06 noviembre 2014

DEL CORREO DEL BLOG

Sí a la apertura

El Jue, 06 de Noviembre de 2014, por David Páramo
David Páramo
David Páramo
Columnista de Excélsior.

Ayer en el hotel donde iniciaron las conversaciones entre el gobierno de México y Estados Unidos para negociar los convenios bilaterales en materia de aviación un grupo de pilotos miembros de ASPA de México dieron un espectáculo tan rupestre como inútil.
Con mantas y mediante un plantón se exhibieron como lo que son los sindicatos de la aviación en México, una suerte de dinosaurio que saben que están por morir ante su incapacidad para adecuarse a las nuevas formas de vida.
Las pancartas, lamentables, hablan del tamaño de las flotas y de cómo sería devastado el sector por la apertura. Quizá no alcanzan a entender tres cosas: La primera de ellas es que precisamente su tamaño hace que la política pública sea menos dolorosa, puesto que está pensada a favor de las mayorías.
Segundo. No queda claro a quién están defendiendo, puesto que hablan de la industria (que evidentemente ellos no representan en su conjunto) cuando en realidad están tratando de proteger una forma de vida que no se adapta a la realidad nacional. Hace muchísimos años se acabaron los tiempos de privilegio y dispendio. No aprendieron nada de la quiebra de Mexicana de Aviación.
Tercero. Nadie quiere abrir los cielos. No es una propuesta del gobierno de México, Estados Unidos ni de ninguna empresa.
Aeroméxico está a favor de los convenios que se están negociando, porque de un modo u otro les beneficia una mayor posibilidad de tener destinos en Estados Unidos, así como a los convenios que tienen con Delta, a través de la modernización de los acuerdos bilaterales.
Curiosamente los que se oponen son VivaAerobus, Interjet y Volaris puesto que lo aprecian como una suerte de cambio de reglas y estaban a gusto con un mercado cerrado y con condiciones de elevada concentración en contra de los consumidores.