Y no
lo digo yo… lo dijo él
Mucho
antes de que empezara el Siglo XX, el filósofo alemán Friedrich Nietzsche
planteó una idea que siempre ha estado en el imaginario humano: “No me
aterra que me hayas mentido, sino que ya no pueda creerte más”. Y ustedes
saben de lo que hablo. La certidumbre es uno de los bienes más preciados para
un sobrecargo. Tener el conocimiento seguro y claro de algo se traducirá en un
buen desempeño, siempre.
Es por
ello que me parece necesario hacer un alto en el camino, una especie de “corte
caja” y revisar de manera rápida la historia reciente de las decisiones que la
ASSA de México ha tomado, particularmente a partir de la aparición de la
pandemia de COVID 19, y en concreto a lo que se han tenido que enfrentar los sobrecargos
de Aeroméxico, pues eso me da la posibilidad de rastrear toda la información y
darles a ustedes, mis queridos lectores, un panorama certero y aleccionador.
Nuestra
historia comienza en marzo de este año, con la llegada oficial del virus Sars-Cov-2
a territorio nacional. Todos los sectores del país se vieron obligados a
implementar medidas de contingencia, algunas de manera paulatina, algunas de un
día para otro. En este caso, el sindicato de sobrecargos ASSA de México tuvo a
bien convocar a una asamblea general extraordinaria para el día 17 de marzo, la
cual debía celebrarse en la sede sindical. Sin embargo, al Secretario General no
le importó violar el estatuto, y tras lanzar la convocatoria, un día después
sacó una circular, que ni siquiera es una fe de erratas, cambiando el lugar donde
se llevaría a cabo la asamblea. No es una exquisitez exagerada de mi parte, lo
dictan los estatutos: los acuerdos tomados en esa asamblea tendrían que ser
tachados de inválidos por realizar este cambio, sin seguir las formalidades
exigidas. El lugar en que se celebró dicha asamblea fue el Hotel Fiesta
Americana Reforma; sí, del Grupo hotelero Posadas, cuyo dueño fuera Gastón
Azcárraga. Ahora es su hermano Pablo quien está al frente, pero esa es historia
para otra columna.
Al
tratarse de una cita textual, no me es permitido corregir los errores de
ortografía, ni mucho menos los galimatías de una redacción tan atropellada como
pedestre, pero deben ustedes recordar que previo a la asamblea, el día 14 de
marzo, el Secretario General Ricardo Del Valle, publicó lo siguiente en su red
social:
“Queridos
compañeros, buenas noches. Como ustedes saben derivado a la pandemia COVID-19
que afecta todas las operaciones de las aerolíneas a nivel mundial y en el caso
que nos ocupa de Aeromexico principalmente, al respecto, les informo lo
siguiente:
Grupo
Aeroméxico ha decidido por la situación actual, disminuir su operación a sus
destinos de vuelos transoceánicos y de largo alcance en un 40% y el resto de su
operación en un 20%. (…) Confiados pero ocupándonos en que esto tendrá solución
en el corto plazo.
Para
cualquier duda o aclaración estarán disponibles como siempre ha sido el caso,
mis compañeras de la delegación de Aeromexico Secretario de Trabajo, Secretario
de Conflictos, esta Secretaria que represento y toda la Representación
Sindical. “
Tras
celebrarse la asamblea, Ricardo Del Valle hizo llegar los acuerdos tomados a los
Ipad de los sobrecargos de Aeroméxico a través de una circular. En su momento
el líder sindical informó:
“Estimados
compañeros. Los acuerdos que se establecieron en nuestra Asamblea del día de
ayer, martes 17 de marzo del presente año, RESPETADOS 100 % POR LA EMPRESA
AEROMÉXICO. LA UNIÓN QUEDÓ DEMOSTRADA, HIZO LA DIFERENCIA. Ante todo y contra
todo, la preservación de la fuente de trabajo y de nuestras Empresas, siempre
será nuestra prioridad. La información en referencia a nuestra Asamblea ya se
encuentra publicada en sus tabletas electrónicas (iPads). Les mando un fuerte
abrazo, que pasen un excelente día.”
Inexplicablemente,
la circular ya no se encuentra ahí, pues fue bajada de la red que alimenta
tales dispositivos, pero no se preocupen, al final de esta columna podrán
consultarla íntegramente y corroborar que los acuerdos a los que se llegó en
dicha asamblea, y dio a conocer a los “medios de información, Jefe de Edición y
reporteros de la fuente”, en las propias palabras de Ricardo Del Valle, fue:
·
Se aprobó por unanimidad la implementación del Sistema de
trabajo por "Rotación", en el que un grupo determinado de Sobrecargos
estará en tierra por dos meses sin percibir salario ni prestación alguna
durante los próximos seis meses. Este proceso es único y ha dado resultados
comprobados ya que se preserva la fuente de empleo.
·
Se aprobó por mayoría la reducción del tiempo de estadía o
pernocta en las estaciones de vuelos de largo alcance y transoceánicos como
Madrid, Londres, París, Amsterdan, Barcelona, Seúl y Narita. Asimismo se acordó
otorgar facilidades a la empresa para la asignación de vuelos a sus tripulaciones
de Sobrecargos durante este periódo de contingencia.
A pesar de la deficiente redacción del punto de
acuerdo, podemos observar que el Secretario General se cuida mucho de no dar
cifras claras. “Un grupo determinado”, dice ¿Eso qué querrá decir?. Sin
embargo, tal como quedó documentado en mi columna del 22 de marzo en este
espacio, les informé:
¿Qué puede hacer Aeroméxico con 2,720
sobrecargos, una flota efectiva de 35 aeronaves, y el 40% de las rutas
internacionales canceladas, más lo que se acumule esta semana? La empresa ya
puso una cifra sobre la mesa: recortar el 50%, o sea 1,360 sobrecargos. ¿Qué
respondió ASSA?, que van a “rotar” 900 sobrecargos al mes, durante seis meses.
Lo pongo entre comillas porque el esquema que se acaba de inventar la
representación sindical lidereada por Ricardo del Valle no puede ni siquiera
llamarse rotación.
A pesar de todo, el 30 de marzo Ricardo Del
Valle saca una circular que modifica el primer acuerdo tomado en la asamblea, argumentando
que por necesidad operacional tendrá que rotar el 68% de planta en el mes de
abril. Primera violación al acuerdo de asamblea que había supuestamente la
empresa respetaría al cien por ciento:
“#Compañeros, ¡buenas noches!
En unos momentos más se estará enviando
el rol correspondiente al mes de abril, en donde podrán observar que derivado a
la fuerte disminución de las rutas y en muchas de ellas la cancelación de
manera temporal, los itinerarios han estado en continuo ajuste, hasta el
momento se determinó que el 68% de la planta rotará…”
A finales de abril, para la rotación del mes de
mayo, en la planta empezaron a surgir dudas acerca de las vacaciones, y
Ricardo, en sus redes sociales, plasmó lo siguiente:
“…Aquel compañero que haya rotado en el
mes de Abril del presente año, que tenían sus vacaciones y que por consiguiente
se re-programarían al término de su rotación, quedó cancelada dicha asignación
y así sucesivamente en los meses subsecuentes, esto es con la finalidad de
afectar lo menos posible a Ustedes…”
¿Qué dijo?, Que alguien me explique, ¿qué ha
pasado con el tema de las vacaciones? Muchos compañeros rotan y les recorren al
mes siguiente las vacaciones, y después, vuelven a rotar y les vuelven a
recorrer sus vacaciones. El resultado es muchos sobrecargos acumulan ya 5 meses
sin volar en lo absoluto, violando el acuerdo de la asamblea del 17 de marzo
del 2020.
El 28 de abril ASSA de México vuelve a emitir una
circular informando que la rotación para el mes de mayo, sería del 75% del
total de la planta. ¿Y el acuerdo firmado? Esta es otra violación a lo que los
sobrecargos votaron en marzo.
Llegando al mes de junio, el silencio por parte
del sindicato se hizo presente. Dejó de sacar información acerca de cuántos
sobrecargos estarían rotando. Ya de por sí el tema estaba inmerso en una opacidad
total, pues nunca mostró el listado de los sobrecargos que rotaron en los meses
de abril y mayo. En junio el descaro fue abrumador, pues ni siquiera se dignó a
decir el porcentaje de sobrecargos que rotarían para dicho mes. ¿Que para qué
le sirve esa información al sobrecargo? Lo resumo en una palabra: certidumbre
Es hasta el 19 de junio que Ricardo Del Valle
saca una circular, pero el tema es la entrada de la empresa Aeroméxico al
capítulo 11 de la Ley de Quiebras en Estados Unidos.
El día 2 de julio, se limitó a replicar la
circular que la empresa Aeroméxico había subido a sus redes sociales para difundir
el tema del Capítulo 11, y cinco días más tarde Del Valle publicó:
“Estimados compañeros, buenas tardes.
Les solicito, como en otras tantas
ocasiones les hemos pedido, que hagan caso omiso a las publicaciones que emiten
algunos medios de comunicación o algún otros personajes que sólo intentan crear
incertidumbre…”
Disiento. La incertidumbre no la generan
fuerzas obscuras, ocultas o de ultratumba sino su falta de transparencia,
claridad y certeza. Es su propia planta de compañeros sobrecargos la que le
está pidiendo esa información, pero por alguna razón se resiste a transparentar.
El 19 de julio, ante una realidad imposible de
ignorar, y con una planta que con justa razón está cada vez más enojada, el
Secretario General escribe:
“Compañeros
y amigos como están buenas noches.
Esperamos estén pasando un día tranquilo
al lado de sus seres queridos, cuidándose y de reflexión, en estos tiempos tan
difíciles para todos con motivo de esta pandemia que nos vino a cambiar la
vida, sin embargo estamos seguros que poco a poco, paso a paso saldremos
adelante.
En adición informarles que todo lo que
ha transcurrido en relación a nuestras Empresas se ha informado oportunamente,
si bien es cierto que hay inquietudes, miedos, temores, respecto a la situación
de cada uno de ustedes y de nuestras Empresas, también deben de estar
tranquilos y con la firme convicción de que esta Organización Sindical, ASSA de
Mexico, está trabajando todos los días las 24 horas para preservar nuestra
fuente de trabajo.
Por el momento nuestra empresa
Aeromexico y Aeromar no han solicitado requerimiento de planta como muchos se
han cuestionado o preguntado, tampoco ha solicitado otro convenio diferente al
que tenemos vigente y que fue aprobado en nuestra asamblea general
extraordinaria del pasado marzo del presente año…”
Casi cinco meses han pasado desde que se
celebró la asamblea extraordinaria. Y es a ustedes, compañeros sobrecargos de
Aeroméxico a los que les ha tocado vivir en carne propia las consecuencias de
todas y cada una de las violaciones a sus derechos laborales y sindicales, son
ustedes los que mes con mes han visto como la representación sindical a
tergiversado a placer lo que originalmente votaron. Y para muestra, un botón
más: al día de hoy siguen con el receso de 24 horas en Europa, Asia y
Sudamérica, cuya vigencia les dijeron era de tres meses. Los acuerdos de
asamblea no se renuevan en automático.
Es aquí donde el cinismo del Secretario General
se vuelve insultante. Ante el descontento de la base de sobrecargos por la
opacidad con la que se ha manejado, el mismo día que salen publicados los roles
(secuencias de vuelo) de los sobrecargos, directamente a sus Ipad´s, Ricardo
Del Valle, publicó el 29 de julio:
“Estimados compañeros y amigos. La
situación que hemos vivido a partir de la pandemia COVID 19 ha sido muy difícil
para TODOS y sin precedente alguno, nadie esperaba o imaginaba el resultado de
esta pandemia y la crisis tan severa que causaría a nivel mundial con la
afectación que todos conocemos y de manera particular a la industria del
turismo y por ende a la aviación.
Para cuando celebráramos nuestra
Asamblea (Marzo 2020) se consideró que inclusive podría llegar a estar abajo el
100% la operación de Aeroméxico-, y por lo tanto, el 100% de nuestros
compañeros en tierra. Afortunadamente no fue el caso y continuamos volando
durante los primeros meses apenas sobreviviendo al tener tan solo el 10% de la
operación, posteriormente mes con mes se ha ido recuperando la operación; sin
embargo, para el mes de agosto estaremos solo al 35% de la operación respecto al
100% previo al COVID. Se prevé que nos iremos recuperando poco a poco; sin
embargo, es importante señalarles que se requería mayores sacrificios, mayores
esfuerzas porque la recuperación se prevé será gradual a corto, medio y largo
plazo.
Conforme transcurran los meses nos
daremos cuenta de cómo se irá recuperado la operación y la confianza de
nuestros pasajeros que en gran medida, cómo siempre ha sido el caso, es gracias
al profesionalismo que nos ha caracterizado como gremio.
Nuestros convenios están vigentes hasta
septiembre del 2020, hemos estado trabajado al interior de la Organización
Sindical diferentes escenarios TODOS encaminados a la preservación del empleo
para cada uno de ustedes y de sus familias.
En adición a esto no perdamos de vista
que Aeromexico entró en un capítulo 11 de reestructuración para hacer de
nuestra empresa una empresa viable y que pueda continuar operando.
Como también ya se los informamos en
circulares, por el momento Aeromexico no ha presentado a la Organización
Sindical ninguna alternativa diferente a la que se tiene actualmente convenida,
como recorte de sobrecargos o alguna otra petición de manera particular,
tampoco bajo ninguna circunstancia como se ha venido comentando en los
diferentes grupos de WhattsApp que se tienen, que el contrato anexo absorberá
al contrato general, al respecto les pediría que hagamos caso omiso de los
radio pasillos, que estamos acostumbrados a darle más valor que los comunicados
que emite la Empresa y
ASSA.
Aunque la situación es compleja,
angustiante, asfixiante, con miedos, incertidumbre, frustraciones y enojos, les
pediríamos calma y confianza en el trabajo que estamos desarrollando para todos
ustedes, la idea es continuar unidos porque unidos somos más fuertes, no se
trata de antiguos o nuevos se trata de la preservación del empleo para todos.
“Individualmente podemos hacer muy poco,
juntos podemos hacer mucho”.
“El trabajo en equipo es la habilidad de
trabajar juntos con un objetivo en común. La habilidad de lograr logros
personales relacionados con los objetivos, es la gasolina que permite a la
gente común lograr resultados no comunes”.
Me despido de ustedes reiterando nuestro
compromiso de trabajo, nuestra lealtad al gremio, nuestra pasión y amor por el
trabajo que ustedes nos confiaron.
“Si todo el mundo se mueve hacia delante
a la vez, el éxito vendrá solo”, Henry Ford.
Ricardo del Valle Solares. Estamos a la
orden. ASSA de México.”
Al hombre que encabeza la organización sindical
de sobrecargos le convendría pensar un poco en lo que dijo el poeta inglés
Alexander Pope hace más de tres de siglos: “El que dice una mentira no sabe
qué tarea ha asumido, porque estará obligado a inventar veinte más para
sostener la certeza de esta primera”. Hoy los trabajadores que representa expresan
en grupos de whatsapp su descontento; siempre con precaución, pero cada vez con
menos miedo de “las orejas” de Ricardo Del Valle. Y es que la crisis empieza a
ser descarnada; la mayoría han tenido que empezar a vender sus bienes y/u otros
menesteres con tal de subsistir. Muchos ya se encuentran en franca
desesperación. Con el último “comunicado”, que no escribieron “personajes
externos” sino la propia ASSA, surgen más incógnitas que respuestas, ¿para dónde
vamos?. Con un Ricardo Del Valle que se enreda con sus propias palabras y una
empresa que día con día se empeña en demostrar que ni clientes ni trabajadores
son su prioridad, el horizonte se torna realmente obscuro.
¿Cuál es la estrategia del líder? ¿Escuchar
solamente las voces que emiten irracionales alabanzas y loas? Yo le recomiendo
que vea y escuche al grueso de sus
agremiados, que sea empático con ellos, para que no tengan que estar hablando a
sus espaldas, como irremediablemente hoy sucede.
P.D. Anexo todas y cada una de las circulares,
comunicados, que la ASSA de México ha publicado desde la convocatoria a la
asamblea el 17 de marzo, hasta la última publicada, con la finalidad de
ilustrar esta columna. Y añado un audio del acuerdo tomado en la asamblea del 17 de marzo del presente año.
https://youtu.be/E5m7FmBzmHA
Ximena Garmendia
2 de agosto 2020