Capitanes: Georgina Kessel
03 de Septiembre de 2012 • 07:16hs
• actualizado 07:53hs
CASA NUEVA ¿Cómo va usted a creer que van a seguir despachando en un cuchitril? No, hombre, ¡para eso están las arcas públicas!De
ahí salió para un "necesarísimo" edificio nuevo para la Dirección
General de Aeronáutica Civil (DGAC), a cargo de Sergio Romero Orozco.La
hueste de esta dependencia se cansó de atender a la gente en muchas
oficinas dispersas, entre ellas, unas en la colonia Nápoles, del DF.
Advierten que sufren de "hacinamiento".No faltaba más, tardaron en conseguirlo, pero a partir del 10 de septiembre tendrán nuevo domicilio oficial:Boulevard Adolfo López Mateos 1990, colonia Los Alpes Tlacopac, en el DF.La
SCT, a cargo de Dionisio Pérez-Jácome, debió obtener unos 574 millones
de pesos para adquirir ese nuevo edificio de oficinas en Periférico Sur.Ahí concentrará a mil 61 empleados de la citada DGAC, de acuerdo con su estudio de costo-beneficio, que data del 2010.El
inmueble cuenta con 12 pisos, más de 12 mil metros cuadrados de
construcción, lugar para 465 automóviles, sistemas de control de acceso
biométrico, circuito cerrado y siete elevadores inteligentes. Una
chulada.Los muchachos de la DGAC se lo merecen. Entre
otras cosas, por haber sacado desde hace tiempo la Política Aeronáutica
que tanta falta hacía a este País.¿Cómo? ¿Todavía no está
listo ese documento? ¡Pero si llevan años prometiéndolo! Bueno, a lo
mejor los nuevos rumbos los inspiran.
DISCRIMINACIÓN A PASAJEROS II Ya le contamos el viernes lo de una denuncia en contra de Volaris. Ahora viene el prometido complemento.La
empresa a cargo de Enrique Beltranena encara una acusación de
discriminación en contra de dos presuntos pasajeros de origen yaqui.Todo,
porque los dos pasajeros intentaron sin éxito viajar el jueves al DF,
procedentes de Hermosillo, a una reunión del movimiento Yo Soy 132.Las
dos personas, vestidas de pantalón de mezclilla, huaraches y sombrero,
indica la denuncia, arribaron la mañana del jueves a la terminal
sonorense y fueron al mostrador para pedir su pase de abordar.Aseguran
que una empleada de la aerolínea les indicó que no les daría el pase de
abordar porque no traían impreso su boleto. Según la queja, a ninguna
otra persona se le exigía el boleto impreso. Hablaron con más empleados y
finalmente su avión partió... sin ellos.La controversia
está en la hora de su llegada al aeropuerto. Los viajeros aseguran que
fueron discriminados, pues llegaron a las 06:30 horas, aún con tiempo de
abordar el vuelo que partiría a las 07:25.La versión de Volaris niega la discriminación. Que, simplemente, los pasajeros llegaron tarde."Ambos
Clientes se presentaron en los mostradores de la aerolínea en el
aeropuerto de Hermosillo después del cierre de vuelo (que se lleva a
cabo 30 minutos antes del despegue), programado para salir a las 7:25
(horas)".Finalmente, Volaris subió a ambos, sin costo adicional, al vuelo del viernes y llegaron ese día al DF.