Querido sobrecargo informa.
Estoy sumamente preocupado por la situación que se vive dentro de ASSA en relación al conflicto con Mexicana de aviación y la posición que a tomado la dirigencia al respecto.
Al parecer ya se les olvidó por completo cual es el principal objetivo que le da razón de ser a un sindicato, es decir defender los intereses del trabajador, ¿de quién? del patrón por supuesto, que históricamente con tal de tener más y mejores ganancias, hace todo lo que está en sus manos para pagar lo menos posible por más trabajo. Es por esto que nuestro sindicato no debe preocuparse por el estado financiero de la empresa pues para eso es que tiene su propia administración la cual es la única responsable de dicho estado (sea bueno o malo) y la cual busca sistemáticamente distintas formas de mejorarlo (sea bueno o malo), entonces si tiene problemas de competitividad, que busque mejores rutas, mejores tarifas, mejores paquetes, mejores condiciones para renta de equipos o mejores formas de ahorrar combustible, pero ¿que pasa si además de todo esto le puede arrancar unos cuantos pesos a sus trabajadores? como es una empresa y no una beneficencia, obviamente lo va a hacer. El problema empieza cuando los que se supone nos deben defender y velar por nuestros intereses se ponen de lado del empresario; ¿que acaso Lizette Clavel no dijo hace unos años, cuando pretendía la secretaría general que Francisco Villarreal parecía trabajar para las empresas y no para los sobrecargos?
Estoy sumamente preocupado por la situación que se vive dentro de ASSA en relación al conflicto con Mexicana de aviación y la posición que a tomado la dirigencia al respecto.
Al parecer ya se les olvidó por completo cual es el principal objetivo que le da razón de ser a un sindicato, es decir defender los intereses del trabajador, ¿de quién? del patrón por supuesto, que históricamente con tal de tener más y mejores ganancias, hace todo lo que está en sus manos para pagar lo menos posible por más trabajo. Es por esto que nuestro sindicato no debe preocuparse por el estado financiero de la empresa pues para eso es que tiene su propia administración la cual es la única responsable de dicho estado (sea bueno o malo) y la cual busca sistemáticamente distintas formas de mejorarlo (sea bueno o malo), entonces si tiene problemas de competitividad, que busque mejores rutas, mejores tarifas, mejores paquetes, mejores condiciones para renta de equipos o mejores formas de ahorrar combustible, pero ¿que pasa si además de todo esto le puede arrancar unos cuantos pesos a sus trabajadores? como es una empresa y no una beneficencia, obviamente lo va a hacer. El problema empieza cuando los que se supone nos deben defender y velar por nuestros intereses se ponen de lado del empresario; ¿que acaso Lizette Clavel no dijo hace unos años, cuando pretendía la secretaría general que Francisco Villarreal parecía trabajar para las empresas y no para los sobrecargos?
¿que pasó entonces Liz? yo voté por ella precisamente por esa posición, por que íbamos a llegar a las últimas consecuencias antes de ceder nuestras prestaciones a un grupo empresarial que en el discurso decía estar en la peor de las situaciones pero que en los hechos estaba en la mejor poniendo en la mesa la mejor oferta para adquirir Aeroméxico pero ahora me siento completamente defraudado.
Hace un par de días, en un camaleonismo nunca pensado por un servidor, tenemos a la misma Lizzete Clavel ahora proponiendonos un convenio por la supuesta difícil situación por la que pasa la misma empresa que por cierto les recuerdo que sin consideración alguna metió en contra nuestra una demanda de carácter económico que pretende despojarnos, como se pueda, de gran parte de nuestro contrato colectivo de trabajo y para lo cual Clavel promovió amparos individuales. Esto es la incongruencia total y peor aun cuando el convenio que proponen no marca ninguna temporalidad, entonces, así como con la tenencia iba a ser por los juegos olímpicos nosotros vamos a perder prestaciones para siempre por culpa de la contingencia por influenza que duró solo un par de semanas, lo que pasa aquí es claro, como dicen en las Vegas, la casa nunca pierde.
Continuando con esta reflexión tenemos la relación entre el actual gobierno y los dueños de las empresas quienes financiaron la campaña exactamente de la misma forma como Carlos Ahumada financiaba campañas políticas en el Distrito Federal, a cambio de favores una vez que estos llegan a posiciones de poder, solo que en este caso, desgraciadamente no hay evidencia videograbada pero seguramente las transacciones fueron mucho mayores y se hicieron por otros medios, pero con idénticos resultados. Un gobierno que trabaja en función de los que los imponen y sostienen y no en favor de los ciudadanos, ni de los trabajadores, una secretaría del trabajo que actúa siempre a favor y en relación de lo que le mandan sus patrones (Gastón Azcarraga, Jose Luis Barraza, Maria Arambuzabala, Canales Clariond, etc) ¿y que tienen todos ellos en común? sencillamente que están lejos de tener "problemas financieros" a diferencia de la mayoría de mis compañeros sobrecargos, que por más que se sientan del jet-set, la realidad es que tenemos que pagar la mensualidad del carro, la renta, la hipoteca, la luz, el telefono, el nextel por supuesto, colegiaturas y que sin el bendito viático difícilmente saldría adelante.
Finalmente felicito a todos los dirigentes que son congruentes con su labor de representación y se oponen a este nuevo intento de despojo para quitarnos a los sobrecargos que representamos únicamente el 3% de la nómina de Mexicana, pero que de darse dicho convenio terminen en las cuentas personales de toda esta gente y no olvidemos que siempre hay una salida; que sale la resolución en contra nuestra, tenemos la huelga señores y a ver de que cuero salen más correas y espero que los que no lo han hecho, se pongan a la altura de las circunstancias, sean congruentes con todos aquellos que los pusimos en el lugar donde están y no olviden que su función es protegernos y defender nuestro CCT, no permitir esta clase de arbitrariedades e injusticias de las que ya estamos cansados.