Mano negra en caso Mexicana de Aviación
Siempre hemos dicho que en política no hay coincidencia ni casualidades.
Mientras Gastón Azcárraga, vaciaba las arcas de Mexicana de Aviación, la dejaba caer como piano…
Y las aerolíneas Interjet y Volaris, crecieron a lo grande.
Una, propiedad de un junior presidencial y exgobernador, Miguel Alemán, y la otra perteneciente a un poderoso grupo político-empresarial encabezado por Pedro Aspe, exsecretario de Hacienda de Carlos Salinas.
Durante el lapso que duró la crisis de Mexicana (tres años y meses), hubo muchos postores para adquirir la aerolínea. Pero, cosas raras de la política y los negocios en México, todos los intentos, por angas o mangas, jamás fructificaron.
¿Hubo mano negra detrás de todo este asunto?
Entre los interesados por adquirir esta empresa, estuvieron: The Willians Capital Group; PC Capital; TG Group; BMC Finantial; Rocasso; International; Iván Barona Ramírez, como representante de BF International Mining Traders; y Med Atlántica Europa, SLSU.
No obstante y gracias a Javier Lozano Alarcón y a su jefe, Felipe Calderón, Mexicana de Aviación, a partir de agosto del 2010 nunca volvió a levantar el vuelo, actividad que inició en 1921, por lo cual se le consideró como una de las tres aerolíneas más antiguas del planeta.
Durante los primeros meses de la presidencia de Vicente Fox (marzo del 2000), la SCT concedió título de concesión a la Compañía Mexicana de Aviación, S.A. de C.V., al acreditar la capacidad técnica, financiera, jurídica y administrativa.
Cinco años después, 2005, con su Grupo Posadas, Gastón Azcárraga, por 165 millones de dólares compra Mexicana al Gobierno de su amigo Fox Quesada.
Después de varios préstamos millonarios obtenidos (con Banorte, Bancomext-Nafinsa y con el mismo Gobierno Federal, éste último posterior a la crisis por la epidemia de Influenza A-H1N1), el 25 de agosto del 2010, con un argumento simplista, “por haber acontecido un evento de fuerza mayor”, Gastón Azcárraga, anunció la suspensión temporal de vuelos.
Esta suspensión temporal de vuelos tuvo un desenlace final el 3 de abril de 2014, cuando la juez del concurso mercantil, dictó cuatro sentencias con las que declara la quiebra de las aerolíneas Mexicana, Click y Link, por lo cual miles de trabajadores quedan prácticamente sin empleo y a la deriva.
Trascurrido un mes de este anuncio, todavía flotan muchas preguntas:
¿Mexicana fue quebrada deliberadamente por Gastón Azcárraga?
¿Por qué Felipe Calderón evitó, a través de sus colaboradores, que Mexicana fuera comprada?
Ingrediente indispensable en el trabajo de cañerías, el hoy senador y entonces secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón ¿qué papel jugó en todo este asunto y a qué intereses políticos y empresariales respondió?
Lo del Sindicato Mexicano de Electricistas, SME, tiene el mismo sello y la misma denominación de origen.
¿Nadie puede encontrar a Gastón Azcárraga?
Hasta ahora, el largo brazo de la justicia en México se ha visto impedido en encontrar a Gastón Azcárraga, quien se ha convertido en un fugitivo VIP o en el hombre invisible.
Entre los delitos cometidos, el expropietario de Mexicana llevó a cabo numerosas operaciones entre sus empresas (se robaba él mismo) para dar soporte financiero a su matriz, el Grupo Posadas.
Las paradojas en ciertos sectores de la actividad política y empresarial en México, se reflejan con lo que sucede en el caso Mexicana de Aviación, pues en tanto miles de trabajadores están desempleados y viviendo graves problemas económicos, un empresario honesto y decente, que tuvo contacto cercano con el mandatario Vicente Fox, se convirtió en el fugitivo más rico del mundo, pero con una pequeña gran diferencia, pues jamás tendrá problema económico alguno esté donde esté… y continuará siendo el honesto y respetable Don Gastón Azcárraga.
Y un senador como Javier Lozano, continúa como Johnnie Walker… tan campante.
