13 abril 2012

DEL CORREO DEL BLOG, EDITORIAL DE PULSO CIUDADANO

#Mexicana: otra vez Felipe Duarte

Etiquetas: #Mexicana, Felipe Duarte, Mario di Constanzo, Med Atlantica, subsecretario de Comunicaciones y Transportes, Tenedora K




De nueva cuenta, cuando parecía que la crisis de la Compañía Mexicana de Aviación estaba por entrar en un cauce de solución inmediata, Tenedora K, que posee el 95 por ciento de las acciones de la aerolínea, dio por terminadas las negociaciones con el grupo Med Atlántica con el argumento de que los representantes de éste no se habían presentado a las reuniones programadas. Sin embargo, Med Atlántica desmintió de inmediato esa versión y externó su “sorpresa” ante lo dicho por su contraparte.

Más allá de las trabas coyunturales, es difícil explicar la larguísima agonía de la empresa aérea –que implica la angustia del desempleo para miles de sus trabajadores y prestadores de servicios, así como quebrantos económicos y perjuicios diversos a un número mayor de consumidores– y la imposibilidad de hallar una solución si no es por la intervención de `esignios institucionales e intereses corporativos que buscan hacer imposible la reactivación de Mexicana. Por lo demás, tales designios e intereses no son ningún secreto: han sido denunciados una y otra vez ante la opinión pública.

Las dirigencias sindicales de pilotos, sobrecargos y empleados administrativos y de tierra de la línea aérea han venido señalando que los obstáculos al rescate de Mexicana se fabrican en el despacho de Felipe Duarte, subsecretario de Comunicaciones y Transportes. Un señalamiento parecido ha formulado el diputado Mario Di Constanzo, quien ayer escribió en un tuit: “@mariodiconstanzo: Me confirman q ruptura de negociación con MED se debe a Felipe Duarte. No se reactivaran hasta q no se de su renuncia.” Por lo demás, Duarte no sólo ha actuado tras bambalinas para impedir cualquier solución a la crisis de Mexicana. A la luz pública y a la vista de todo mundo incumplió la sentencia judicial emitida por el juez Felipe Consuelo Soto que ordenaba la devolución a la empresa en quiebra de las más de 40 rutas que fueron prestadas a las aerolíneas Interjet, Volaris y Aeroméxico.

Otro aspecto sumamente oscuro en la infortunada circunstancia por la que atraviesa la aerolínea emblema del país es la inacción gubernamental ante el manejo de su anterior propietario, Gastón Azcárraga, tan turbio que consiguió, en cosa de cinco años, llevar a la empresa de una situación de bonanza a una de quiebra, sin que las autoridades se hayan tomado la molestia, hasta el momento, de iniciar una averiguación exhaustiva que permita esclarecer posibles acciones fraudulentas en la administración de la aerolínea.

Da la impresión de que en algunas instancias del actual gobierno hay la determinación de convertir a Mexicana en una más de las bajas mortales del sexenio, y que quieren lograrlo antes de que éste termine. Es de esperar, en lo inmediato, que no se logre tal propósito. Asimismo, por elemental decoro republicano, el candidato que gane los comicios de julio próximo tendrá entre sus tareas iniciales de gobierno ordenar una investigación cristalina a fin de determinar qué intereses inconfesables y qué complicidades político-empresariales se han conjurado para evitar la reactivación de la línea aérea.