29 agosto 2011

DEL CORREO DEL BLOG

Los superrusos llegan en septiembre
Decidieron no tomar Bombardier, Mitsubishi o Embraer, y ¡se fueron con los rusos!
Alicia Salgado


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Aunque no descartan listarse en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) que preside Luis Téllez sí se abre una ventana de oportunidad en lo que resta de 2011, Interjet, que preside Miguel Alemán Velasco y dirige José Luis Garza Alvarado, está reforzando la difusión de la estructura corporativa y el plan de negocios de la aerolínea para que se le conozca como opción de inversión y se despejen las dudas surgidas durante su intención inicial de salir a Bolsa.

Entre las dudas que surgieron, está su decisión de comprar 15 aviones Sukhoi Superjet 100 rusos de 93 plazas —los pidieron con espacio y piel—, toda vez que su flota actual y contratada es Airbus. Como usted sabe, la falta de uniformidad en flotas generalmente es percibida como factor de incremento en costos, pero se justifican de acuerdo con la capacidad. Ellos decidieron no tomar Bombardier, Mitsubishi o Embraer y ¡se fueron con los rusos!

Interjet tiene expansión internacional, pero su mercado fundamental es el que desplazó la salida de Mexicana en el mercado nacional y regional, y estos requieren de una flota más flexible para atenderla de forma rentable. Por cierto, el único que será sólo Airbus es Volaris, que dirige Enrique Beltranena con 27 equipos entre A319 y A320. Por cierto, el próximo miércoles habrá sorpresitas en el concurso de Mexicana, pues dicen que el 31 de agosto uno de los grupos reloaded presentará otra oferta de esas que buscan detener la siguiente fase del concurso mercantil, pero no aportan capital fresco.

Volviendo a Interjet, el mercado regional del país consiste en un número importante de rutas de densidad media a baja a lugares con acceso a un aeropuerto existente dentro de un radio de 100 kilómetros, al tiempo en que hay algunas rutas internacionales de corto alcance que tienen condiciones similares (la de Guatemala o La Habana, por ejemplo).

También hay algunas rutas nacionales que tienen un tráfico menos denso durante ciclos bajos (esto es, ciertas estaciones como diciembre o en verano y, días de la semana como las de fin de semana playeras).

Hace seis años proyectaron su operación sobre una plataforma de Airbus 320 (tres en 2005) y el año pasado concluyeron con 22 aviones, uno de ellos ya flota propia. Se está sumando la entrega de los otros aviones para totalizar 36 de este tipo, de los cuales 15 serán arrendados y el resto flota propia para 2013-14 (el contrato sigue cumpliéndose y traerán dos aviones más en noviembre, tienen ocho más pedidos a la planta).

Como usted sabe, el fin de semana entrante, Aeroméxico, que preside José Luis Barraza y dirige Andrés Conesa, traerán el primer avión de flota propia, contratado con Embraer y, bueno, para septiembre Interjet traerá el primer SSJ-100 de los 15 contratados en octubre de 2010 para ser adquiridos entre 2011 y 2014, y del cual tienen una opción  para adquirir cinco más de 93 plazas.

Dicen que los aviones rusos son resultado de un esfuerzo europeo, pues los motores son franceses, los trenes de aterrizaje de Alemania, y parte de sus componentes (vestiduras y esas cosas) son de Italia, aunque la mayor parte es ensamblada en Rusia con componentes occidentales. Lo importante es que a Interjet, Sukhoi Civil Aircraft le dio condiciones extraordinarias de introducción del avión civil en el Continente Americano, y comentan que compite muy bien contra el Embraer 190, porque tiene mejores motores y fuselaje, cabina más amplia. Interjet piensa cubrir con este avión rutas como las del sureste llegando o saliendo de Chetumal, Bajío, Aguascalientes, Zacatecas, San Luis Potosí, Oaxaca, Torreón, La Paz, esto es, rutas de densidad media que con aviones grandes no son atendibles.

Bueno, pues el prototipo número cuatro va a ser certificado en Toluca en el mes de septiembre, y estará por cerca de 20 días. Dicen que son eficientes en materia de combustión.

Interjet tendrá, pues, una flota de 51 aviones y, como toda la flota mexicana, con excepción de la de VivAerobus, de Roberto Alcántara, tiene equipos nuevos, eficientes en materia de combustible, con características tales que les dota de flexibilidad para atender rutas de densidad media y baja, pero tienen un gran problema: una política aérea que sigue siendo muy incierta, no sólo por la indefinición en el caso  Mexicana, sino por la ausencia de reglas claras en materia de aeropuertos, combustibles, impuestos, derechos de navegación, etcétera.