24 años de Aeromar en Victoria
ENTRE NOS / Carlos Santamaría Ochoa
2012-07-15 20:18:00
Todos sabemos la importancia que tienen las comunicaciones en el desarrollo de cualquier nación, y México no es la excepción. En Tamaulipas hemos logrado mantener un buen estado de nuestras vías de comunicación gracias a la obra que se lleva a cabo por parte del gobierno estatal y las gestiones que éste ha logrado realizar con las instancias federales.
Finalmente, tenemos buenas vías en todos sentidos, considerando que poseemos el puerto fronterizo más importante del país –Nuevo Laredo- y el puente fronterizo más cercano entre el Distrito Federal y la capital de Estados Unidos, que es el que se ubica en Matamoros.
Sin embargo, faltaba detonar el aspecto aéreo y a lo largo de la historia hemos tenido muchas líneas y rutas. Hay que recordar que Mexicana de Aviación instituyó el primer vuelo comercial de México que cubría la ruta Tampico-Distrito Federal y que, desgraciadamente, ha desaparecido.
Sin embargo, la capital del país no ha sido ajena a estos cambios: vienen y van líneas aéreas y los victorenses hemos tenido que aguantar todos estos cambios, hasta que, hace veinticuatro años llegó Aeromar, una pequeña aerolínea que muchos pensamos que haría lo que otras: llegar y desaparecer. El tiempo nos ha tapado la boca a todos y nos ha dado la razón a los que consideramos que el esfuerzo era serio.
Este domingo Aeromar celebró con gran entusiasmo sus primeros 24 años cubriendo la ruta Victoria-México sin interrupción, lo que constituye no un récord de permanencia sino la consolidación de una empresa que se ha dedicado a servir a miles de tamaulipecos y mexicanos que han tenido que hacer el viaje entre la capital del país y la de nuestro estado.
Amy Lindenberg seguramente estará muy contento al saber que cuando apostó a esta ruta no se había equivocado, y más aún, porque hoy en día la misma cubre trayectos entre nuestras grandes ciudades: Tampico, Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros y obviamente, Victoria, la otrora ciudad amable.
Insistimos en que se dice rápido el que se cumplan 24 años, pero suponemos que esta cifra significa efectivamente la consolidación de la empresa en suelo tamaulipeco.
El servicio es eficiente y nos ha mostrado la calidad que tienen aerolíneas consideradas por muchos como “pequeñas”, calificativo que no opera en la realidad porque, aunque no se puede comparar en infraestructura, pensando en una Iberia o Aeroflot, por citar algunas, si entendemos que cuenta con flota aérea de primer nivel, primer mundo, con la confiabilidad que le otorga el manejo de unidades de dos tipos –una de ellas ATR 42- que cubren una serie de rutas en el país, pero que la nuestra se ha significado por ser de las más antiguas, y que ha pasado por épocas difíciles en materia económica, y sin embargo sigue vigente.
Las crisis que hemos vivido las sufren empresas de servicios, sobre todo las aerolíneas, y es la razón por la que otras líneas abortaron su compromiso. Aeromar nos ha aguantado con esos difíciles números durante muchos años, aunque también ha tenido buenos tiempos. Todo ha sido en aras de ofrecernos a nosotros la confiabilidad de poseer este tipo de servicio y ponerlo a las órdenes de quien lo requiera.
Hoy en día, las aerolíneas con naves de pequeña escala no se consideran de segundo o tercer nivel, sino que simplemente, cuentan con las unidades de acuerdo al tamaño de su demanda, razón por la que tienen un gran éxito.
Suponemos que debería haber un enorme pastel con 24 velas que recuerdan cada uno de esos años de esfuerzo y sacrificio, de alegrías y momentos de todo tipo, pero lo que sí estamos ciertos, es que el señor Lyndemberg estará con su equipo de colaboradores celebrando tan importante acontecimiento, lo que se traduce en 24 años al servicio de todos nosotros, los que habitamos en Victoria y los que tenemos algo que gestionar en la capital del país.
Enhorabuena para Aeromar, y esperamos cumplan 24 años más sirviendo a los tamaulipecos.
Comentarios: entrenos@prodigy.net.mx
ENTRE NOS / Carlos Santamaría Ochoa
2012-07-15 20:18:00
Todos sabemos la importancia que tienen las comunicaciones en el desarrollo de cualquier nación, y México no es la excepción. En Tamaulipas hemos logrado mantener un buen estado de nuestras vías de comunicación gracias a la obra que se lleva a cabo por parte del gobierno estatal y las gestiones que éste ha logrado realizar con las instancias federales.
Finalmente, tenemos buenas vías en todos sentidos, considerando que poseemos el puerto fronterizo más importante del país –Nuevo Laredo- y el puente fronterizo más cercano entre el Distrito Federal y la capital de Estados Unidos, que es el que se ubica en Matamoros.
Sin embargo, faltaba detonar el aspecto aéreo y a lo largo de la historia hemos tenido muchas líneas y rutas. Hay que recordar que Mexicana de Aviación instituyó el primer vuelo comercial de México que cubría la ruta Tampico-Distrito Federal y que, desgraciadamente, ha desaparecido.
Sin embargo, la capital del país no ha sido ajena a estos cambios: vienen y van líneas aéreas y los victorenses hemos tenido que aguantar todos estos cambios, hasta que, hace veinticuatro años llegó Aeromar, una pequeña aerolínea que muchos pensamos que haría lo que otras: llegar y desaparecer. El tiempo nos ha tapado la boca a todos y nos ha dado la razón a los que consideramos que el esfuerzo era serio.
Este domingo Aeromar celebró con gran entusiasmo sus primeros 24 años cubriendo la ruta Victoria-México sin interrupción, lo que constituye no un récord de permanencia sino la consolidación de una empresa que se ha dedicado a servir a miles de tamaulipecos y mexicanos que han tenido que hacer el viaje entre la capital del país y la de nuestro estado.
Amy Lindenberg seguramente estará muy contento al saber que cuando apostó a esta ruta no se había equivocado, y más aún, porque hoy en día la misma cubre trayectos entre nuestras grandes ciudades: Tampico, Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros y obviamente, Victoria, la otrora ciudad amable.
Insistimos en que se dice rápido el que se cumplan 24 años, pero suponemos que esta cifra significa efectivamente la consolidación de la empresa en suelo tamaulipeco.
El servicio es eficiente y nos ha mostrado la calidad que tienen aerolíneas consideradas por muchos como “pequeñas”, calificativo que no opera en la realidad porque, aunque no se puede comparar en infraestructura, pensando en una Iberia o Aeroflot, por citar algunas, si entendemos que cuenta con flota aérea de primer nivel, primer mundo, con la confiabilidad que le otorga el manejo de unidades de dos tipos –una de ellas ATR 42- que cubren una serie de rutas en el país, pero que la nuestra se ha significado por ser de las más antiguas, y que ha pasado por épocas difíciles en materia económica, y sin embargo sigue vigente.
Las crisis que hemos vivido las sufren empresas de servicios, sobre todo las aerolíneas, y es la razón por la que otras líneas abortaron su compromiso. Aeromar nos ha aguantado con esos difíciles números durante muchos años, aunque también ha tenido buenos tiempos. Todo ha sido en aras de ofrecernos a nosotros la confiabilidad de poseer este tipo de servicio y ponerlo a las órdenes de quien lo requiera.
Hoy en día, las aerolíneas con naves de pequeña escala no se consideran de segundo o tercer nivel, sino que simplemente, cuentan con las unidades de acuerdo al tamaño de su demanda, razón por la que tienen un gran éxito.
Suponemos que debería haber un enorme pastel con 24 velas que recuerdan cada uno de esos años de esfuerzo y sacrificio, de alegrías y momentos de todo tipo, pero lo que sí estamos ciertos, es que el señor Lyndemberg estará con su equipo de colaboradores celebrando tan importante acontecimiento, lo que se traduce en 24 años al servicio de todos nosotros, los que habitamos en Victoria y los que tenemos algo que gestionar en la capital del país.
Enhorabuena para Aeromar, y esperamos cumplan 24 años más sirviendo a los tamaulipecos.
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