Calderón eliminó Mexicana de Aviación
en nov 25th, 2012 Puedes dejar una respuesta, o trackback a esta entrada
Estados de los Estados
Colaboración Especial
En
vísperas de que Enrique Peña Nieto rinda protesta como presidente de
México, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) reveló que el
cese de operaciones de Mexicana de Aviación “fue una política de
Estado” tendiente a eliminar a esta empresa emblemática del país, por lo
que el nuevo Ejecutivo federal “tiene la obligación de llevar una
iniciativa de ley al Congreso de la Unión para que la aviación mexicana,
que fue degradada a categoría dos, se decrete como sector prioritario y
se avale el rescate de Mexicana”.
En
el panel periodístico Estado de los Estados conducido por Lilia
Arellano con la participación de Abelardo Martín y Joaquín Reséndiz, si
bien el secretario general y el vocero de ASPA, Carlos Morineau y
Antonio Vargas, responsabilizaron a Gastón Azcárraga, del Grupo Posadas,
de llevar a Mexicana al fracaso por su “pésima administración y bajo
perfil empresarial”, culparon al gobierno de Felipe Calderón y más
directamente al ex secretario de Comunicaciones y Transportes, Juan
Molinar Horcasitas, del cese de operaciones de la aerolínea.
“El
gobierno actual que ya se va en unos días afortunadamente, no tomó el
ámbito aéreo como algo estratégico y prioritario. La aviación en este
país, como en muchos países del mundo, es un engranaje fundamental de
desarrollo, es el que habla de la economía y el potencial de una nación”, señaló Morineau mientras Vargas fue directo: “El
cierre de Mexicana, el cese de operaciones, fue una política de Estado
porque cuando Molinar Horcasitas llegó como secretario de Comunicaciones
y Transportes se reunió con nosotros, con los pilotos de ASPA y nos
dijo: ‘No hay lugar para dos aerolíneas troncales, una tiene que
desaparecer’. Y después de estos años es evidente que en toda su
gestión, la de Molinar Horcasitas y ahora la de Pérez Jácome, ha sido
eso: eliminar a Mexicana”.
“Las afectaciones están a la vista”, prosiguió el vocero, “el
sureste padeció el problema de la conectividad, había muchas rutas
étnicas, la de Chetumal, había una ruta que era
Mérida-Villahermosa-Tuxtla-Oaxaca hasta Cancún, todo ese mercado no está
ahorita atendido. Entonces las afectaciones que ha habido, sobre todo
en esa parte del país, están a la vista. Y el gobierno fue omiso, los
peores años de la aviación los hemos padecido con estos dos sexenios de
panismo. México era un referente para Latinoamérica en lo que se refiere
a aviación. Lamentablemente ahora, con esta omisión, el Estado no ha
hecho su trabajo de supervisar las operaciones aéreas y sufrimos una
degradación a categoría dos por parte del gobierno de Estados Unidos
debido a la incapacidad del Ejecutivo federal de tener operaciones
seguras. Es evidente que el cese de operaciones de Mexicana fue una
política de Estado, por eso hasta la fecha no hemos podido reiniciar
operaciones, hasta que no termine este sexenio”.
-¿Por qué dos aerolíneas troncales no? ¿Qué no puede haber dos o tres o cinco?-, cuestionó la conductora.
“Sí,
es un modelo que existe en muchas partes del mundo, en Sudamérica
estaba en Brasil, en China no se diga, en Japón no se diga, hay varias
aerolíneas troncales”. -¿Y por qué en México no? –”Bueno, porque falta
una cultura aeronáutica, por eso es fundamental que se cree una política
aeronáutica en este país”.
“En
esta plática podemos poner ejemplos mil de lo que es la ausencia del
Estado en un sector tan importante”, intervino Morineau, “pero tenemos
mucha fe de que el nuevo gobierno tome esto en serio”. -¿Será cuestión
de fe o es cuestión de que el movimiento se demuestra andando?-,
cuestionó Arellano. “Yo creo que es cuestión de congruencia, de que se
asuman las cosas como debe de ser. Yo creo que se tiene que abrir una
ventana de oportunidad con un nuevo criterio en este gobierno que está
por entrar, donde Peña Nieto agarre como agenda prioritaria lo que es el
sector aeronáutico en el país, lo que es la aviación, y que lo vuelva
un país competitivo en ese sentido. En Estados Unidos hay líneas aéreas
que hoy tienen más de mil 500 aviones y el Estado las protege a través
del Capítulo 11, que aquí no existe”.
-¿Qué tiene que hacer el gobierno de Peña Nieto para que Mexicana vuelva a operar? –”Tiene
la obligación de hacer lo correcto, de ejercer el liderazgo y de que el
gobierno federal asuma el concepto rector histórico que le dan para que
proteja esta industria. Tiene la obligación de llevar una iniciativa de
ley al Congreso para que se vuelva una política de Estado y se vuelva
un sector prioritario para el país. Vemos con buenos ojos, pareciera ser
que traen una agenda para que ya en su función de Ejecutivo federal, dé
el aval para que Mexicana de Aviación regrese a volar. El gobierno
federal no puede por mandato, por ley, meterle dinero a Mexicana porque
es una empresa privada, pero lo que sí puede y debe de hacer es dar un
aval para que gente realmente interesada en el ámbito privado, rescate a
Mexicana de Aviación”, señaló Morineau.
-¿Toño, en qué situación se encuentra la aviación mexicana en estos momentos? –
“Está
en su peor momento. Y bueno, están a la vista los accidentes que hemos
tenido, lamentables, en que se han perdido vidas incluso de
funcionarios. En este momento la seguridad de las operaciones se
encuentra en un nivel límite. Es seguro volar pero no como estábamos
hace 12 años. Lamentablemente por eso sufrimos la degradación a
categoría dos cuando vino la FAA a hacer una verificación y se dio
cuenta que le faltaban recursos a la Dirección General de Aeronáutica
Civil, recursos, personal calificado, registros; por eso nos degradaron.
Afortunadamente las aerolíneas cumplen con los estándares
internacionales y por eso no ha habido problemas, pero ahí está la
muestra con la aviación ejecutiva, la cantidad de accidentes que ha
habido, y en la aviación oficial. Ese es el problema. El gobierno lo que
tiene que hacer es asumir su papel de autoridad. No estuviéramos en
esta posición si el gobierno trabajara como lo tiene que hacer; con una
actitud rectora, de autoridad, de supervisar las operaciones. Una
actitud reguladora. Lo único que necesita hacer el Estado es actuar como
tal, actuar como autoridad”, indicó Vargas.
-Peña Nieto, ¿ya habló con ustedes?
“No,
sólo Pedro Joaquín Coldwell tuvo la amabilidad de acercarse”, dijo el
líder de ASPA. -¿Con el equipo de transición del área que ustedes
representan ya tuvieron acercamiento? –”Ya tuvimos acercamiento con Ruiz
Esparza que aparentemente va a ser el secretario de Comunicaciones y
Transportes”.
“Es
muy importante mencionar que el tema de la aviación se lleva en el
corazón; entonces, tiene que tratarse con gente sensible al tema de la
aviación, y el papá de Pedro Joaquín Coldwell, Don Nassim, fue el
creador de Aerocozumel y Aerocaribe; de hecho yo volé en Aerocaribe y
fueron mis primeros años como piloto y bueno, era una empresa muy
próspera”, comentó el vocero de ASPA.
“En
un principio fuimos criticados los trabajadores por no haber procedido
legalmente contra los responsables, efectivamente Gastón Azcárraga, la
misma autoridad; todos los sindicatos, ASPA de pilotos, ASA de
sobrecargos y personal de tierra, todos hemos impuesto demandas,
lamentablemente no han prosperado. Demandas muy bien sustentadas pero es
evidente que hay un ejercicio de contención para proteger a Gastón
Azcárraga”, prosiguió Vargas.
Un halo protector
“Exactamente.
Por eso no han salido favorables las denuncias que nosotros hemos
interpuesto y repito, todas con fundamento legal. Además, no hay que ser
muy conocedor para saber que efectivamente hubo un manejo doloso de la
empresa. Mexicana era una empresa que estaba operando con número negros.
“Era
una empresa que transportaba 12 millones de pasajeros y facturaba dos
mil millones de dólares al año. Claro que es un excelente negocio, claro
que han pasado muchos inversionistas interesados en la aerolínea.
Lamentablemente el gobierno federal a través de la SCT, a través de
Felipe Duarte, el subsecretario del Trabajo, los han ahuyentado, los han
amedrentado a los inversionistas; lo sabemos, nos lo han dicho: ‘es que
nos dijeron ni te metas, ni te metas ahí porque no los vamos a dejar
volar´. Entonces nos urge que termine el sexenio. Lo que necesitan los
inversionistas son certezas jurídicas porque no cualquiera va a invertir
350 millones de dólares para que a la mera hora no lo dejen volar, eso
es un riesgo”, concluyó el vocero.