Desde el piso de remates
Por: Maricarmen Cortés EL UNIVERSAL , Martes, 10 de Enero de 2012
Mexicana, otra vez a la espera de una prórroga.
Falta un mes para que venza el plazo fijado por el Juez Felipe Consuelo para declarar la quiebra de Mexicana y ningún grupo ha mostrado aún solvencia económica Auténticamente el futuro de Mexicana de Aviación depende de la decisión del juez Felipe Consuelo, quien está al frente del proceso de concurso mercantil de la empresa y quien una y otra vez, en decisiones jurídicas muy polémicas, ha alargado el plazo y prorrogado la declaratoria de quiebra.
El nuevo plazo como se recordará vence el próximo 10 de febrero y desafortunadamente para los trabajadores que siguen sin perder la esperanza de un rescate, no hay a la vista ningún grupo serio interesado en capitalizar a la empresa.
No se descarta sin embargo que en los próximos días surja una nuevo opción o un nuevo empresario que asegure que sí tiene los recursos pero que se quede otra vez en el “ya merito” y que culpe a la SCT de no haberlo apoyado.
El conciliador Gerardo Badín por su parte insiste en que sí es viable el rescate, en que los más de 25 millones de pesos mensuales que gasta en la administración mantienen a la aerolínea lista para ser vendida y ponerse en operación.
Los trabajadores por su parte recrudecerán sus protestas y cuestionan a través de Twitter el rescate del Tren Suburbano y la concesionaria CAF.
Sin embargo como ya le informamos, la SCT ha explicado que a Mexicana se le apoyó en su momento con el crédito de Bancomext de mil millones de pesos para enfrentar la crisis de 2009 y en el caso de la línea 1 del Tren Suburbano, lo que hizo el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin), fue capitalizar el fondo de contingencia por mil 600 millones de pesos que le da al gobierno 49% de la concesionaria y CAF no sólo redujo su participación, sino también su margen de rendimiento a 4%.
La SCT mantiene su postura de que no habrá un rescate de la aerolínea con recursos públicos, insiste en que la decisión de la venta depende de Gerardo Badín y el comprador deberá mostrar solvencia jurídica, económica y administrativa.
Por: Maricarmen Cortés EL UNIVERSAL , Martes, 10 de Enero de 2012
Mexicana, otra vez a la espera de una prórroga.
Falta un mes para que venza el plazo fijado por el Juez Felipe Consuelo para declarar la quiebra de Mexicana y ningún grupo ha mostrado aún solvencia económica Auténticamente el futuro de Mexicana de Aviación depende de la decisión del juez Felipe Consuelo, quien está al frente del proceso de concurso mercantil de la empresa y quien una y otra vez, en decisiones jurídicas muy polémicas, ha alargado el plazo y prorrogado la declaratoria de quiebra.
El nuevo plazo como se recordará vence el próximo 10 de febrero y desafortunadamente para los trabajadores que siguen sin perder la esperanza de un rescate, no hay a la vista ningún grupo serio interesado en capitalizar a la empresa.
No se descarta sin embargo que en los próximos días surja una nuevo opción o un nuevo empresario que asegure que sí tiene los recursos pero que se quede otra vez en el “ya merito” y que culpe a la SCT de no haberlo apoyado.
El conciliador Gerardo Badín por su parte insiste en que sí es viable el rescate, en que los más de 25 millones de pesos mensuales que gasta en la administración mantienen a la aerolínea lista para ser vendida y ponerse en operación.
Los trabajadores por su parte recrudecerán sus protestas y cuestionan a través de Twitter el rescate del Tren Suburbano y la concesionaria CAF.
Sin embargo como ya le informamos, la SCT ha explicado que a Mexicana se le apoyó en su momento con el crédito de Bancomext de mil millones de pesos para enfrentar la crisis de 2009 y en el caso de la línea 1 del Tren Suburbano, lo que hizo el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin), fue capitalizar el fondo de contingencia por mil 600 millones de pesos que le da al gobierno 49% de la concesionaria y CAF no sólo redujo su participación, sino también su margen de rendimiento a 4%.
La SCT mantiene su postura de que no habrá un rescate de la aerolínea con recursos públicos, insiste en que la decisión de la venta depende de Gerardo Badín y el comprador deberá mostrar solvencia jurídica, económica y administrativa.