POR LA ESPIRAL/Claudia Luna Palencia
11 Ago 2010(07:52:27)
-Mexicana de Aviación ¡Vaya vergüenza!
-El espejo de una mala administración
-Suspensión de vuelos y nómina
Cada crisis termina arruinando a distintos sectores de la microeconomía y por ende, pasando factura a la macro, ésta se llevó consigo muchos negocios pequeños, medianos y grandes.
Si recordamos tres crisis recientes: 1986-87, 1994-95 y 2009, en la primera con el colapso de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se esfumó el capital de familias que por vez primera accedieron al ahorro en el mercado accionario.
Después en 1994-1995, cientos de micro y pequeños negocios surgidos al calor del espejismo de la bonanza creada en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari y el estímulo del “empléate a ti mismo” cerraron en efecto dominó una vez que el peso devalúo en forma abrupta frente al dólar.
Tanto personas de clase media asalariada que decidieron convertirse en sus propios patrones como miles de desempleados por la desaparición, liquidación y fusión de dependencias oficiales que usaron sus liquidaciones para poner negocios fueron severamente dañados en dicha crisis.
En la de 2009, el golpe de la caída del PIB generalizó en todo el espectro de la clase media de por sí vapuleada por los constantes experimentos fiscales, pérdida en el poder adquisitivo acumulada desde inicio de los noventa; contracciones salariales y la inflación.
Esta crisis nuevamente dejó a muchos en la calle, distintas personas y familias con una mala administración (más deudas en proporción a sus ingresos) están sufriendo las consecuencias y también empresas de distintos tamaños con vulnerabilidades desde tiempo atrás no han logrado soportar el frenón en seco de la economía mexicana.
De esta manera encontramos en el ámbito financiero a Sofoles y Sofomes en crisis, para las primeras Sociedad Hipotecaria Federal instrumentó un rescate silencioso, un mini Fobaproa.
En otros rubros de la economía Cemex debió deshacerse de inversiones foráneas, Vitro apenas respira después de años de arrastrar una deuda mal manejada y Mexicana de Aviación entró en el túnel del concurso mercantil.
Es una lección de sobrevivencia económica: toda crisis da la puntilla a cuanto esté siendo mal administrado desde el bolsillo de una persona, la economía de una familia y la caja de una empresa. Es en suma el conjunto de la microeconomía.
Mexicana de Aviación representa una vergüenza en el más puro sentido de la administración es lo que toda empresa no debe hacer y un resultado además alentado por las autoridades del propio gobierno.
Todavía en años recientes intentaron desde el brazo oficial (con la venia de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Comisión Federal de Telecomunicaciones) propiciar una fusión entre Mexicana y Aeroméxico, es decir, fomentar un monopolio uniendo a las dos únicas grandes empresas que controlan un amplio radio de oferta de rutas nacionales e internacionales.
De haberse hecho, tendríamos en este momento quebrada a la industria de la aviación en el país. Todo lo contrario poco hemos avanzado en México por fomentar una industria de la aviación desregulada, abierta, competitiva, de opciones económicas y seguras para el usuario de una línea área.
Las tarifas de vuelos nacionales son muy altas como todo lo malhecho internamente formulado para proteger a distintos clanes empresariales y explotar al usuario que paga caro y malo.
Mexicana sintetiza lo anterior y pobres trabajadores que año con año han perdido conquistas laborales, aumentado sus horas de servicio y vuelo (los pilotos hacen hasta 12 horas en vuelos nacionales con todo y la responsabilidad que implica) renunciado a bonos de fin de año, reparto de utilidades e incremento salarial y afectados por los despidos de sus compañeros.
Han sido años de una mala administración cuyas culpas han pagado trabajadores y usuarios, los primeros con menores prestaciones y salario; los segundos, con precios de billetes más altos no compensados con calidad ni puntualidad.
Hace poco Mexicana de Aviación entró al espacio español, el año pasado pregunté a varios buenos amigos que acostumbran volar de México a Madrid acerca del servicio, me quedé un tanto sorprendida de sus críticas ante el retraso, pésima comida de abordo y trato del personal de vuelo.
Simplemente es el fiel reflejo de una empresa en crisis permanente que abarata los insumos para bajar los costos y aún así es inútil para saldar los números rojos.
Los empleados traen mala cara porque son infelices, están insatisfechos con su empresa, son explotados y el dinero no alcanza para una profesión que hasta hace dos décadas estaba de moda, era chic ser azafata, se podía vivir y viajar a otros países.
No existe más, Mexicana de Aviación está quebrada por tantos años de mala administración y por acumulación de deudas, de valer en activos 15 mil millones de pesos con deudas por 18 mil millones de pesos.
Los accionistas y empleados piden un rescate del Gobierno Federal, un auxilio financiero salido del erario público, no hay por el momento forma de ponerla en venta, la industria de la aviación mundial arrastra enormes avatares.
Lo más indeseable sería dejar a los trabajadores de Mexicana de Aviación en la calle y sin dinero; lo más lamentable sería rescatarla para beneficiar a los dueños.
Quizá Mexicana de Aviación necesite de la mano de Carlos Slim que la compre y someta a un proceso de administración como él y su equipo estilan, a lo mejor así es viable en el futuro.
SERPIENTES Y ESCALERAS
La empresa anuncia que no tiene ni para comprar turbosina ni gasolina, empieza a parar sus aviones, cancela vuelos y afecta a miles de usuarios. Recientemente fue anunciada la suspensión de 14 rutas internacionales con la consecuente queja e indignación de muchos pasajeros que además de quedarse en tierra deberán hacer todo lo posible por lograr el reembolso del billete.
Los empleados están en la misma situación tronándose los dedos con la interrogante de si el próximo día 15 habrá cheque de nómina.
En la prensa circulan diversos rumores que Mexicana de Aviación no pagará a sus trabajadores incluyendo a los de Link, Click y no sindicalizados.
P.D. Le invito a que opine del tema en mi blog http//claudialunapalencia.blogspot.com.
*Economista y columnista especializada. Con estudios de doctorado por la Universidad de Alcalá, tiene dos libros publicados y participa en distintos foros de radio y televisión con opiniones sobre educación financiera, economía y finanzas personales. Puede contactarla en: claulunpalencia@yahoo.com
11 Ago 2010(07:52:27)
-Mexicana de Aviación ¡Vaya vergüenza!
-El espejo de una mala administración
-Suspensión de vuelos y nómina
Cada crisis termina arruinando a distintos sectores de la microeconomía y por ende, pasando factura a la macro, ésta se llevó consigo muchos negocios pequeños, medianos y grandes.
Si recordamos tres crisis recientes: 1986-87, 1994-95 y 2009, en la primera con el colapso de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se esfumó el capital de familias que por vez primera accedieron al ahorro en el mercado accionario.
Después en 1994-1995, cientos de micro y pequeños negocios surgidos al calor del espejismo de la bonanza creada en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari y el estímulo del “empléate a ti mismo” cerraron en efecto dominó una vez que el peso devalúo en forma abrupta frente al dólar.
Tanto personas de clase media asalariada que decidieron convertirse en sus propios patrones como miles de desempleados por la desaparición, liquidación y fusión de dependencias oficiales que usaron sus liquidaciones para poner negocios fueron severamente dañados en dicha crisis.
En la de 2009, el golpe de la caída del PIB generalizó en todo el espectro de la clase media de por sí vapuleada por los constantes experimentos fiscales, pérdida en el poder adquisitivo acumulada desde inicio de los noventa; contracciones salariales y la inflación.
Esta crisis nuevamente dejó a muchos en la calle, distintas personas y familias con una mala administración (más deudas en proporción a sus ingresos) están sufriendo las consecuencias y también empresas de distintos tamaños con vulnerabilidades desde tiempo atrás no han logrado soportar el frenón en seco de la economía mexicana.
De esta manera encontramos en el ámbito financiero a Sofoles y Sofomes en crisis, para las primeras Sociedad Hipotecaria Federal instrumentó un rescate silencioso, un mini Fobaproa.
En otros rubros de la economía Cemex debió deshacerse de inversiones foráneas, Vitro apenas respira después de años de arrastrar una deuda mal manejada y Mexicana de Aviación entró en el túnel del concurso mercantil.
Es una lección de sobrevivencia económica: toda crisis da la puntilla a cuanto esté siendo mal administrado desde el bolsillo de una persona, la economía de una familia y la caja de una empresa. Es en suma el conjunto de la microeconomía.
Mexicana de Aviación representa una vergüenza en el más puro sentido de la administración es lo que toda empresa no debe hacer y un resultado además alentado por las autoridades del propio gobierno.
Todavía en años recientes intentaron desde el brazo oficial (con la venia de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Comisión Federal de Telecomunicaciones) propiciar una fusión entre Mexicana y Aeroméxico, es decir, fomentar un monopolio uniendo a las dos únicas grandes empresas que controlan un amplio radio de oferta de rutas nacionales e internacionales.
De haberse hecho, tendríamos en este momento quebrada a la industria de la aviación en el país. Todo lo contrario poco hemos avanzado en México por fomentar una industria de la aviación desregulada, abierta, competitiva, de opciones económicas y seguras para el usuario de una línea área.
Las tarifas de vuelos nacionales son muy altas como todo lo malhecho internamente formulado para proteger a distintos clanes empresariales y explotar al usuario que paga caro y malo.
Mexicana sintetiza lo anterior y pobres trabajadores que año con año han perdido conquistas laborales, aumentado sus horas de servicio y vuelo (los pilotos hacen hasta 12 horas en vuelos nacionales con todo y la responsabilidad que implica) renunciado a bonos de fin de año, reparto de utilidades e incremento salarial y afectados por los despidos de sus compañeros.
Han sido años de una mala administración cuyas culpas han pagado trabajadores y usuarios, los primeros con menores prestaciones y salario; los segundos, con precios de billetes más altos no compensados con calidad ni puntualidad.
Hace poco Mexicana de Aviación entró al espacio español, el año pasado pregunté a varios buenos amigos que acostumbran volar de México a Madrid acerca del servicio, me quedé un tanto sorprendida de sus críticas ante el retraso, pésima comida de abordo y trato del personal de vuelo.
Simplemente es el fiel reflejo de una empresa en crisis permanente que abarata los insumos para bajar los costos y aún así es inútil para saldar los números rojos.
Los empleados traen mala cara porque son infelices, están insatisfechos con su empresa, son explotados y el dinero no alcanza para una profesión que hasta hace dos décadas estaba de moda, era chic ser azafata, se podía vivir y viajar a otros países.
No existe más, Mexicana de Aviación está quebrada por tantos años de mala administración y por acumulación de deudas, de valer en activos 15 mil millones de pesos con deudas por 18 mil millones de pesos.
Los accionistas y empleados piden un rescate del Gobierno Federal, un auxilio financiero salido del erario público, no hay por el momento forma de ponerla en venta, la industria de la aviación mundial arrastra enormes avatares.
Lo más indeseable sería dejar a los trabajadores de Mexicana de Aviación en la calle y sin dinero; lo más lamentable sería rescatarla para beneficiar a los dueños.
Quizá Mexicana de Aviación necesite de la mano de Carlos Slim que la compre y someta a un proceso de administración como él y su equipo estilan, a lo mejor así es viable en el futuro.
SERPIENTES Y ESCALERAS
La empresa anuncia que no tiene ni para comprar turbosina ni gasolina, empieza a parar sus aviones, cancela vuelos y afecta a miles de usuarios. Recientemente fue anunciada la suspensión de 14 rutas internacionales con la consecuente queja e indignación de muchos pasajeros que además de quedarse en tierra deberán hacer todo lo posible por lograr el reembolso del billete.
Los empleados están en la misma situación tronándose los dedos con la interrogante de si el próximo día 15 habrá cheque de nómina.
En la prensa circulan diversos rumores que Mexicana de Aviación no pagará a sus trabajadores incluyendo a los de Link, Click y no sindicalizados.
P.D. Le invito a que opine del tema en mi blog http//claudialunapalencia.blogspot.com.
*Economista y columnista especializada. Con estudios de doctorado por la Universidad de Alcalá, tiene dos libros publicados y participa en distintos foros de radio y televisión con opiniones sobre educación financiera, economía y finanzas personales. Puede contactarla en: claulunpalencia@yahoo.com