Con la resolución de la Juez Edith Alarcón queda
claro que hay luz verde para Gerardo Badín para seguir saqueando
Mexicana y pisoteando los derechos de los trabajadores. Durante toda la
vida se nos amenazaba con la quiebra, así trabajábamos con la ley del
terrorismo laboral, pero hay algo peor que la quiebra en esta era de la
globalización y el neoliberalismo, y es un arma artera para desmantelar
una empresa sin quebrarla y deslindándose de liquidar a los empleados.
Se llama “Concurso mercantil”, al menos, la versión mexicana de este
proceso.
El Concurso mercantil en
este país puede durar años, y lejos de aplicarse para reestructurar una
empresa, se aplica para desmantelarla y dejar en la calle a sus
trabajadores. Eso es lo que está haciendo Badín con la anuencia de la
juez, y de la Secretaría del Trabajo, así es como han desmembrado varias
aerolíneas en los últimos 12 años.
Compañeros,
quizá llegó el momento de que nosotros mismos solicitemos la quiebra,
ya que de la forma que se están manejando las cosas, no va a quedar nada
para liquidarnos, y de hecho eso es lo que quieren lograr.