¡Concentración Aeroméxico Delta a la vista!
El Mar, 07 de Abril de 2015, por Alicia Salgado
Como le adelante Aeroméxico, que lleva Andrés Conesa, y Delta Air Lines de Richard Anderson entregaron la solicitud de autorización de un joint venture ante el Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT) la semana pasada.
Esta nueva etapa no significa una alianza patrimonial, como la que se dio en el 2011, sino la profundización de un acuerdo comercial para operar de manera coordinada rutas y frecuencias entre Estados Unidos y México que, dicho sea de paso, es el mercado internacional más grande que tiene nuestro país.
Aunque para muchos de esos que piensan que las concentraciones son dañinas, ésta sería una buena integración, porque jalaría a la baja el costo de la industria de aviación en México y elevaría el servicio. No dude en anticipar que le sigan otras como AA con Interjet, o Avianca-Volarias con Star Alliance.
Para ello ambas aerolíneas están poniendo a disposición de este acuerdo la operación de sus centros de conexión (hubs) a partir de los cuales se multiplican los pares de ciudades y con ello las opciones para los viajeros.
Le digo que esto es importante porque Aeroméxico ha venido fortaleciendo su modelo de negocios bajo la figura de hub and spoke, es decir una red de frecuencias que tiene un centro de conexión, a partir del cual enlaza diferentes destinos que por sí mismos no tendrían conectividad aérea, aprovechando la infraestructura existente.
Naturalmente una operación de este tipo requiere una cantidad de horarios y aterrizajes abundante para hacer esto posible. Hoy esta posición la tiene en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México de Alexandro Argudín y en Monterrey que administra Porfirio González de OMA. Por su parte Delta tiene su casa de operación en Atlanta, Los Ángeles, Nueva York, Salt Lake City y, recientemente, en Seattle. Valga mencionar que Los Ángeles y Nueva York desde hace años también registran saturación como el AICM.
La autorización, tanto del DOT, en Estados Unidos, como de la Comisión Federal de Competencia, de Alejandra Palacios se vuelve relevante a la luz de la liberalización del transporte aéreo entre ambos países, a partir del 1 de enero de 2016. Esta modificación aún tiene que ser ratificada por el Senado de la República a cargo deMiguel Barbosa, una vez que el equipo de Humberto Castillejos en la Consejería Jurídica de Presidencia haga el envío.
El alcance de este acuerdo no sólo trasciende la acostumbrada figura de códigos compartidos, también se extiende a la operación en aeropuertos, comercialización de boletos e incluso a la promoción conjunta. Este nuevo equilibrio, sin duda, pondrá en una nueva etapa a Aeroméxico y, por supuesto, al valor de su capitalización.