Riesgoso, admirar los aviones desde un puente. El despegue y aterrizaje de aviones en las Terminales 1 y 2 del AICM se ha convertido en atracción para algunos ciudadanos, principalmente para aquellos que nunca han viajado en ellos por falta de recursos económicos u otra causal. Debido a que el aeropuerto capitalino no cuenta con un mirador, las personas acuden junto con sus hijos a la estación del metro Hangares o al puente peatonal que se ubica a un costado de la avenida Boulevard Puerto Aéreo, para gozar de los incontables aterrizajes y despegues de las aeronaves, sin importarles el riesgo ante la inseguridad ni el ensordecedor ruido de las turbinas o exponerse a los rayos del sol. (La Jornada, pág. 41)