Todos los pasos en la búsqueda del hombre que fuera dueño de Mexicana de Aviación cuando se declaró en concurso mercantil, conducen a Estados Unidos.
La orden de aprehensión que libró un juez federal por lavado de dinero en contra de Gastón Azcárraga Andrade este miércoles 19 de enero se complementó con una orden de búsqueda de la Interpol.
Sus pasos más visibles fuera de México se encuentra en Nevada, Texas y Florida, donde el empresario ha participado en empresas públicas durante los últimos 25 años.
Sus vínculos en ese país ahora se esconden detrás de una serie de operadores estadounidenses, encabezados por Mark Langdale, presidente y director de la Fundación George W. Bush.
Ninguno de sus socios mexicanos aparece en esta red, que incluye compañías hermanas a las que participó en México, como el Grupo Posadas, que Azcárraga dirigió durante 20 años, hasta septiembre del año pasado.
De haber sido accionista activo de una serie de empresas estadounidenses, ahora la huella de Azcárraga parece diluirse. Pero las direcciones, los registros contables y los socios no lo separan de su familia, con la que supuestamente terminó en pleito a finales del año pasado.
En septiembre del año pasado la cadena hotelera Grupo Posadas informó a la Bolsa Mexicana de Valores que Gastón Azcárraga había vendido todas las acciones que poseía de esa empresa.
El empresario dejaba también el Consejo de Administración de la compañía que fundó su padre y él mismo dirigió durante dos décadas.
La justificación que dieron los directivos, sus hermanos, fue que “así convenía a sus intereses”.
Dos meses más tarde, el grupo que opera los hoteles Fiesta Americana y Fiesta Inn anunció que Azcárraga había interpuesto una demanda a la compañía pocos días después de haber vendido su parte de las acciones.
Esta ruptura en México contrasta con la historia que aún está vigente en los registros públicos de Estados Unidos.
De acuerdo con Departamento de Estado de Nevada, Azcárraga funge actualmente como director de la compañía Mlic, Inc., ubicada en la ciudad de Reno y fundada en junio de 1995.
Como dirección fiscal vigente, el empresario coloca la suite 370 del edificio 8333 en la avenida Douglas de Dallas, Texas. Los registros tributarios de condado de Dallas indican que esta oficina es propiedad de la compañía Posadas USA, que comparte nombre con el grupo que actualmente dirigen los hermanos de Azcárraga.
El vicepresidente registrado de Mlic, Inc. es Sherrill Renfro, un hombre de 66 años cuya única propiedad registrada en Texas es un departamento con valor de mercado de 125 mil dólares, en Dallas.
A pesar de esta condición económica modesta, este socio estadounidense funge como vicepresidente de Posadas USA. de acuerdo con los registros públicos.
Antes de retirarse de estas compañías, el último dueño de Mexicana fungía también como director de G & M Padre, Inc.
El agente registrado de Mlic, Inc. es Ridgedale Corp, con dirección fiscal en la suite 990 del 5950 de Berkshire Lane, también en Dallas.
Esta dirección también hace dudar de la ruptura entre el Grupo Posadas y Azcárraga, ya que es la misma donde se ubican las oficinas de Fiesta Americana Hotels & Resorts y de Posadas USA.
Como miembro de la compañía del empresario ahora buscado por la PGR también se coloca a Lesly Leroy, quien tiene puestos vigentes en varias empresas de la red de Azcárraga en Texas.
La empresa Posadas que se encuentra activa se fundó en 2005 con el nombre de Posadas USA, Inc. ante el Estado de Texas. Existía otra que inició operaciones a finales de los 80, pero no aparece ya su registro histórico en los archivos de EU.
En el documento de creación de 2005, Gastón Azcárraga funge como presidente y director. Compartía la administración con Sherrill Renfro y Steven Meadows, especialista en manejo de la industria hotelera.
En todos los reportes anuales, hasta el que fue registrado en marzo de 2012, Azcárraga mantiene su puesto directivo en esta compañía.
El que fue llenado en abril del año pasado, cinco meses antes de que se anunciara en México que abandonaba su participación en el grupo hotelero, ya lo elimina de la escena pública. Su puesto es ocupado por Mark Langdale.
De acuerdo con su perfil público en Linkedin, Langdale trabajó en Posadas USA de 1989 a 2005 como responsable de la adquisición, desarrollo y manejo de un portafolio de hoteles y resorts.
Salió de la compañía para colaborar en el Departamento de Estado cuando inició la segunda administración de George W. Bush.
No era la primera vez que Langdale trabajaba con Bush hijo. Mientras este fue gobernador de Texas, Langdale dirigió el Departamento de Desarrollo Económico de ese estado entre 1997 y 2001.
El actual presidente de Posadas USA creó el Centro y el Instituto George W. Bush.
Los registros públicos de Texas indican que actualmente es director de la Fundación George W. Bush, en compañía de Marvin y Laura Bush, hijo y esposa del expresidente de EU.
El sustituto de Azcárraga al frente de Posadas USA participa en otras empresas que lo vinculan con la familia.
En el reporte que fue llenado el año pasado para la empresa G & M Padre, Inc., fundada en Texas en 1992 y actualmente activa, Gaston Azcárraga aún aparece en el papel de director.
Sus otros miembros son los mismos que en el resto de las compañías, es decir, Mark Langdale, Lesly Leroy y Sherry Renfro.
La única dirección disponible para todos es la oficina en la avenida Douglas, que paga impuestos como propiedad de Posadas USA.
El Departamento de Estado de Texas también tiene aún en el registro de 2013 a Azcárraga Andrade como presidente de Ridgedale Corp, empresa fundada en 1989.
Otra de las compañías que se adjudican al grupo es Hispi, Ltd., actualmente inactiva, la cual tenía como dirección fiscal otra oficina que paga impuestos como parte de Posadas USA, Inc. ubicada en la suite 270 del 1700 en la Avenida Pacific, también en Dallas. Los propietarios del inmueble son Posadas USA y Altius.
Mark Langdale aparece como el único miembro de Mi Fiesta, Inc., compañía que hace alusión a los nombres de los hoteles del Grupo Posadas en México y que fue fundada en 1990.
El vuelo en círculo de Mexicana
Después de que Gastón Azcárraga causó el retiro de los cielos a la línea aérea, muchos quieren comprarla, ahora apuesta una prima
Por Georgina Howard
Azcárraga enfrenta más de 12 denuncias penales de sindicatos de sobrecargos y pilotos de Mexicana
La historia lo alcanzó, la circunstancia lo pone contra la pared.
Tras casi cuatro años de haberle cortado las alas a Mexicana de Aviación, malversar los recursos de la aerolínea y ponerla al borde de la quiebra, Gastón Azcárraga tendrá que responder por lo que se le acusa.
Incluso por el crédito inviable que le otorgó en su momento Bancomext, y que solo sirvió para salvar a los accionistas que encabezaba.
Como Reporte Indigo denunció en su momento, el apoyo financiero que se le otorgó a Azcárraga se gestó desde las oficinas de Los Pinos y el personaje clave fue Margarita Zavala, esposa del expresidente Felipe Calderón.
Desaparecido desde hace más de tres años, Gastón Azcárraga Andrade enfrenta ya una orden de aprehensión en su contra que libró este miércoles un juez federal con sede en la Ciudad de México.
La acusación es por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, por lo que no tendrá derecho al amparo.
Además, tiene en su haber más 12 denuncias penales de los sindicatos de sobrecargos, pilotos y trabajadores de tierra de Mexicana, y violaciones a las leyes del mercado bursátil por no notificar a tiempo a la BMV la venta de la aerolínea.
Mexicana y sus filiales están en tierra desde el 28 de agosto de 2010, cuando abruptamente suspendió sus operaciones, sin mayor explicación de parte de Azcárraga.
Desde entonces, los dimes y diretes entre la empresa, los trabajadores y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes solo han enturbiado la verdadera situación de la línea aérea.
Las razones de fondo
En entrevista con Reporte Indigo, Gabriel Reyes Orona declara que Margarita Zavala, con el apoyo de Mario Laborín y Héctor Rangel Domene, exdirectores de Nafin-Bancomext, promovieron la causa de la aerolínea.
Y en ese enjuague, sostiene el ex Procurador Fiscal de la Federación, estuvieron también involucrados Gilberto López Meyer en ese entonces titular de ASA y Juan Molinar Horcasitas, exsecretario de Comunicaciones y Transportes.
El objetivo primordial, denunció Reyes Orona, era inyectarle capital a la línea aérea para rescatar “a su amigo” Gastón Azcárraga, con quien tiene una relación estrecha.
“Se debe investigar si los funcionarios de Bancomext, Laborín y Rangel, recibieron presiones, llamadas o invitaciones de parte de Margarita Zavala para otorgar ese crédito”.
Incluso, opina Reyes Orona, se debe aclarar muy bien la relación de Zavala con Gastón Azcárraga, “porque lo que sucedió con él, no le sucede a ningún deudor”.
Y para muestra, un botón:
Pese a su situación financiera, se le dieron facilidades por parte de Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam).
Pero no solo eso, para el pago de turbosina recibió apoyo de Aeropuertos y Servicios Auxiliares, y Bancomext le otorgó un crédito que era “completamente inviable”.
Aquí el común denominador es que no solo fue la autoridad aeronáutica sino la financiera “y una autoridad de muy alto rango” que se dedicó a promover, a nombre de Azcárraga, la causa de Mexicana para inyectarle capital y rescatar a los accionistas.
Lo único que sucedió es que generó una empresa “sin ninguna capacidad para responder frente al mercado, los clientes y los trabajadores”.
Recuerda también que Margarita Zavala coordinó la posterior supresión de actividades persecutorias en contra de Azcárraga y sus accionistas.
Estas situaciones, que ya flotan en el mercado, deben ser “atajadas” por las autoridades y hacer una investigación a fondo de quién coordinó el rescate de Mexicana y para qué, acusa.
Incluso, dice: “Definir la vinculación entre Zavala, Juan Molinar y los exfuncionarios de Bancomer que se fueron a Bancomext y estaban sumamente vinculados a la casa presidencial”.
Apoyo panista
Azcárraga adquirió la aerolínea “en un entorno sospechoso”, porque Grupo Posadas no contaba con la capacidad financiera para comprarla.
En aquel entonces se hablaba del apoyo de una institución financiera, particularmente de Banamex.
Pero tras la adquisición de Mexicana por parte Gastón Azcárraga, se dan una serie de conflictos entre este y Roberto Hernández, personaje “cercanísimo a Zavala”, recuerda.
“Se le señaló desde antes como uno de los principales apoyos financieros a la campaña de Calderón”.
Tan es así, menciona el ex Procurador Fiscal de la Federación, que cuando llega Calderón a la Presidencia de la República se da un evento que viola la Ley del IPAB.
Es decir, “se le adjudica a consejeros y fideicomisos de Banamex la empresa Aeroméxico, lo que propicia una competencia feroz entre Roberto Hernández y Gastón Azcárraga”.
Y con la designación de Horcasitas a la SCT, muy vinculado a Margarita Zavala, se suspenden operaciones a varias aerolíneas en provecho del dominante Aeroméxico.
Esta competencia hace que pierda Gastón Azcárraga en Mexicana.
Fue entonces cuando recibe apoyos gubernamentales “inusitados” vía Bancomext, agrega.
A partir de ahí comenzó “el grado de influencia pública en el saqueo y quiebra de Mexicana de Aviación” con los personajes que participaron.
Van por recapitalizar Mexicana
Una vez que le cortaron las alas para volar, por su insuficiencia financiera para mantenerse, han pasado una treintena de empresas interesadas en adquirir Mexicana de Aviación y tres jueces concursales.
La última fue Edith Alarcón, nombrada por los sindicatos aéreos, y quien se mantiene como Juez Rectora a la fecha.
Por su parte, la SCT nombró el año pasado a Fernando Pérez-Correa Camarena interventor en el proceso del concurso mercantil, en representación de los acreedores.
Apenas el pasado 8 de enero el conciliador Gerardo Badín Cherit presentó un acuerdo suscrito por Banorte, el AICM y Bancomext, por mil 350 millones de pesos para capitalizar a Mexicana y evitar su quiebra.
El 11de febrero el Juzgado Undécimo de Distrito en Materia Civil del Distrito Federal requirió al administrador único de Mexicana, José Ángel Ordoñez de la Vega, para suscribir el convenio concursal del centro de mantenimiento.
Y el 17 de febrero la juez rectora del concurso mercantil de Mexicana de Aviación, Edith Alarcón, aceptó la propuesta de capitalización de la aerolínea: Banorte, Bancomext y el AICM invertirán más de mil 350 millones de pesos.
Se estipula que por cada peso capitalizado, cada uno de los acreedores recibirá una acción de la serie “A”, representativa del capital social fijo, con derecho a voto y sin restricción alguna.
Los negocios de Gastón
Por décadas, Gastón Azcárraga fue reconocido como uno de los empresarios más exitosos en el ramo turístico, a través de su Grupo Posadas.
Con su cadena hotelera se dio el lujo, incluso, de comprar Mexicana de Aviación en 2005 por 165 millones de dólares, junto con Ángel Losada, de Grupo Gigante.
El objetivo era realizar economías a escala entre la aerolínea y sus hoteles. Pero el gusto no le duró mucho.
Dejó la dirección y la presidencia del Consejo de Administración del Grupo, y en medio de una fuerte polémica, vendió activos de su grupo hotelero.
Fue entonces cuando sobrevino el cambio generacional, sus hermanos tomaron las riendas.
Pablo Azcárraga quedó al frente de la presidencia de Posadas y José Carlos en la dirección.
A finales de 2011 Gastón Azcárraga se enfrentó a la quiebra de Mexicana con demandas de los trabajadores tanto en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, como en la Procuraduría capitalina.
Los empleados se enteraron que el corporativo no había informado a la Bolsa Mexicana de Valores la venta de acciones de la aerolínea, y que solo se quedaba con 30.4 por ciento.
El pago de impuestos fue otra bomba que se activó. Obligó a que Manuel Borja, su mano derecha en Mexicana de Aviación, dejara el país.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) acusó porque retuvieron impuestos por más de 100 millones de pesos en la aerolínea, cuando Posadas todavía era propietario de Mexicana.
Enfrenta una demanda ante la Procuraduría General de Justicia del DF (PGJDF) por defraudar con 198 millones de pesos, debido a que utilizó un fideicomiso de Ixe Banco que compró a Posadas las acciones de Mexicana.
La Asociación Sindical de Pilotos Aéreos (ASPA) demandó a Azcárraga por ir en contra de la Ley del Mercado de Valores, pues no informó sobre el crédito de Banorte por mil 572 millones de pesos, ni el de Bancomext por 991 mil millones.
También Posadas
El tema de Mexicana alcanzó al grupo hotelero, aunque los directivos trataron de deslindarlo al disminuir las acciones.
Pese a que Posadas de México logró expandirse en América Latina y Estados Unidos, y desarrolló marcas como Fiesta Americana, Fiesta Inn, Live Aqua, Cesar Business, Cesar Park, One y Explorean, las deudas lo seguían.
A la fecha debe 9 mil 522 millones de pesos, y se vio obligado a vender la totalidad de la compañía aérea.
En su momento dijo que se trataba de una capitalización, pero no fue así.
La venta se la han encargado a Rothschild, un banco inglés que se encarga de reestructuras empresariales.
Azcárraga tuvo que dejar Grupo Posadas, del que fue su presidente por más de 20 años.
Hoy, a la distancia, Posadas asegura que invirtió 50 millones de dólares en Nuevo Grupo Aeronáutico (NGA), integrado por Compañía Mexicana de Aviación (CMA), Mexicana Click y Mexicana Link.
Pero el 21 de agosto de 2010, Tenedora K revelaba que había adquirido el 95 por ciento del capital de NGA en una operación simbólica (mil pesos), dado el elevado nivel de pasivos que traía y que la habían llevado a la quiebra.
Plan con maña
El primer grupo que dijo rescataría a la compañía, que estaba en manos de Tenedora K, fue PC Capital, de Pablo Coballasi y representada por Arturo Barahona.
Barahona fue revocado en 2009 como director de Alsea por la Asamblea de Accionistas, se integró al consejo de administración de Mexicana de Aviación en mayo de 2010, durante la administración de Azcárraga.
En marzo de 2011, el entonces secretario del Trabajo, Javier Lozano, confirmaba que PC Capital no tenía recursos para sacar adelante a la aerolínea, después de varios meses de negociaciones.
Luego llegó otro rescatista, quien decía contar con 400 millones de dólares para poner a volar a Mexicana.
Sería el empresario canadiense Mikhael Chamis, cercano a Barahona, a quien propuso como director general de la nueva empresa.
Pero no pudo comprobar los recursos solicitados por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y su representante Iván Barona desistió de la operación.
A principios de 2011 ya estaba en la lista Med Atlántica, un grupo de inversionistas representados por el empresario español Christian Cadena, pero en octubre de ese año se arrepintió y decidió que no iría por la aerolínea.
El 24 de febrero pasado, volvió a postularse. Ahora asegura que los recursos los tiene depositados en Banca Mifel, pero nunca los exhibió.
Poco después se dio a conocer que el grupo español Med Atlántica tenía entre sus inversionistas a Margarita del Villar Alrich, entre otros.
Del Villar Alrich es directora de Área Inmobiliaria y de Negocios del Grupo Diarq, cuya propietaria es Gina Díez Barroso Azcárraga, prima en segundo grado de Gastón Azcárraga Andrade.
Y dónde está el piloto?
El titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, afirmó que ya se solicitó la intervención de la Interpol para cumplir la orden de aprehensión en contra de Gastón Azcárraga Andrade, exdueño de Mexicana de Aviación y accionista operador de Posadas de México.
Entrevistado en la Secretaría de Gobernación, señaló que se sospecha que el empresario puede estar fuera del país. Respecto al ilícito del que se acusa al expropietario de la mencionada aerolínea indicó que son varios; “los detalles no los tengo a la mano, pero los haremos públicos en su momento”, subrayó.
Sobre a cuánto asciende el monto de lavado de dinero que presuntamente realizó el empresario, aseveró que “no es precisamente sólo eso, es mucho más complicado”, dijo.