El diluvio que viene
Rosario Avilés | Opinión 2011-08-09 | Hora de creación: 21:17:06| Ultima modificación: 00:00:05
Tal vez algunos de nuestros brillantes funcionarios públicos ya se han puesto a pensar en las consecuencias de la crisis que se avecina, con los problemas que se derivarán de la degradación de la deuda estadunidense y los problemas fiscales en Europa, pero serán poco los que dimensionen en su justa medida las consecuencias de ello.
Como siempre, los secretarios de Estado, los voceros de Banxico y todos los corifeos se apresurarán a decir que la economía mexicana es tan fuerte que nadie podrá hacerle el menor daño, o —como dirían los clásicos— «le hacen lo que el viento a Juárez» y como ni nos ven ni nos oyen, seguro que pensarán que la vida cotidiana transcurre en total abundancia.
La verdad es que todo esto tendrá consecuencias fuertes para la economía mexicana y aún mas, para la industria del transporte aéreo. Recordemos que cuando a Estados Unidos le da gripa, a México le da pulmonía, y que cuando a la economía del mundo le va mal, la aviación resiente al doble los efectos de cualquier cambio.
Se verá, entonces, el efecto en la aviación mexicana, que empezará a mostrar la realidad de las malas decisiones que se han tomado.
El hecho de que no se revisen los pronósticos de crecimiento no es un asunto menor, como se pretende. Es grave que no se vea que México necesita un cambio radical en cuanto a sus políticas de fomento a los sectores clave. Y aunque los encargados de los despachos gubernamentales (es mucho llamarles secretarios a la mayoría de ellos) no se percaten de ello, la aviación es un sector clave, que muestra más que muchas industrias el verdadero alcance de nuestra competitividad.
No sólo hemos perdido presencia en varios mercados, sino que ahora —con el acuerdo con Canadá— quieren vendernos gato por liebre. Que no se trata de «cielos abiertos», dicen, si no sólo de múltiple designación... Claro, por algo se empieza y sería bueno que nos explicaran qué aerolíneas podrían iniciar vuelos hacia Canadá ahora mismo.
No se entiende tampoco qué ganamos con ello. Si al menos trataran de explicar un poco su lógica, podríamos entender qué quieren obtener con su obsequiosa manera de entregar el país.
El subsecretario de Transporte, por ejemplo, se muestra tan contento con los acuerdos de Canadá y Perú y las extensiones que se brindaron a Panamá, que si no se comprendieran las consecuencias de esta apertura indiscriminada a cambio de nada, daría ternura.
Lo interesante es que mientras el mundo se preocupa y los principales líderes de países y aerolíneas se previenen para crear grupos de aerolíneas que logren fortaleza en la unión, para hacerse más competitivos y para dar opciones al usuario, en nuestro país seguimos creyendo que existen las aerolíneas de bandera y que el bajo costo es un modelo no de negocios de aerolínea en específico, sino de política aérea, es decir, de país. ¡Pobre México, tan lejos de la inteligencia y tan cerca de los eslogans repetidos hasta el inifinito!
Por lo pronto, diversos especialistas han comenzado a alertar sobre el precio del crudo y sus efectos en la aviación, así como la caída de las bolsas y sus consecuenias en las economías del mundo. Como siempre, nos tomará a los mexicanos desprevenidos.
Por otra parte, los los problemas de la economía de los Estados Unidos harán más difícil aún la captación de la fuerza de trabajo mexicana, el envío de remesas, el flujo de turistas y la adquisición de bienes procedentes de nuestro país, razones más que suficientes para que gobiernos más patriotas y avezados apoyaran a nuestras empresas insignia –como Mexicana de Aviación– para que pudieran recuperar el flujo de pasajeros.
Pero como la opacidad y la falta de rendición de cuentas son el signo de este gobierno, seguiremos en las mismas. Pero no por tanto tiempo: esperemos que pronto llegue el momento en que deberán responder por su falta de acción en este caso y su protección a quienes saquearon a la empresa.
Lo oi en 123.45: que en ocutbre Air France iniciará vuelos directos de París a Cancún. Para que se vea quién aprovecha los bilaterales y las designaciones.
raviles_2@prodigy.net.mx
Rosario Avilés | Opinión 2011-08-09 | Hora de creación: 21:17:06| Ultima modificación: 00:00:05
Tal vez algunos de nuestros brillantes funcionarios públicos ya se han puesto a pensar en las consecuencias de la crisis que se avecina, con los problemas que se derivarán de la degradación de la deuda estadunidense y los problemas fiscales en Europa, pero serán poco los que dimensionen en su justa medida las consecuencias de ello.
Como siempre, los secretarios de Estado, los voceros de Banxico y todos los corifeos se apresurarán a decir que la economía mexicana es tan fuerte que nadie podrá hacerle el menor daño, o —como dirían los clásicos— «le hacen lo que el viento a Juárez» y como ni nos ven ni nos oyen, seguro que pensarán que la vida cotidiana transcurre en total abundancia.
La verdad es que todo esto tendrá consecuencias fuertes para la economía mexicana y aún mas, para la industria del transporte aéreo. Recordemos que cuando a Estados Unidos le da gripa, a México le da pulmonía, y que cuando a la economía del mundo le va mal, la aviación resiente al doble los efectos de cualquier cambio.
Se verá, entonces, el efecto en la aviación mexicana, que empezará a mostrar la realidad de las malas decisiones que se han tomado.
El hecho de que no se revisen los pronósticos de crecimiento no es un asunto menor, como se pretende. Es grave que no se vea que México necesita un cambio radical en cuanto a sus políticas de fomento a los sectores clave. Y aunque los encargados de los despachos gubernamentales (es mucho llamarles secretarios a la mayoría de ellos) no se percaten de ello, la aviación es un sector clave, que muestra más que muchas industrias el verdadero alcance de nuestra competitividad.
No sólo hemos perdido presencia en varios mercados, sino que ahora —con el acuerdo con Canadá— quieren vendernos gato por liebre. Que no se trata de «cielos abiertos», dicen, si no sólo de múltiple designación... Claro, por algo se empieza y sería bueno que nos explicaran qué aerolíneas podrían iniciar vuelos hacia Canadá ahora mismo.
No se entiende tampoco qué ganamos con ello. Si al menos trataran de explicar un poco su lógica, podríamos entender qué quieren obtener con su obsequiosa manera de entregar el país.
El subsecretario de Transporte, por ejemplo, se muestra tan contento con los acuerdos de Canadá y Perú y las extensiones que se brindaron a Panamá, que si no se comprendieran las consecuencias de esta apertura indiscriminada a cambio de nada, daría ternura.
Lo interesante es que mientras el mundo se preocupa y los principales líderes de países y aerolíneas se previenen para crear grupos de aerolíneas que logren fortaleza en la unión, para hacerse más competitivos y para dar opciones al usuario, en nuestro país seguimos creyendo que existen las aerolíneas de bandera y que el bajo costo es un modelo no de negocios de aerolínea en específico, sino de política aérea, es decir, de país. ¡Pobre México, tan lejos de la inteligencia y tan cerca de los eslogans repetidos hasta el inifinito!
Por lo pronto, diversos especialistas han comenzado a alertar sobre el precio del crudo y sus efectos en la aviación, así como la caída de las bolsas y sus consecuenias en las economías del mundo. Como siempre, nos tomará a los mexicanos desprevenidos.
Por otra parte, los los problemas de la economía de los Estados Unidos harán más difícil aún la captación de la fuerza de trabajo mexicana, el envío de remesas, el flujo de turistas y la adquisición de bienes procedentes de nuestro país, razones más que suficientes para que gobiernos más patriotas y avezados apoyaran a nuestras empresas insignia –como Mexicana de Aviación– para que pudieran recuperar el flujo de pasajeros.
Pero como la opacidad y la falta de rendición de cuentas son el signo de este gobierno, seguiremos en las mismas. Pero no por tanto tiempo: esperemos que pronto llegue el momento en que deberán responder por su falta de acción en este caso y su protección a quienes saquearon a la empresa.
Lo oi en 123.45: que en ocutbre Air France iniciará vuelos directos de París a Cancún. Para que se vea quién aprovecha los bilaterales y las designaciones.
raviles_2@prodigy.net.mx
