por los siguientes motivos:
1.- Dejo casi inactiva a CMA, sin motivo alguno
2.- Debió de hacer auditoría y fincar
responsabilidades a los anteriores
dueños e investigar la fuga de utilidades
de forma dolosa en beneficio de otras empresas
3.- No debió contratar personal externo
para las mismas funciones que podían
hacer los propios empleados
4.- Debió oponerse a la simulada venta de
las empresas de Mexicana de aviación a
Tenedora K, entregándose en 1000 pesos
a incondicionales de los anteriores dueños.
5.- Nunca debió negociar con compradores
insolventes, que no daban garantía en el sistema
financiero mexicano
6.- debió cobrar honorarios acordes a sus resultados
7.- permitió el deterioro de activos en perjuicio de los
del la empresa, y cada día bajo el valor de sus activos
8.- debió de oponerse al uso de las rutas propiedad
CMA.
9.- Debió pedir la autorización de la SCT de permitir
la navegabilidad de los aviones que tenía a su cargo
y solicitar al Juez que los aviones entregados
por los funcionarios de la anterior administración
se reincorporaran al concurso mercantil
10.- debió solicitarla requisa por parte del ejecutivo
y de los medios judiciales a su alcance
11.- Debió solicitar a las autoridades del exterior
las denuncias y demandas en contra de la empresa
sometida al concurso.
12.- Debió someter un plan de reestructura financiera
y laboral
13.- Debió demandar a los anteriores dueños los daños
causados por mala y dolosa administración tanto en
México como en el exterior; o el mismo, dado el caso,
interponerla si era a beneficio del concurso mercantil.
14.- Debió presentar denuncias y demandas contra los
supuestos y mal intencionados compradores, que aún
sabedores de que estaba en juego la suerte laboral
de miles de trabajadores incurrieron en similares
practicas dolosas que ocasionaron un daño económico
al concurso mercantil, y provocaron daño moral a
los trabajadores y sus respectivos sindicatos.
15.- Debió abocarse a la Ley Concursal y demandar ante
las autoridades superiores, o interponer amparos o quejas
ante el Consejo de la Judicatura por las disposiciones
dilatorias en que incurría el órgano judicial rector
Con un saludo de Arturo José Siliceo