Trabajadores de Aeroméxico desconocieron a Lisette Clavel como secretaria general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) y pidieron a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social negar la toma de nota al Comité Ejecutivo nombrado y ratificado en días pasados.
En conferencia de prensa, un grupo de disidentes encabezados por Patricia Benítez y Gabriel Alvarado, afirmaron que tienen documentadas las irregularidades cometidas por Clavel Sánchez y sus seguidores de imponer una reforma estatutaria y nombrar a la dirigencia para un periodo de seis meses.
Los quejosos propusieron a los afiliados de ASSA, incluidos los de Mexicana de Aviación, Aeroméxico y demás empresas donde tiene representación, crear una coalición que dirija al sindicato, en tanto se repone el proceso electoral apegado a la Ley y a los Estatutos.
Explicaron que desde octubre de 2010 presentaron escritos de inconformidad ante las autoridades laborales, pero éstas no han dado respuesta y por ello pidieron que a la brevedad se pronuncien sobre este asunto negando la toma de nota.
Los inconformes advirtieron que si pese a las pruebas de las violaciones estatutarias, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social concede la toma de nota al grupo de Lisette Clavel se impugnará legalmente este hecho.
Asimismo negaron que este conflicto interno en la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación llegue a afectar el proceso de revisión del Contrato Colectivo, que Aeroméxico solicitó para reducir prestaciones de sobrecargos hasta en 15 por ciento.
Comentaron que los casos de Mexicana de Aviación y Aeroméxico son muy distintos, pues mientras en el primer caso hubo irregularidades de los propietarios, en el segundo aprecian voluntad por invertir y fortalecer a la aerolínea.
En conferencia de prensa, un grupo de disidentes encabezados por Patricia Benítez y Gabriel Alvarado, afirmaron que tienen documentadas las irregularidades cometidas por Clavel Sánchez y sus seguidores de imponer una reforma estatutaria y nombrar a la dirigencia para un periodo de seis meses.
Los quejosos propusieron a los afiliados de ASSA, incluidos los de Mexicana de Aviación, Aeroméxico y demás empresas donde tiene representación, crear una coalición que dirija al sindicato, en tanto se repone el proceso electoral apegado a la Ley y a los Estatutos.
Explicaron que desde octubre de 2010 presentaron escritos de inconformidad ante las autoridades laborales, pero éstas no han dado respuesta y por ello pidieron que a la brevedad se pronuncien sobre este asunto negando la toma de nota.
Los inconformes advirtieron que si pese a las pruebas de las violaciones estatutarias, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social concede la toma de nota al grupo de Lisette Clavel se impugnará legalmente este hecho.
Asimismo negaron que este conflicto interno en la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación llegue a afectar el proceso de revisión del Contrato Colectivo, que Aeroméxico solicitó para reducir prestaciones de sobrecargos hasta en 15 por ciento.
Comentaron que los casos de Mexicana de Aviación y Aeroméxico son muy distintos, pues mientras en el primer caso hubo irregularidades de los propietarios, en el segundo aprecian voluntad por invertir y fortalecer a la aerolínea.