Mexicana de Aviación… ¿Y dónde está el dinero?
19 Febrero, 2012 - 21:05
CREDITO:
Pedro Suárez Aguilar
El ruido, en especial el mediático que ya podría calificarse de turbulencia, que se ha hecho alrededor de este caso ha sido en gran parte impulsado por las declaraciones del juez Felipe Consuelo Soto, quien tiene en sus manos el proceso de concurso mercantil de la firma aérea.
El asunto de Mexicana de Aviación, desde el ángulo legal -afirma un abogado especialista en concurso mercantil- es todo un caso porque el Juez Consuelo viola la ley, la cual es muy clara y tiene plazos específicos y el juez a cargo -asevera el abogado especialista que prefiere el anonimato- no puede extender el plazo de manera indefinida, por eso existe la ley y establece tiempos precisos que de no cumplirse sientan un mal precedente.
Así, mientras que no aparece el dinero por ningún lado de parte de los diferentes grupos de inversionistas que hasta hoy han levantado la mano para reestructurar a la compañía, se suma una actuación del Juez a cargo, al menos poco ortodoxa, de llevar a buen juicio lo que las leyes establecen del propósito para el que fue creado el concurso mercantil, cuya finalidad es que una empresa logre o bien recuperarse de sus problemas financieros (el caso de Codusa, hoy Bio-pappel, y la Comercial Mexicana son dos ejemplos de los más relevantes), para seguir operando y cubriendo sus deudas de manera ordenada, o que liquide lo más que sea posible sus deudas con los activos que le queden en caso de que le sea imposible regresar a operar y que sea declarada la quiebra, eso establece la ley, no hace distingo entre tipos de empresas.
Mientras, los trabajadores de Mexicana de los tres sindicatos representados por Fernando Perfecto, Ricardo del Valle y Miguel Ángel Yúdico publican hoy lunes 20 de febrero un desplegado sobre tres puntos fundamentales que ellos consideran indispensables para que vuelva a operar Mexicana de Aviación.
Sin duda vienen días en los que se tendrá que avanzar en una salida para la empresa aérea y las salidas están plenamente marcadas por la ley, la reestructura financiera o la quiebra.
19 Febrero, 2012 - 21:05
CREDITO:
Pedro Suárez Aguilar
El ruido, en especial el mediático que ya podría calificarse de turbulencia, que se ha hecho alrededor de este caso ha sido en gran parte impulsado por las declaraciones del juez Felipe Consuelo Soto, quien tiene en sus manos el proceso de concurso mercantil de la firma aérea.
El asunto de Mexicana de Aviación, desde el ángulo legal -afirma un abogado especialista en concurso mercantil- es todo un caso porque el Juez Consuelo viola la ley, la cual es muy clara y tiene plazos específicos y el juez a cargo -asevera el abogado especialista que prefiere el anonimato- no puede extender el plazo de manera indefinida, por eso existe la ley y establece tiempos precisos que de no cumplirse sientan un mal precedente.
Así, mientras que no aparece el dinero por ningún lado de parte de los diferentes grupos de inversionistas que hasta hoy han levantado la mano para reestructurar a la compañía, se suma una actuación del Juez a cargo, al menos poco ortodoxa, de llevar a buen juicio lo que las leyes establecen del propósito para el que fue creado el concurso mercantil, cuya finalidad es que una empresa logre o bien recuperarse de sus problemas financieros (el caso de Codusa, hoy Bio-pappel, y la Comercial Mexicana son dos ejemplos de los más relevantes), para seguir operando y cubriendo sus deudas de manera ordenada, o que liquide lo más que sea posible sus deudas con los activos que le queden en caso de que le sea imposible regresar a operar y que sea declarada la quiebra, eso establece la ley, no hace distingo entre tipos de empresas.
Mientras, los trabajadores de Mexicana de los tres sindicatos representados por Fernando Perfecto, Ricardo del Valle y Miguel Ángel Yúdico publican hoy lunes 20 de febrero un desplegado sobre tres puntos fundamentales que ellos consideran indispensables para que vuelva a operar Mexicana de Aviación.
Sin duda vienen días en los que se tendrá que avanzar en una salida para la empresa aérea y las salidas están plenamente marcadas por la ley, la reestructura financiera o la quiebra.
