27 julio 2011

DEL CORREO DEL BLOG

Es asqueroso
¿Por qué alguna institución de crédito le prestaría a Mexicana para que pague las deudas millonarias de la pasada administración?
David Páramo




La perredista Lorena Villavicencio supone que todos son estúpidos o algo muy parecido: en su carácter de vocera del grupo Avanza Capital, se le ocurrió decir que sus representados tienen la mejor oferta para salvar a Mexicana de Aviación, ¿conoces las otras?... Pero que ya sólo falta un pequeño detalle: un banco que les preste los 300 millones de dólares.

Primero, las consideraciones lógicas. ¿Por qué alguna institución de crédito le prestaría a este grupo para que pague las deudas multimillonarias que dejó la administración de Gastón Azcárraga en CMA?

No debe olvidarse que la empresa prácticamente no tiene ningún activo y menos para garantizar una operación que no muestra viabilidad financiera.

Quizá a los de Avanza Capital se les ocurrió que el gobierno diera su aval para la operación. ¡Chin! Eso ya se le había ocurrido a Gastón Azcárraga y la administración de Felipe Calderón los mandó a volar.

En aquel momento el argumento fue que no existe ninguna razón por la cual tengan que tomarse fondos del erario para rescatar a una empresa privada y más aún cuando otras compañías, sin muletas populistas, no sólo han mantenido la oferta aeronáutica sino que el número de pasajeros transportados ha crecido.

Ciertamente hay un problema de precios que tenderá a resolverse en la medida en que Volaris, Interjet y VivaAerobus mantengan el paso y vayan quitando participación de mercado a Aeroméxico.

Quizá Villavicencio es hoy por hoy la vocera más pública y escandalosa que tienen las empresas que supuestamente pretenden rescatar a Mexicana de Aviación; sin embargo, entre todos los grupos hay una gran cantidad de “soñadores”, por decir lo menos, quienes quieren quedarse con la línea aérea sin mostrar el dinero.

Todos dicen que tienen cartas de crédito, que el dinero ahí viene y quién sabe cuántos rollos más. Como señalábamos ya hace mucho tiempo, la posición de Dionisio Pérez-Jácome y Javier Lozano podría resumirse en aquella legendaria frase show me the money.

Vamos, parecería que ya hasta Gerardo Badín comprendió que si no hay dinero fresco no se entregará la línea aérea que, reiteramos, sigue la ruta hacia la quiebra.

Después del 9 de agosto la empresa sería declarada
 en quiebra y se trataría de vender como un negocio en marcha. Ese es el camino más probable.