27 octubre 2014

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Cielos abiertos, eh ahí el dilema

El Lun, 27 de Octubre de 2014, por Marielena Vega
Marielena Vega
Marielena Vega
Columnista en Excélsior.
Cielos abiertos en el sector aéreo, sí o no. Todo parece indicar que al interior del Congreso el tema comenzó a tener mayor eco de las fracciones de oposición; PAN y PRD, en específico de las oficinas de la senadora Alejandra Barrales y el senadorJosé Luis Preciado, quienes ven con buenos ojos una política aeronáutica, pero no dar paso a los cielos abiertos.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), al mando de Luis Foncerrada, también ha manifestado su determinación de esperar a dar el paso de abrir las condiciones de la industria aérea como lo quiere el vecino país, cuyo panorama ha cambiado después de la firma del TLC.
Tiempo en que, a través de la IATA, se establecían las condiciones y reglas de cómo tanto aerolíneas nacionales como extranjeras iban a seguir creciendo en territorio local como internacional.
Sin embargo, es una realidad que, desde 1977, Estados Unidos comenzó con la desregulación del transporte aéreo internacional y la cancelación de la autoridad aeronáutica administrativa y reguladora.
Así como de revisión de sus convenios bilaterales, obteniendo gradualmente una flexibilización y apertura internacional, que ha beneficiado a sus aerolíneas.
Pero, qué pasa con México y su industria aérea local. Aunque ésa se encuentra en recuperación, es cierto que el tamaño de toda la flota nacional, representa la dimensión de una de las aerolíneas del vecino país, así que la competencia simplemente se aleja de la realidad. Dejando en muchos casos en jaque a las mal llamadas líneas de bajo costo que comienzan a ver un punto para crecer a nivel nacional e internacional, y que podrían verse simplemente aplastadas por la competencia con dichos gigantes.
Lo que se precisa es una política aeronáutica, y en ello coincide el gobierno federal, al mando de Enrique Peña Nieto, y aunque en el tema de cielos abiertos no está descartado, tampoco se ha dicho sí.
Porque, sabemos que el gobierno primero quiere que haya una política aeronáutica mexicana, para el transporte aéreo internacional en el intercambio bilateral para asegurar condiciones justas e iguales de participación, en lo que coinciden las fuerzas políticas PAN y PRD.
Y no es que se satanice a la viabilidad de los cielos abiertos, una realidad a la que ya no se puede escapar la industria aérea, sólo que es una realidad que las firmas aéreas nacionales no cuentan con las condiciones técnicas ni financieras para enfrentar la competencia que se desencadenaría con las aerolíneas estadunidenses, canadienses y europeas; debido a la solidez que éstas presentan.
No obstante, la infraestructura aeroportuaria, como dice el senador Preciado, precariamente cumple con los aspectos técnicos especificados por la Organización de Aviación Civil Internacional facilitación y seguridad de la aviación contra actos de interferencia ilícita.
Sin embargo, sí se podría avanzar en el tema y poner mejores reglas y estructura para los jugadores nacionales, y de ello también hablan los senadores del PAN y PRD así como la iniciativa privada CEESP, sector aéreo nacional y sector de la mensajería y paquetería de México, la cual también tiene voz y voto ante las modificaciones que podría presencia.
Se debería comenzar por aclarar quiénes son jugadores nacionales, dado que muchos pasan por mexicanos y su verdadera razón de ser ya es de origen extranjero. Pero de esto le hablamos la próxima semana, con nombres y apellidos.

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