CON ESTILO / LOURDES MENDOZA
¡Badín, feliz!
Reforma energética de fondo, y ya. Profeco causa dolores de cabeza
Qué
les cuento, que la semana pasada, Gerardo Badín, el administrador de
Mexicana desde hace más de 30 meses, recibió 11 millones de dólares de
parte de la IATA por concepto de boletos no utilizados. Esta parecería
ser una buena noticia para los ex trabajadores que desde hace 30 meses
no cobran su sueldo. Sin embargo, no lo es, pues estos recursos no serán
para los trabajadores, sino para la camarilla de Badín y, si alcanza el
dinero, para su liquidación, ya que el administrador es el único que
cobra sus emolumentos antes que los ex trabajadores de la empresa. Pues
déjenme contarles que desde hace cerca de 3 años, una camarilla cercana a
200 personas, entre empleados directos y asesores, absorben con
singular alegría los pocos recursos que le dejó Grupo Posadas a
Mexicana, y por hacer nada. En este grupo hay directivos que cobran
hasta 180 mil pesos mensuales, mientras que, en contraste, los jubilados
no reciben ni 5 mil pesos al mes de sus propios fondos. Sin lugar a
dudas, la juez Edith Alarcón tiene la culpa de que el poco dinero que le
queda a la empresa se tire a la basura. ¿Qué intereses habrá en el
Poder Judicial para prolongar el proceso y mantener este derroche de
recursos en detrimento de los propios empleados?