Resurrección de Mexicana: ¿otra vez?El Mié, 28 de Mayo de 2014, 00:10 am, por Alicia Salgado
Por ahí ha corrido el rumor de que un grupo de inversionistas “bastante potentes” ligados a empresas aéreas y turísticas, están explorando aprovechar el proceso de liquidación de las filiales de Mexicana de Aviación que está conduciendo la juezEdith Alarcón, para adquirir activos y posiciones e incluso la marca.
Le comenté con anterioridad que la marca Mexicana de Aviación, se la quedó laholding Nuevo Grupo Aeronáutico, cuyas acciones pasaron a manos del abogadoJorge Gastélum, justo cuando se inició el proceso de quiebra de Mexicana que arrastró a Click y Link, pero nunca tocó a la controladora.
Hay otro activo en juego cuyo concurso fue revocado y es el Taller de Mantenimiento MRO, propiedad de Banorte de Alejandro Valenzuela, Bancomext, que lleva Enrique de la Madrid, y el AICM, que dirige Alfonso Sarabia, y en cuyo comité técnico están los representantes de los sindicatos. Ellos pueden decidir la venta.
¿Cuál es el interés? Recuperar Mexicana como empresa que cubra rutas largas y con conectividad global. ¡Competir con Aeroméxico que dirige Andrés Conesa!
Mire. Si el grupo interesado que se menciona es el de Interjet, que preside Miguel Alemán Velasco, nos haría lógica, pues ya en algún momento tuvo la intención y siempre le haría sentido dar el saldo de aerolínea de bajo costo a una aerolínea de alcance global, que pudiera ocupar los espacios que dejó Mexicana.
Las condiciones son distintas a la que pretendió Mr. PacBadín, porque no se estaría pidiendo la concesión ya que ésta la tiene Interjet, sino que se utilizaría la marca Mexicana para darle el alcance global a la aerolínea, que necesariamente tendría que modificar sus sistemas de reservación para facilitar conectividad internacional con la alianza OneWorld, que encabeza American Airlines.
Mire, todo esto sale de comentarios de que pronto estarían haciendo pública la intención de comprar Mexicana. Y en esto hay que tener mucho cuidado, porque hasta ahora, nadie se ha apuntado para comprar la liquidación de los trabajadores o restituir el fondo de jubilación de los miles de trabajadores a quienes nadie les dice qué hicieron con sus recursos de vida.