28 agosto 2011

DEL CORREO DEL BLOG

Patricia Lazcano

Hace un año tuve la fortuna de realizar el ultimo vuelo de Mexicana, me acuerdo que escuchaba en las noticias que la aerolinea ya estaba en tierra pero a mi el Ceo me decia que mi vuelo operaba, hable tres veces para confirmarlo, Mr. Roa me llevo ese dia al AICM para asegurarnos que me iban a regresar efectivamente a mex por Air Canada, de todos modos yo iba con tarjeta en mano para no quedarme varada en Toronto.

Cuando llegue a la t1 era como pueblo fantasma, yo me sentía como bicho raro porque la gente de las tiendas salia a verme por el pasillo creyendo que a lo mejor se reanudaba la actividad de mx.

Cuando pase a nutrisa por mi sandwich las tres personas que atendian me preguntaban -ya? Ya regresan a volar? A donde va señorita?- Era todo muy bizarro, cuando entre a coordinadora las pocas personas que estaban igual. Voltearon a verme. 

El Cap. Fisher se acerco a mi y me dijo, hola mija buenas tardes vas al ultimo vuelo les estoy asegurando el hotel y el regreso de mañana, de otra forma no salen. Cuando estuvo todo listo me escoltaron al avion, yo era el unico sobrecargo hasta ese momento e iban a sacar 2 reservas. 

Caminar por el pasillo otra cosa extraña, habia muchos compañeros pilotos, de trafico, mecanicos con camara en mano, palomitas que me miraban con tristeza, a pesar que casi no llevaba cosas mi maleta pesaba mucho, mis ojos estaban hinchados de llorar en el carro, la sensacion era de perdida, como de funeral. 

Los otros dos compañeros llegaron al avion y ya sabran briefing y shalala lo usual, el vuelo lleno de gente que en lugar de reclamar se sentía agradecida de haber abordado. 

Cuando despegamos el capitan nos aviso que no nos levantaramos que le habian autorizado a dar una vuelta de despedida por todo el valle de mexico a baja altura. Fue el momento en que me quebré. 

 En 12 años de volar la única vez que lloré en un despegue fue cuando regresé a volar despues de haber tenido a mi hijo y me partía el alma dejarlo de 3 meses, pero esto era muy distinto, el capitan con la voz cortada daba un mensaje al pasaje de que el vuelo donde nos encontrabamos sería el último por algun tiempo, que 89 años de tradicion y servicio estaban a punto de terminar por malos manejos de unos cuantos y que se sintieran desde ese momento parte de la historia de una de las lineas aereas mas antiguas del mundo. Después de eso el pasaje empezo a aplaudir de forma increible, me volteaban a ver y yo no podía dejar de llorar. 

El servicio fue muy escueto, los pocos insumos que llevabamos apenas alcanzaron! Yo no podia dejar de llorar pero nadie me reclamó, al contrario solo escuché palabras de aliento de todos los pax. 

Después vino el momento de las fotos y me paré por la fila 5 y le pedí a todos saludaran con su mano, para mi fue un adios pero espero que para Mexicana sea solo un hasta pronto, aterrizamos y cap. nos dijo que solo teniamos que entregar al avión así que me robé una almohada de elite, los recuerdos que tengo los guardo en mi corazón como los mejores años de mi vida, y esos no estan en concurso mercantíl ni me los puede chingar un un hijo de puta. 

Llegó el momento final y así como cuando terminas cualquier relación me despedí de mi avión, fui a mi galley y le dije en voz alta "gracias por haberme llevado y traido sana miles de veces, gracias por darme experiencias y amigos entrañables, te voy a llevar siempre en mi corazón y como dijo el buen Ceratti "gracias totales". Eso fue el 28 de agosto del 2010.

MIS NOTAS AL CALCE:

POR ESTA OCASIÓN DERIVADO DE LA SENSIBLE NARRATIVA, EL FILTRO DE CENSURA EN LO QUE SE REFIERE A LAS GROSERÍAS, FUE DESACTIVADO, NO PODEMOS SOSLAYAR QUE ESAS PALABRAS EL DÍA DE HOY SON MÁS QUE CIERTAS.

SALUDOS POR PARTE DEL STAFF DE SOBRECARGO INFORMA