos los trabajadores los que carguemos con el muertito de las quiebras de las empresas, además de llevar la peor parte en términos económicos, mientras los dueños, con el beneplácito de los gobernantes, no se despeinan en absoluto.  

Ximena Garmendia

14 de febrero 2021

 

Les dejo unas imágenes de los adeudos que al día de hoy tiene Interjet











07 febrero 2021

Secretaria… ¿de qué lado está?

 

Secretaria… ¿de qué lado está?

Cuando se desdibuja la línea que un funcionario público debe de respetar, los trabajadores quedamos en la orfandad total. Dejen que me explique. La actual Secretaria del Trabajo y Previsión social, en un video publicado en sus redes sociales oficiales, muestra la firma del acuerdo entre Aeroméxico y el sindicato de sobrecargos, ASSA; pero en ese material audiovisual no vemos a una funcionaria imparcial, cuidadosa del cumplimiento y observancia que se le debe dar a la Ley Federal del Trabajo; lo que presenciamos fue una complicidad que no se entiende.



Firma entre Aeroméxico y ASSA


Y precisando, para que no haya lugar a dudas, el 3 de febrero cerca de las 15:00 horas, el equipo que maneja las redes sociales de la Secretaria Luisa María Alcalde (quiero pensar que fue su equipo), consideró una buena idea subir un video editado de la firma entre empresa y sindicato. Con buena calidad de imagen, un audio impecable, sin margen de errores y musicalizado de una forma que los espectadores nos quedamos esperando que aparecieran corazones y emoticones felices en medio de las imágenes.

Primera pregunta ¿qué es, propiamente dicho, lo que hace la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de nuestro país?

De acuerdo con la leyes administrativas del país, y la propia información de la dependencia de gobierno, creada en 1941,… “Es la encargada de diseñar, ejecutar y coordinar las políticas públicas en materia de generación de empleos, las relaciones contractuales, las agrupaciones de trabajadores, los derechos laborales y los Derechos sociales emanados de los anteriores. Todo lo anterior deberá vigilarlo y operarlo en función de lo que determinan el artículo 123 constitucional y la Ley Federal del Trabajo.” De esta importante institución también dependen las Juntas de Conciliación y Arbitraje, la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo, mejor conocida como PROFEDET y Fonacot.

Con esto expuesto, veamos con detalle el video: en toma abierta vemos del lado izquierdo de la pantalla a Andrés Conesa, director de la aerolínea Aeroméxico; a su lado hay otra persona que por el cubrebocas no logro identificar, al centro Luisa María Alcalde y del lado derecho de la pantalla se ubica Ricardo Del Valle, Secretario General de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México. Todos con cubrebocas.

El primero en hablar, dentro de este video ya editado y musicalizado es Andrés Conesa y dice “Los que estamos aquí firmando, ratificando, es producto de mucho trabajo, simplemente significa que todos los trabajadores, todos en conjunto estamos aportando, estamos rescatando a la empresa, eso nunca antes había pasado pero estoy seguro que con este tipo de acuerdos nos vamos, vamos a salir adelante hasta ir fortalecidos de esta”

La toma se abre y ahora enfoca a Ricardo Del Valle, quien dice lo siguiente: (en la transcripción se conservan los titubeos y traspies de las intervenciones) “Estamos muy conscientes desde que este aporte que que dieron nuestros compañeros con un proceso muy fuerte como lo lo que comentábamos, eh… seguramente se verá retribuido en en nuestra empresa, la aerolínea bandera siga saliendo adelante y que en los próximos años sea una aerolínea mucho más fuerte. Sin nuestros compañeros sobrecargos, sin los trabajadores nosotros no seremos nada. Eso es reconocer el trabajo de nuestros compañeros sobrecargos también y desde luego creemos que con este aporte que estamos dando y y con todas las medidas que se tengan que hacer derivado de la pandemia, podemos estar pensando en que Aeroméxico siga surcando los cielos del mundo por muchos años más.

Del discurso del líder sindical me preocupa una frase, ¿está diciendo que para que Aeroméxico siga surcando los cielos del mundo los sobrecargos van a aceptar “todas las medidas que se tengan que hacer derivado de la pandemia”? ¿cuáles son los alcances de esta frase, en boca de Ricardo Del Valle? ¿acaso está anticipando que no meterá las manos sí la empresa solicita más recortes de personal, por ejemplo?

La cámara vuelve a enfocar a todo el grupo, y de nueva cuenta toma el rostro de la titular de la Secretaría del Trabajo, que tras su cubrebocas azul rey expresa lo siguiente: “Asistimos a una reestructuración temporal de las condiciones de trabajo que no tiene otro objetivo que precisamente el poder salvar a la empresa, salvar empleos y poder lograr que haya viabilidad para continuar y para salir eh, adelante. Es de reconocerse que ambas partes hayan podido hacer esto, es la importancia de que estos acuerdos se hagan a través de procesos democráticos. Esto como ustedes saben es uno de los objetivos que estamos buscando a través eh, de la reforma laboral. Lo que nosotros estamos convencidos, es que el diálogo y la concertación, las razones, los argumentos, ponerlos por enfrente siempre nos llevan a soluciones, este, a mejores soluciones. Así que gracias a este eh, a esta firma del día de hoy logramos que Aeroméxico siga volando”

El video termina con la imagen de Andrés Conesa, Luisa María Alcalde y Ricardo Del Valle sosteniendo unas carpetas que, infiero, contienen los documentos signados. La música “motivadora” permanece hasta el final.

No me parece que sea asunto menor el discurso de la titular de la Secretaría del Trabajo. La Maestra Alcalde Luján abre su participación manifestando que “asistió” a la reestructura, pero ¿con qué carácter o personalidad jurídica?, ¿asistió cómo mero observador del proceso? ¿cómo mediadora?, ¿cómo garante o testigo de buena fe?, ¿cómo parte involucrada, ya que su padre es asesor legal del sindicato de sobrecargos, dirigido por Ricardo Del Valle?

Arturo Alcalde Justiniani en Asamblea General Extraordinaria de ASSA




¿Qué piensan ustedes, amables lectores, del sofisma utilizado hasta la náusea, que enarbola el sacrificio del trabajador en aras de salvaguardar a la empresa? En otras columnas y en diversos videoblogs, he desglosado y explicado detalladamente con base en los datos que aporta el Capítulo 11 en Estados Unidos, que el costo de la nómina de los trabajadores sindicalizados es la más barata, a pesar de que representan el 70% del total de trabajadores de la empresa.

La encargada de velar que los derechos de los trabajadores sean respetados de acuerdo al artículo 123 de nuestra Carta Magna dice: “Es de reconocerse que ambas partes hayan podido hacer esto, es la importancia de que estos acuerdos se hagan a través de procesos democráticos”, y yo no puedo soslayar que Luisa María Alcalde ha hecho caso omiso a todas las denuncias que diferentes trabajadores han realizado en la dependencia a su cargo, siempre argumentando la misma respuesta: “no podemos inmiscuirnos en la autonomía sindical”; entonces ¿por qué el día 27 de enero, cuando terminaron las Juntas Particulares por empresa con los sobrecargos, salió a validar el acuerdo emanado de las mismas, aunque todavía el proceso no había concluido?

 No puede alegar desconocimiento o ignorancia, pues su padre, el Lic. Arturo Alcalde Justiniani es quien revisa la tramitación, conforme a los estatutos, de dicho proceso interno, y sabe perfectamente que después de las Juntas Particulares, los acuerdos deben ser sancionados en una Asamblea General Extraordinaria para que tengan validez plena; antes no eso, no tienen efecto ni validez jurídica alguna.



Sin embargo, dicha Asamblea General Extraordinaria no se había llevado a cabo, porque estaba programada para el día siguiente. Debo señalar que al ser una Asamblea General Extraordinaria, debimos acudir todos los agremiados al sindicato. A pesar de que muchos solicitamos en tiempo y forma nuestro registro a la “asamblea virtual”, el acceso nos fue negado por no pertenecer a la empresa Aeroméxico, contradiciendo la ley interna del estatuto que marca quiénes pueden acudir a este tipo de asambleas.

Existen pruebas de que al día siguiente, cuando se celebró la asamblea, Ricardo Del Valle evitó preguntarle a la misma sí estaban de acuerdo en sancionar los acuerdos emanados de las Juntas Particulares por Empresa; al no hacerlo incumplió con lo que mandata el estatuto en vigor, en su artículo 51 fracción V. Esto es, sí no hay aprobación por parte de la asamblea, dichos acuerdos no son válidos. Pero eso no importó, desde la noche anterior, la Secretaria del Trabajo y Previsión Social ya había dado por válida la votación en sus redes sociales, incluso antes de que lo hiciera el propio Secretario General de ASSA.

Y por si fuera poco todo este pisoteo escandaloso de nuestros estatutos, debo mencionar, para que quede constancia, la existencia de todas las amenazas que sufrieron los sobrecargos durante la votación. Hubo a quienes les llamó por teléfono algún miembro de la representación sindical para reclamarles haber votado “en contra de Ricardo”. A otros les hicieron modificar el sentido de su voto cuando regresaron de su servicio o vuelo, así que si ese día habían votado en contra, por la noche, cuando ya estaban a punto de partir a descansar a sus casas, los representantes los interceptaban y les pedían votar de nuevo pero ahora a “a favor de salvar la empresa”.

Es indefendible la ceguera de la Secretaria del Trabajo, que permitió que los trabajadores votaran con una espada que los puso contra la pared, ya que las  votaciones, tanto en el caso de pilotos como sobrecargos, se llevaron a cabo al mismo tiempo que Aeroméxico les notificó de la existencia en su contra de una demanda de Conflicto Colectivo de Naturaleza Económica.

No es la primera vez que la empresa utiliza esta argucia “legal” para mermar las condiciones de sus trabajadores, y afectar su ánimo para conducir el sentido de su voto. La primera vez que recurrió a esta figura fue en el año 2008, un año antes de la pandemia del AH1N1. Para neutralizar el litigio en tribunales, los sobrecargos firmaron un convenio de ahorros que incluyó, entre varios rubros, ceder 5 días de vacaciones, a cambio de una promesa, por parte de la empresa, de que no correría sobrecargos.

Quienes conocemos esta forma de actuar de la empresa, sabemos que no cumplió con su palabra y de todas formas corrió a varios sobrecargos de forma injustificada, razón por la cual el sindicato de aquel entonces estuvo peleando su reinstalación.

La siguiente ocasión que Aeroméxico utilizó esta figura legal fue en abril de 2013. Nuevamente el grupo de sobrecargos fue el objetivo; la empresa se desistió de esta demanda una vez que en septiembre de 2014 pactó con ASSA un nuevo contrato de sobrecargos, denominado “B”, con un costo del 60% menos que el contrato original, que pasó a ser denominado “Contrato A”.

Alguien debería hacerle llegar esta información a la actual Secretaria del Trabajo (su papá sería el mejor canal), para que se diera cuenta de este “modus operandi” tramposo y sucio que tiene Aeroméxico contra sus trabajadores sindicalizados. De esta manera se evitarían eventos como el suscitado el pasado 12 de enero, fecha en que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje estaba “estudiando” si admitía dicha demanda. Recordemos, ¿bajó qué mando están las Juntas de Conciliación?, ¿Acaso Luisa María Alcalde Luján no estaba enterada de que Pilotos y Sobrecargos estaban votando con la pata de Aeroméxico en sus cuellos?, ¿esto es lo que ella reconoce como un acuerdo producto de un proceso democrático?

Me preocupa el plural que utilizó al decir “hoy logramos que Aeroméxico siga volando”. Por eso mi pregunta inicial: ¿de qué lado está, Secretaria? Porque del lado de los trabajadores, es evidente que no.

P.D. Dejo el link al video expuesto en esta columna: https://fb.watch/3vKp7u0aV1/

Ximena Garmendia

7 de febrero 2021