Hablemos de responsabilidad sindical
Me voy a referir al video publicado por Ada Hermelinda Salazar el 11 de
septiembre en la red social Facebook, donde hace gala de dos cosas: su infinita
ignorancia, y el pobre manejo del lenguaje.
Entre otros temas, habla de dos casos que conciernen a Compañía Mexicana de
Aviación. Inicia con lo relativo a la segunda dispersión correspondiente al
pago de los bienes adquiridos por el Gobierno Federal, aseverando que aún no
hay fecha para que se haga el pago, pero tampoco da visos claros de lo que
ella, como Secretaria General de ASSA ha hecho para agilizar el trámite, o por
lo menos que haya ejercido algún tipo de presión. Es decir, francamente no se
le ven muchas ganas de dedicarle tiempo al tema.
Posteriormente habló del Fideicomiso del MRO, y como si fuese algo ajeno a
ella, menciona que a pesar de que está por terminarse la prórroga acordada en el
2 de abril del 2024, pues simple y sencillamente no se ha realizado el avalúo. ¿Por
qué?, nos preguntamos todos en primera instancia; y la incógnita que aparece en
segundo término es, ¿acaso no es responsabilidad de los sindicatos haber
empujado para que se hiciera? Ni modo, señores, todos sabemos que no hay plazo
que no se cumpla, y el próximo 4 de octubre fenecen los 18 meses acordados como
plazo para la venta del MRO.
Pero la ignominia es todavía más grande, pues no solo no se ha vendido,
sino que ni siquiera sabemos cuánto vale, porque no se ha realizado el avalúo. Sin
eufemismos, compañeros, tendríamos que estar ciegos para no darnos cuenta de
que hay gente que administra el MRO, que está más que interesada en seguir
pegada a la ubre y no soltarla.
Por eso me llama mucho la atención que Ada Salazar “suelte” esta
información de forma más que indolente. Parece que es necesario recordarle que
Mungarro, el abogado mercantilista de la Asociación Sindical de Sobrecargos de
Aviación (ASSA), está dentro de la administración del taller de mantenimiento.
En ese orden de ideas, está más que claro que ASSA tiene responsabilidad de
informar de manera puntual y seria, no con sus típicas circulares que no dicen
absolutamente nada. Los sobrecargos merecemos información real, como saber por qué
demonios, a pesar de que se pidió hace 18 meses una prórroga para hacer el
avalúo y posterior venta del MRO, no se ha hecho un carajo.
Y encima cobran los inútiles por no hacer nada, es para cabrearse, de
verdad. Por eso es importante no dejar pasar el tono en que dio Ada esta
información, afirmando que se tendrá que convocar a otra asamblea. ¡Pobrecita! Imaginen
ustedes que “trabajar” debe ser muy agotador para ella; no saben la monserga
que representa pedirnos a los sobrecargos de Mexicana y de Click que le demos
de nueva cuenta una prórroga más, porque en un año y medio han sido incapaces
de hacer su chamba.
¿Cuánto tiempo más vamos a seguir aceptando la ineptitud de Ada Salazar y
sus compinches? ¿no es acaso su “responsabilidad sindical” haber hecho el
trabajo encomendado en “tiempo y forma”?
Estamos a 21 de septiembre, ¿cómo para cuándo piensa convocar a asamblea?,
porque el reloj no detiene su marcha y les puedo asegurar que ninguno de los compañeros
de Mexicana estamos “mano sobre mano”, cómodamente sentados, a la espera de que
nos llame Ada Salazar, para votar a favor de que necesita más tiempo para
seguir en la inopia.
Otra cuestión importante, pues la señora y sus abogaduchos de quinta
tuvieron la brillantísima ideota de sacar de los padrones a los sobrecargos de
Mexicana que hoy prestan sus servicios en Aeroméxico; ¿ellos ya no forman parte
de CMA? Porque si damos eso por válido, entonces ya no les correspondería ni el
pago de la segunda dispersión, ni lo que se logre recuperar del Fideicomiso F2100
del MRO.
¿No han aprendido nada en estos años? Esa decisión es el caldo de cultivo
perfecto para generar más y más litigios, de esos que empantanan la impartición
de justicia, porque así cualquier trabajador de Compañía Mexicana de Aviación que
sí esté dentro de los padrones del sindicato podría demandar que ya no se les
pague a los sobrecargos que ahora están en Aeroméxico, y todo por la estupidez
de Ada y su cuerpo legal.
Y es que no se actúa por capricho, debemos tener muy claro que cuando los
primeros compañeros de Mexicana brincaron a Aeroméxico, se buscó salvaguardar
sus derechos al mantenerlos dentro del padrón, dejando claro que son
sobrecargos de Compañía Mexicana de Aviación “prestando” sus servicios en
Aerovías de México, una aclaración indispensable para que la autoridad laboral
tuviera claro que los padrones “no estaban dobles”.
Esto lo puede entender cualquiera que tenga más de dos dedos de frente. No
puedo creer que para “solucionar” los “dobles padrones”, Ada haya decidido mejor
sacar del padrón a los sobrecargos de Mexicana. Y esto también aplica para las
sobrecargos de Aerovías Caribe (Click).
La explicación es simple y llana, la sobrecargo que despacha en el quinto
piso de la sede sindical ha sido incapaz de explicarle esto a las autoridades
laborales del país. ¡Señora!, esos son los momentos en que se usa la
investidura de Secretaria General, y se plantea (con la ley y los estatutos en
la mano) que esa decisión libre y soberana se tomó a lo interno del sindicato.
Muchos años se transitó así sin ningún problema, pero la actual
representación se “apanicó” a raíz de su negativa de Toma de Nota, y para
“darle una solución” a un problema que ella misma generó, empezó a hacer las
cosas con las patas.
Lo sabemos, sobre todo a Ada Salazar le encante llenarse la boca con la
muletilla argumentativa de que “no entendemos que el sindicalismo ya cambió”.
Pero es ella y su cuerpo legal los que no han entendido ni siquiera para qué
sirve un sindicato. No lo digo yo, así lo ha dejado claro la autoridad, con
todas sus letras y en diversas sentencias, en las que termina “enmendándoles la
plana” a ese dechado de imberbes.
Jóvenes compañeros, nada les cuesta preguntarles a los compañeros más
antiguos, y ellos les dirán que antes se exigían resultados, y que por menos de
esto “se incendiaba la casa”. Desafortunadamente la actual representación
sindical se aprovecha -y se burla- de que hoy nadie, o muy pocos, se interesan
por lo que hagan o dejen de hacer en ASSA, pero esto nos afecta a todos, no
importa que seas de Mexicana, Click, Aeromar o Aeroméxico.