Reanuda Mexicana de Aviación vuelos a Madrid y Londres
09 de agosto de 2010 • 19:49
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En una actualización del estado de vuelos suspendidos y con afectaciones parciales, la aerolínea precisó que aún hay una frecuencia programada en las siguientes rutas procedentes de la ciudad de México: Buenos Aires, Bogotá, Montreal, Vancouver y San Antonio.
Foto: AP
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México.- La Compañía Mexicana de Aviación (CMA) informó hace unos minutos que reactivó sus vuelos a Madrid y Londres.
En una actualización del estado de vuelos suspendidos y con afectaciones parciales, la aerolínea precisó que aún hay una frecuencia programada en las siguientes rutas procedentes de la ciudad de México: Buenos Aires, Bogotá, Montreal, Vancouver y San Antonio.
CMA dijo el domingo por la noche que a partir de hoy suspendería operaciones en estos destinos como medida para optimizar el destino de sus recursos, luego de registrar una precaria situación económica.
En la relación de rutas afectadas se mantiene la suspensión de operaciones a Sao Paulo, Costa Rica (desde Cancún) y Bogotá (desde Cancún), y las rutas Zacatecas-Chicago y Bajío-Monterrey-Chicago. El martes se interrumpirá la ruta México-Caracas y el miércoles sucederá lo mismo con Fresno-Guadalajara.
En cuanto a las afectaciones parciales, CMA dijo que la suspensión en las siguientes rutas sólo ocurrirá en las fechas indicadas.
Afectaciones parciales (Sólo se suspende la operación en las fechas indicadas)
970 México - San Francisco Agosto 10, 2010
971 San Francisco - México Agosto 12, 2010
952 Guadalajara - San José, Cal. Agosto 11, 2010
953 San José, Cal. - Guadalajara Agosto 12, 2010
182 Guadalajara - Chicago Agosto 10, 2010
183 Chicago - Guadalajara Agosto 12, 2010
Con información de Redacción Infosel y El Universal.
Mexicana, privatización equivocada
La mala planeación de la aerolínea aparece en varios rubros, explica José Luis de la Cruz; cuando la adquirieron hace un lustro sabían cómo se constituía el contrato colectivo de su personal.
Por: José Luis de la Cruz Gallegos*
CIUDAD DE MÉXICO — Con el concurso mercantil el caso de la Compañía Mexicana de Aviación (Mexicana) ha llegado a un punto que permite establecer la necesidad de reflexionar en aspectos que van desde su proceso de privatización hasta la forma en que se le ha manejado por parte de los nuevos dueños.
Iniciar el análisis en el proceso privatizador no es algo menor, fundamentalmente porque de acuerdo a los propios ejecutivos Mexicana no ha logrado obtener las utilidades necesarias para hacerla financieramente viable. El problema que esto entraña es que la empresa fue privatizada hace tan sólo 5 años, situación que tiene una implicación directa sobre el mecanismo de privatización y de adjudicación: no fue exitoso. Hace un lustro se planteó que con los nuevos propietarios las sinergias potenciales serían enormes al conjuntar la aerolínea de mayor mercado en México con un grupo empresarial de fuerte presencia en el sector hotelero, ello sin contar que Mexicana también contaba con algunas de las rutas internacionales más lucrativas hacia Estados Unidos y Europa. Hoy se puede observar que el análisis y expectativas que desde el gobierno se plantearon no fueron alcanzadas por lo que este es un nuevo proceso privatizador en el cual el sector público se ha equivocado.
En una segunda instancia, pero no menos relevante, viene la revisión de la gestión administrativa y operativa en la nueva empresa, de inicio debe plantearse que el plan de negocios falló y las razones son múltiples. En primera se debe citar justamente lo que la empresa señala como causa de la inviabilidad financiera: el peso de los contratos colectivos de los trabajadores, particularmente los de pilotos y sobrecargos. Si bien es conocido que en general los salarios y prestaciones de este grupo de trabajadores son superiores a los del promedio también debe indicarse que se encuentran en el estándar internacional, es decir que por las normatividades existentes a nivel global básicamente son similares a las que perciben sus contrapartes en otros países. Sin embargo en este punto es prioritario mencionar algo adicional y es que desde la privatización de la empresa el contrato colectivo era algo conocido y por tanto se debió incorporar adecuadamente al plan de negocios, realizando los ajustes necesarios para operar sin problemas financieros, cuestión que por los resultados observados no se alcanzó.
Derivado de lo anterior, y dado que los costos laborales eran conocidos, el error de gestión falló en el diagnóstico del entorno económico que se enfrentaría, de los costos de combustibles y de operación, de los cambios en regulación y el efecto que la entrada de nueva competencia tendría sobre la empresa, particularmente de las denominadas aerolíneas de bajo costo. De igual manera habría que citar la falta de acierto que tuvo la administración al establecer algunas nuevas rutas internacionales, y los gastos que ello implica, en un entorno de crisis económica, de mayores regulaciones (como la imposición de visas a Canadá) y de los problemas que causó el brote de influenza en México.
Transparentar lo anterior así como la ingeniería financiera y operativa que se estableció entre Mexicana con el resto de las empresas del grupo empresarial al que pertenece es prioritario, particularmente para el caso de cómo se reestructuraron las rutas que conservó Mexicana y las que fueron adjudicadas a Mexicana Click y Mexicana Link, las cuales han quedado fuera de la solicitud de concurso mercantil. De igual manera será necesario aclarar el manejo financiero que se dio al interior de todo el grupo, principalmente porque uno de los objetivos originales era el de generar sinergias que no se lograron pero en donde habrá que dilucidar como se dio el manejo de recursos y en qué dirección, en otras palabras en el reacomodo de operaciones y de flujos financieros habrá que establecer si Mexicana acabó transfiriendo recursos al resto del grupo o viceversa.
Lo descrito no es algo menor cuando se observa la guerra de cifras que se ha presentado entre el sindicato de pilotos y la empresa. Los primeros indican que en los cálculos reseñados por los propietarios se incluyen cuestiones como capacitación, elemento que no es un ingreso y prestación laboral. Por el lado de la empresa se sostiene que los costos laborales de los pilotos y sobrecargos son superiores en 100% y 30% respectivamente si se comparan con otras aerolíneas de bajos costos en México.
Por tanto en el concurso mercantil debe transparentarse el verdadero manejo que se ha dado a la empresa a fin de dilucidar las verdaderas causas del problema y con ello sus probables soluciones. De igual manera no se debe olvidar que previo a su privatización Mexicana contaba con algunas de las rutas más rentables en México y hacia el extranjero, por lo que la situación de inviabilidad financiera planteada debe entrañar algo más que reducir los costos laborales. El proceso de negociación será complejo y el riesgo que se corre es el cierre de una aerolínea mexicana que ha sido pionera en el sector, por lo que ninguno de los actores debe actuar irresponsablemente, incluyendo al gobierno que diseño un mecanismo de privatización y adjudicación a todas luces deficiente.
*El autor es Director del Centro de Investigación en Economía y Negocios Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México.
ASSA presentará opciones a Mexicana
Julián Sánchez
El Universal
Ciudad de México
Lunes 09 de agosto de 2010
La asociación sindical está dispuesta a trabajar con los mínimos de ley, a buscar inversionistas, a diferir su salario y a disminuir el concepto de viáticos
Integrantes de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) acordaron en asamblea proponer a la empresa cuatro puntos para preservar la fuente de empleo en Mexicana de Aviación.
Dichos puntos tienen que ver con trabajar con los mínimos de ley fuera del contrato colectivo por un máximo de dos semanas y disminuir el concepto de viáticos por un 50%; además, recibir una parte del salario devengado y diferir hasta por un máximo de dos meses el cobro de la cantidad restante.
Asimismo, la facultad del comité ejecutivo de buscar inversionistas y revisar el contrato colectivo para "poderlo meter" como parte de la participación accionaria.
El cuarto punto acordado es demandar penalmente cualquier condición que pudiera haber resultado en un fraude por parte de los administradores del grupo de Mexicana de Aviación.
En entrevista, la lideresa de ASSA, Lizette Clavel Sánchez, explicó respecto a la reducción de los viáticos que en promedio los mil 300 sobrecargos de la aerolínea estarían ganando 500 pesos por día para el gasto de alimentación, aún cuando estén en otro país y eso dependerá de la zona a la que viajen.
Sobre diferir el salario, expuso que si no hubiera posibilidad de la empresa de cumplir con el salario de los trabajadores, "que pague lo que pueda y en un máximo de dos meses que complete la cantidad faltante. No es perdonar el salario ni cederlo, sino diferirlo".
Respecto a la búsqueda de inversionistas, resaltó que ya existe quién se interese, aunque se reservó el nombre del mismo.
En tanto, sobre el contrato colectivo dijo que se plantea revisarlo para definir cuál sería el costo del mismo para meterlo en la participación accionaria. Para ello, se formularía por escrito la propuesta a la empresa y se definiría cuáles son las cláusulas dispuestas a cambiar y porqué tipo de acciones.
Recordó que las propuestas de ASSA representarían un ahorro de 240 millones de dólares anuales a la empresa y comentó que se evitaría la pérdida de fuentes de trabajo, por lo que está en la mesa el esquema de rotación de personal.
Es decir que para una plaza un empleado labore un mes y luego un segundo en los siguientes 30 días.
09 de agosto de 2010 • 19:49
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En una actualización del estado de vuelos suspendidos y con afectaciones parciales, la aerolínea precisó que aún hay una frecuencia programada en las siguientes rutas procedentes de la ciudad de México: Buenos Aires, Bogotá, Montreal, Vancouver y San Antonio.
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México.- La Compañía Mexicana de Aviación (CMA) informó hace unos minutos que reactivó sus vuelos a Madrid y Londres.
En una actualización del estado de vuelos suspendidos y con afectaciones parciales, la aerolínea precisó que aún hay una frecuencia programada en las siguientes rutas procedentes de la ciudad de México: Buenos Aires, Bogotá, Montreal, Vancouver y San Antonio.
CMA dijo el domingo por la noche que a partir de hoy suspendería operaciones en estos destinos como medida para optimizar el destino de sus recursos, luego de registrar una precaria situación económica.
En la relación de rutas afectadas se mantiene la suspensión de operaciones a Sao Paulo, Costa Rica (desde Cancún) y Bogotá (desde Cancún), y las rutas Zacatecas-Chicago y Bajío-Monterrey-Chicago. El martes se interrumpirá la ruta México-Caracas y el miércoles sucederá lo mismo con Fresno-Guadalajara.
En cuanto a las afectaciones parciales, CMA dijo que la suspensión en las siguientes rutas sólo ocurrirá en las fechas indicadas.
Afectaciones parciales (Sólo se suspende la operación en las fechas indicadas)
970 México - San Francisco Agosto 10, 2010
971 San Francisco - México Agosto 12, 2010
952 Guadalajara - San José, Cal. Agosto 11, 2010
953 San José, Cal. - Guadalajara Agosto 12, 2010
182 Guadalajara - Chicago Agosto 10, 2010
183 Chicago - Guadalajara Agosto 12, 2010
Con información de Redacción Infosel y El Universal.
Mexicana, privatización equivocada
La mala planeación de la aerolínea aparece en varios rubros, explica José Luis de la Cruz; cuando la adquirieron hace un lustro sabían cómo se constituía el contrato colectivo de su personal.
Por: José Luis de la Cruz Gallegos*
CIUDAD DE MÉXICO — Con el concurso mercantil el caso de la Compañía Mexicana de Aviación (Mexicana) ha llegado a un punto que permite establecer la necesidad de reflexionar en aspectos que van desde su proceso de privatización hasta la forma en que se le ha manejado por parte de los nuevos dueños.
Iniciar el análisis en el proceso privatizador no es algo menor, fundamentalmente porque de acuerdo a los propios ejecutivos Mexicana no ha logrado obtener las utilidades necesarias para hacerla financieramente viable. El problema que esto entraña es que la empresa fue privatizada hace tan sólo 5 años, situación que tiene una implicación directa sobre el mecanismo de privatización y de adjudicación: no fue exitoso. Hace un lustro se planteó que con los nuevos propietarios las sinergias potenciales serían enormes al conjuntar la aerolínea de mayor mercado en México con un grupo empresarial de fuerte presencia en el sector hotelero, ello sin contar que Mexicana también contaba con algunas de las rutas internacionales más lucrativas hacia Estados Unidos y Europa. Hoy se puede observar que el análisis y expectativas que desde el gobierno se plantearon no fueron alcanzadas por lo que este es un nuevo proceso privatizador en el cual el sector público se ha equivocado.
En una segunda instancia, pero no menos relevante, viene la revisión de la gestión administrativa y operativa en la nueva empresa, de inicio debe plantearse que el plan de negocios falló y las razones son múltiples. En primera se debe citar justamente lo que la empresa señala como causa de la inviabilidad financiera: el peso de los contratos colectivos de los trabajadores, particularmente los de pilotos y sobrecargos. Si bien es conocido que en general los salarios y prestaciones de este grupo de trabajadores son superiores a los del promedio también debe indicarse que se encuentran en el estándar internacional, es decir que por las normatividades existentes a nivel global básicamente son similares a las que perciben sus contrapartes en otros países. Sin embargo en este punto es prioritario mencionar algo adicional y es que desde la privatización de la empresa el contrato colectivo era algo conocido y por tanto se debió incorporar adecuadamente al plan de negocios, realizando los ajustes necesarios para operar sin problemas financieros, cuestión que por los resultados observados no se alcanzó.
Derivado de lo anterior, y dado que los costos laborales eran conocidos, el error de gestión falló en el diagnóstico del entorno económico que se enfrentaría, de los costos de combustibles y de operación, de los cambios en regulación y el efecto que la entrada de nueva competencia tendría sobre la empresa, particularmente de las denominadas aerolíneas de bajo costo. De igual manera habría que citar la falta de acierto que tuvo la administración al establecer algunas nuevas rutas internacionales, y los gastos que ello implica, en un entorno de crisis económica, de mayores regulaciones (como la imposición de visas a Canadá) y de los problemas que causó el brote de influenza en México.
Transparentar lo anterior así como la ingeniería financiera y operativa que se estableció entre Mexicana con el resto de las empresas del grupo empresarial al que pertenece es prioritario, particularmente para el caso de cómo se reestructuraron las rutas que conservó Mexicana y las que fueron adjudicadas a Mexicana Click y Mexicana Link, las cuales han quedado fuera de la solicitud de concurso mercantil. De igual manera será necesario aclarar el manejo financiero que se dio al interior de todo el grupo, principalmente porque uno de los objetivos originales era el de generar sinergias que no se lograron pero en donde habrá que dilucidar como se dio el manejo de recursos y en qué dirección, en otras palabras en el reacomodo de operaciones y de flujos financieros habrá que establecer si Mexicana acabó transfiriendo recursos al resto del grupo o viceversa.
Lo descrito no es algo menor cuando se observa la guerra de cifras que se ha presentado entre el sindicato de pilotos y la empresa. Los primeros indican que en los cálculos reseñados por los propietarios se incluyen cuestiones como capacitación, elemento que no es un ingreso y prestación laboral. Por el lado de la empresa se sostiene que los costos laborales de los pilotos y sobrecargos son superiores en 100% y 30% respectivamente si se comparan con otras aerolíneas de bajos costos en México.
Por tanto en el concurso mercantil debe transparentarse el verdadero manejo que se ha dado a la empresa a fin de dilucidar las verdaderas causas del problema y con ello sus probables soluciones. De igual manera no se debe olvidar que previo a su privatización Mexicana contaba con algunas de las rutas más rentables en México y hacia el extranjero, por lo que la situación de inviabilidad financiera planteada debe entrañar algo más que reducir los costos laborales. El proceso de negociación será complejo y el riesgo que se corre es el cierre de una aerolínea mexicana que ha sido pionera en el sector, por lo que ninguno de los actores debe actuar irresponsablemente, incluyendo al gobierno que diseño un mecanismo de privatización y adjudicación a todas luces deficiente.
*El autor es Director del Centro de Investigación en Economía y Negocios Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México.
ASSA presentará opciones a Mexicana
Julián Sánchez
El Universal
Ciudad de México
Lunes 09 de agosto de 2010
La asociación sindical está dispuesta a trabajar con los mínimos de ley, a buscar inversionistas, a diferir su salario y a disminuir el concepto de viáticos
Integrantes de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) acordaron en asamblea proponer a la empresa cuatro puntos para preservar la fuente de empleo en Mexicana de Aviación.
Dichos puntos tienen que ver con trabajar con los mínimos de ley fuera del contrato colectivo por un máximo de dos semanas y disminuir el concepto de viáticos por un 50%; además, recibir una parte del salario devengado y diferir hasta por un máximo de dos meses el cobro de la cantidad restante.
Asimismo, la facultad del comité ejecutivo de buscar inversionistas y revisar el contrato colectivo para "poderlo meter" como parte de la participación accionaria.
El cuarto punto acordado es demandar penalmente cualquier condición que pudiera haber resultado en un fraude por parte de los administradores del grupo de Mexicana de Aviación.
En entrevista, la lideresa de ASSA, Lizette Clavel Sánchez, explicó respecto a la reducción de los viáticos que en promedio los mil 300 sobrecargos de la aerolínea estarían ganando 500 pesos por día para el gasto de alimentación, aún cuando estén en otro país y eso dependerá de la zona a la que viajen.
Sobre diferir el salario, expuso que si no hubiera posibilidad de la empresa de cumplir con el salario de los trabajadores, "que pague lo que pueda y en un máximo de dos meses que complete la cantidad faltante. No es perdonar el salario ni cederlo, sino diferirlo".
Respecto a la búsqueda de inversionistas, resaltó que ya existe quién se interese, aunque se reservó el nombre del mismo.
En tanto, sobre el contrato colectivo dijo que se plantea revisarlo para definir cuál sería el costo del mismo para meterlo en la participación accionaria. Para ello, se formularía por escrito la propuesta a la empresa y se definiría cuáles son las cláusulas dispuestas a cambiar y porqué tipo de acciones.
Recordó que las propuestas de ASSA representarían un ahorro de 240 millones de dólares anuales a la empresa y comentó que se evitaría la pérdida de fuentes de trabajo, por lo que está en la mesa el esquema de rotación de personal.
Es decir que para una plaza un empleado labore un mes y luego un segundo en los siguientes 30 días.
