29 julio 2011

DEL CORREO DEL BLOG

Desde el piso de remates | Maricarmen Cortés
Alerta Méjan sobre limbo jurídico de Mexicana

Luis Manuel Méjan, el ex director del Ifecom, critica la suspensión en el concurso mercantil de Mexicana porque generará incertidumbre jurídica
Viernes 29 de julio de 2011
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Interesantes las declaraciones de Luis Manuel Méjan, quien fuera el primer director del Instituto Federal de Concursos Mercantiles, Ifecom, y es uno de los principales expertos en la materia en México. Méjan aseguró que se generará un limbo jurídico por la decisión del juez Felipe Consuelo de aceptar la solicitud de los trabajadores de Mexicana de Aviación de suspender el concurso mercantil para que no venza el próximo 9 de agosto la primera etapa de conciliación entre acreedores.

 Méjan explicó que la primera irregularidad en el proceso no fue la retrotracción del concurso a febrero de 2006 cuando se escrituró la polémica venta de la Torre de Mexicana, sino el hecho de que el juez haya otorgado la primera prórroga en días hábiles que vencían el próximo 9 de agosto, en lugar de días naturales como establece la ley.

 En el caso de la suspensión, el problema, afirma Méjan, es que la ley no sólo no lo permite sino que lo prohíbe e incluso hay un antecedente en el concurso de un ingenio en el que le fue negada la suspensión precisamente porque está en contra de la ley.

 El problema con este limbo jurídico es que podrían registrarse impugnaciones a cualquier decisión de Consuelo: ya que sea en el caso extremo de la quiebra si ninguno de los dos grupos demuestra solvencia o si uno de los grupos perdedores en la contienda se inconforma con el proceso una vez que se venda Mexicana.

 Y aún en el caso de que ningún grupo se inconformara existe el riesgo de que algún acreedor como lo hizo GAP en Aviacsa impugne el concurso mercantil.

 Hay que recordar el caso de Aviacsa en el que, a pesar de que no se registró ninguna irregularidad dentro del concurso mercantil, Grupo Aeroportuario del Pacífico impugnó los resultados y no sólo impidió que Aviacsa reanudara vuelos en mayo pasado sino que aún mantiene en jaque al grupo de Ramón Madero.