29 junio 2025

Peligroso que ASSA hable en nombre de Aeroméxico

 

Peligroso que ASSA hable en nombre de Aeroméxico

Como ex representante sindical que soy, tengo que ser extremadamente clara: para empezar el sindicato no puede ser vocero de las empresas de las que detenta sus contratos colectivos de trabajo, porque la labor de un sindicato es velar por los derechos laborales de los trabajadores agremiados.

Fotograma del programa de Azucena Uresti en Radio Fórmula


Ahora entremos de lleno al tema en cuestión. Hace unos días el gobernador de Sinaloa declaró que “por culpa del sindicato de Aeroméxico” se había cancelado el vuelo de pernocta que tenía la línea aérea, diciendo que el motivo era que los tripulantes “sentían miedo”.

¡Seamos claros! Grupo Aeroméxico no tiene “un” sindicato, sino varios, como es el caso de la ASPA, SNTTTASS, Independencia, STIA y por supuesto ASSA de México, de quien vamos a hablar.

Hay que decirlo fuerte y claro, mientras ASPA hizo gala de una enorme inteligencia al manejar este asunto, declarando que “la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) aseguró que tal aseveración es falsa, pues los vuelos hacia este destino se venían realizando con normalidad; sin embargo, en marzo la aerolínea decidió dejar de operarlos por cuestiones comerciales”, así quedó registrado por el diario Milenio.

Aeroméxico sabe qué frecuencias vuela y cuáles no a un destino, decisión que toma con base en las necesidades operacionales. Si tomó la determinación de quitar el vuelo de pernocta, no se debe a cuestiones “políticas” como lo quiere hacer ver el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya. Una línea aérea decide a dónde lleva sus aeronaves.

Como pueden observar, ASPA respondió con una madurez e inteligencia sobresaliente, pues sabe que el sindicato de pilotos no es vocero de la aerolínea, y en la parte en que el gobernador “les echa la culpa”, de forma totalmente asertiva responden que son “cuestiones comerciales” o como decimos en la aviación “necesidades del servicio”.

Pero quien se fue con todo, y se comportó como vocera de la línea aérea -y no como la Secretaria General que es- fue Ada Salazar, al aseverar en entrevista radiofónica con Azucena Uresti en Radio Fórmula que la cancelación del vuelo que pernoctaba en Sinaloa era (abreviando y sin tantas vueltas) “para proteger no solo a las personas que trabajan en el aire, sino que también a las que están en tierra”.

La representante sindical de los sobrecargos está haciendo afirmaciones que no le competen, y luego se inventó un “área de seguridad aérea” que vela para que los pasajeros lleguen bien a su casa, no solo a la terminal aérea. Y por si fuera poco, mordió el anzuelo de la conductora del programa, y aseguró que hay un “toque de queda silencioso”, y que el personal de Aeroméxico ha sufrido de estar en medio de un “fuego cruzado”, en Ciudad Juárez.

No contenta con ello, Ada también denunció que el país está convertido en un polvorín a punto de estallar, que ya el año pasado se tuvo un problema con una aeronave que sufrió un “balazo”, y que por eso era importante “proteger a todos”.

En este espacio siempre he dado mi opinión personal sin cortapisas, por eso desde aquí les digo a los administrativos de Grupo Aeroméxico que esta actitud de la señora Ada Salazar, dando entrevistas sin ton ni son, y sin tener la facultad para hablar por la línea aérea, debe ser castigada.

¿Cómo es posible que hable con esa impunidad?, cuando lo correcto es esperar a que la empresa haga un comunicado explicando la situación y aclarándole al gobernador dos cosas muy puntuales: que son ellos, los administradores de la aerolínea y no los trabajadores quienes toman la decisión de suprimir la pernocta por necesidades operacionales, y que la estación de Culiacán en lo absoluto se queda incomunicada, pues tienen dos vuelos operando, a pesar de suprimir el vuelo de pernocta.

Aeroméxico, como empresa, debe tomar cartas en el asunto, pues ser la Secretaria General de ASSA no es un salvoconducto para violar el código de conducta y de comunicación que signaron, donde queda muy claro que no pueden hablar en nombre de la empresa.

Compañeros, tienen al alcance de su mano los hechos probados palmariamente para consignar a Ada Salazar por extralimitarse en sus funciones y hablar a nombre de la empresa. Ella, por mucho que se ostente como Secretaria General, no tiene ninguna facultad para hacerlo; revisen en el Estatuto en vigor cuáles son sus funciones, y verán que hablar en nombre de una línea aérea, no lo es. Lo que ha hecho se llama “traicionar al gremio”, reduciendo a ASSA a ser un sindicato patronal, al servicio de la empresa.

 

Ximena Garmendia
 29 de junio de 2025