Un 8 de marzo distinto
Quiero arrancar esta columna diciendo que este 8 de marzo ha sido
totalmente atípico. Y esto nos sirve para reflexionar sobre una infinidad de
temas. De manera breve solo diré, porque voy a escribir una columna más
detallada al respecto, pero sigo anonadada por el gran trabajo de la Secretaría
de Género e Igualdad Sustantiva de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores
(ASPA), la Capitán Yessica Camuñas Elizondo junto con su equipo.
Una vez dicho lo anterior, entremos de lleno a la materia. Me queda claro
que hay gente que intenta y hace el esfuerzo por trabajar en pro del gremio,
pero el camino es más complicado cuando es tu propia dirigente quien limita que
se lleven acciones para el cuidado integral de las compañeras mujeres.
Yo agradezco el esfuerzo realizado por la Secretaria de Asuntos Técnicos
María del Carmen Ortega Venegas de la Asociación Sindical de Sobrecargos de
Aviación (ASSA) y al auxiliar de la Secretaría de Prensa Andrés Becerra para
llevar a cabo una marcha por el Día Internacional de la Mujer, sobre todo
sabiendo que quien ocupa el cargo de la Secretaría General es una mujer que
constantemente ha violentado a las compañeras que han tenido la desgracia de
sufrir acoso, violencia de género en el ámbito laboral.
Hoy en la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México
(AICM) se convocó a una marcha, evidentemente pacífica con la intención de no
pasar por alto un día que debería ser casi casi bandera permanente en el
sindicato, pero con una muy corta visión de quien encabeza el mismo.
ASSA de México a pesar de ser un sindicato constituido por alrededor del
75% de mujeres, no cuenta con una Secretaría de Género y equidad, a pesar de
contar con una sobrecargo trans, y por tener una comunidad LGTBQ+ bastante
grande entre sus filas.
Sé que es muy complicado para las víctimas de señora la que “ostenta” el
cargo de Secretaria General, ver al sindicato como aliado, al contrario, cuando
quien debiera de procurar su bienestar ha sido la primera en violentarlas,
desde revictimizarlas, hasta no hacer absolutamente por todos los casos, que se
le siguen acumulando.
Sin embargo, lo malo no debe opacar los esfuerzos, por muy pequeños que
estos sean o no tan grandilocuentes como uno quisiera, pero se está haciendo
“algo”. En el sindicato de sobrecargos se creó una Comisión de Equidad de
Género, que sigue acéfala y que no dudo que se le vaya a dar a alguien cercano
a Ada Salazar, como lo es Europa Guajardo, la anterior Secretaria de Actas.
A Ada poco le importado un correcto funcionamiento del sindicato y es
justamente en el marco de un día tan importante de reivindicaciones para las
mujeres, lugares de trabajo libres de acoso y violencia, sea psicológica,
física o sexual.
Esperemos que este grano de arena no se pierda y al contrario, sume para que
las nuevas generaciones exijan sus derechos, porque nada va a cambiar sí la
gente no es la que busca que se “genere”.
Créanme que eso no va a suceder por “arte de magia”, tienen que trabajar
arduamente, sé perfectamente que en el galley se puede arreglar el mundo, que
en las pernoctas sacan toda su frustración contra un sindicato que no da
muestras de estar realmente velando por el gremio.
Pero en las pernoctas y en los galleys, no se consigue nada. Tal vez la
participación de la marcha en la T2 no fue la que se “esperaba”, pero por algún
lado hay que empezar, es mejor hacer algo, a no hacer absolutamente nada y solo
quejarse.
A los compañeros que se tomaron su tiempo para acudir al llamado y
participar, gracias, por su tiempo, por el esfuerzo de sumar y no restar,
porque la lucha por el reconocimiento de las mujeres del gremio, sabemos que no
es un solo día, es diario, por las compañeras que han sido en algún momento
afectadas y no han tenido el apoyo, por todas se requiere no callar, el silencio
mata.