17 julio 2022

Trabaja la reelección de Ricardo Del Valle

 

Trabaja la reelección de Ricardo Del Valle

El trabajo para la reelección de Ricardo Del Valle al frente de la ASSA comenzó, por lo menos desde el 12 de noviembre del 2021, justo un día después de su derrota electoral. En ese momento empezó a mover toda la maquinaria a su alcance, y se los puedo asegurar,  no cejará hasta conseguir estar tres años más como Secretario General.

Fotografía tomada de FACEBOOK


Así es, Ricardo Del Valle tomó la derrota como un desafío, y a partir del día siguiente puso a su gente a trabajar… ¡No!, ojalá los hubiera puesto a trabajar de verdad; lo que hizo fue darles instrucciones para “operar política y electoralmente”. No minimizo el triunfo de la nueva representación sindical, pero sí señalo puntualmente que el furor de esa victoria obnubiló su visión general, y no se dieron cuenta que no habían liquidado a Ricardo. Él sólo perdió una batalla, mas no la guerra. Esa, estimados compañeros, la tiene ganada sí y solo sí el gremio sigue actuando con el pasmo pavoroso que vienen arrastrando y permitiendo desde hace varios meses.

A la gente como Ricardo Del Valle no se puede dejarlos ni a sol ni a sombra, si de verdad quieren que este hombre deje de estar al frente de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación, tenían que haberse convertido en su sombra y estar todo el tiempo detrás de él, haciéndole las cosas difíciles dentro del sindicato. No de manera irresponsable,criticando solo por criticar, sino con los estatutos en la mano; no pidiendo peras al olmo u otras cosas imposibles, simplemente exigiendo (no rogando) por una clara y oportuna rendición de cuentas, con la aplicación estricta de la ley y de las normas estatutarias. Pero desafortunadamente, Ricadro Del Valle se ha topado con gente que tiene miedo a increparlo; eso lo sabe y saca toda la ventaja posible de ello.

Ha llevado toda el agua posible a su molino aprovechando que nadie de la nueva representación sindical había estado en el sindicato, ni siquiera como adjunto. No estoy diciendo que la vida sindical sea solo para “iniciados” o para mentes privilegadas, claro que no. Sin embargo, es vital aceptar la importancia de la formación de cuadros sindicales, lo cual es una necesidad. El sindicalista no nace, se hace con base en la experiencia, entendiendo cómo fuciona el sindicato, sin perder de vista ni un minuto que la razón de ser de la asociación gremial son, siempre, los derechos de los sobrecargos.

Para ello es primordial conocer a fondo la ley interna que rige a los sobrecargos, o cualquier otro gremio, porque esto no es exclusivo de ASSA de México, aplica para cualquier otro sindicato charro de los que abundan en la aviación lamentablemente.

Estamos equivocados si creemos que “llegar a la representación sindical es la meta”. No, señores, ese es el punto de partida. No sólo es llegar al cargo, sino cómo se ejerce este; no se puede esperar sentado a que la representación saliente te de la información, sino tener muy claro que que con la Toma de Nota se puede exigir toda la información necesaria para realizar el trabajo para el que fueron electos; una exigencia que deben responder tanto los representantes, como el personal administrativo, los abogados, e incluso la propia empresa.

Ricardo está tan seguro de que no existe ese espíritu combativo que sacó de nueva cuenta su “página” en Facebook, ahora no como personaje público, sino como “autor”, utilizando los recursos económicos del sindicato para su promoción personal. ¿Por casualidad?, ¡Claro que no!, obviamente se trata de una promoción de su deslavada y grisácea imagen encaminada a una nueva reelección, porque nadie le cree cuando asegura en sus post -cutres y de mal gusto- que “ama volar”; cualquier persona que lo conozca, sabe que en los hechos le aterra tener que regresar “a la charola”.

Él se sabe un hombre incompetente, corto de inteligencia y sin personalidad. Él es el primero que reconoce que no sabe hablar, se expresa torpemente y aún así con todos sus defectos, se sale con la suya, porque tiene armado un grupo de gente que trabaja para él y sus planes personales.

Y es precisamente esta gente, la más interesada en que Ricardo no regrese a volar como sobrecargo, pues perderían todas y cada una de las prebendas que tienen al trabajar a favor de Del Valle. Es por ello que no les importa violar el estatuto las veces que sea necesario con tal de no perder las migajas de poder de las que gozan y ejercen.

Pienso en personajes como Claudia Quijas, que entró a volar a Aeroméxico pero no ha volado siquiera un año completo desde que ingresó a las filas del Caballero Águila, pues se la ha pasado brincando como chapulin de cargo en cargo sindical, ya sea por elección, o como en últimas fechas, por dedazo. Se supone es la encargada de ver el tema de Mexicana de Aviación, aunque se dupliquen funciones, pues ya existe un representante sindical de Mexicana, que responde al nombre de Víctor Núñez, pero que nunca se presenta a laborar en ASSA, pues el cargo es para cobrar emolumentos, para no trabajar, pues estaba de guarura de su tía política Alejandra Barrales.

Estos oscuros personajes son los más interesados en lograr la reelección de Ricardo, pues se traduciría en tres años más de impunidad y beneficios personales. Ahora en el último reclutamiento, a todas luces ilegal, Aeroméxico se prestó para la faramalla: la puesta en escena de “contratar” nuevos sobrecargos, cuando en los hechos, tenían meses afiliando sobrecargos y metiéndolos a adiestramiento, dejando al margen a la actual Secretaria del Interior.

La intención de contratar justo en estos momentos es más que obvia, y para muestra el botón de Ricardo y su video asegurando que “habrá lugar para todos compañeros, para los ex mexicanas, para los familiares, para todos”. Un clarísimo acto de campaña, con promesas electorales, con todo y ciclorama de fondo, donde se puede observar su fotografía con el actual presidente de la nación Andrés Manuel López Obrador, y una manta de “inclusión” de la comunidad LGTBQ+.

Un mensaje tan claro como burdo y barato. Su puesta en escena no requiere de más palabras; quiere vender su discurso de que “todos serán bienvenidos”, cuidándose mucho de explicar cómo o cuándo lo va a hacer, pues eso no importa, lo que hay que dejar fijo en la mente de los sobrecargos es que eso sólo será posible si él sigue al frente de ASSA, y para ello tendrán que votar por él, nuevamente.

Un discurso de lo más peligroso, porque no es verdad; existen sobrecargos ex mexicanas, de click y jubilados que llevan años esperando una oportunidad para “regresar a volar”. Y de ellos es de quien se aprovecha el actual secretario general, de todas esas personas que están convencidos “de que afuera está imposible”, o bien, que creen que lo único que saben hacer en la vida es charolear. A mí me parece “criminal” que saquen provecho político del miedo de estos compañeros a buscar y descubrir sus talentos. Por supuesto que a Del Valle le conviene dejarlos con esa venda en los ojos, prometiéndoles que sólo volando su vida se verá resuelta.

Y como me cuentan algunos de los compañeros que sí lograron entrar vendiendo su alma al diablo, saben que están pagando con lágrimas de sangre el “regreso de las alas”, y que no ven la hora de asentarse en otro negocio para dejar por fin la totura de volar en Aeroméxico, pues están cansandos de pagar un favor de por vida.

Compañeros, está en sus manos su destino, todavía el futuro no está escrito, ustedes pueden modificarlo y decidir qué es lo que buscan del sindicato, sí quieren seguir con la misma dinámica desde hace 11 años con Ricardo Del Valle al frente o quieren otra opción y recuperar la dignidad que les ha sido arrebatada.

En ustedes está el recuperar el verdadero sindicalismo democrático del cual estabamos todos orgullosos, de ese sindicato cuyos agremiados no temían expresar su punto de vista y discutir un sinfín de temas álgidos, pero sabiendo que tenían la libertad total de hacerlo sin miedo a las represalias.

Hay un dicho que dice “El valiente vive, hasta que el cobarde quiere”. En sus manos compañeros está su destino, ustedes son sus propios arquitectos y nadie más, así que ustedes saben si continúan teniendo al verdugo del quinto piso o de plano lo mandan de regreso a la charola, que mucha falta le hace.

 

Ximena Garmendia
17 de julio de 2022