31 julio 2010

DEL CORREO DEL BLOG

Mexicana y sus peculiares business as usual
Una de las decisiones que tomó el grupo de accionistas de la empresa fue retirarla de la Bolsa Mexicana de Valores.
Carlos Velázquez


Entre los flancos que ha descuidado Mexicana, que dirige Manuel Borja Chico, hay que considerar el tema de la comunicación, pues ha dejado crecer la percepción de que la firma está a punto quebrar, algo que niegan en privado.

Después de la compra, una de las decisiones que tomó el grupo de accionistas, que encabeza Gastón Azcárraga fue retirar a la firma de la Bolsa Mexicana de Valores, pero además dejó de compartir su información financiera.

A partir de entonces, han sido frecuentes las noticias sobre su mala situación que no son desmentidas o confirmadas, y recientemente, acumula hechos verificables. El último fue la decisión de los dueños de confirmar los escenarios de quiebra con los dirigentes de los sindicatos de pilotos y sobrecargos.

Pero a los clientes de la compañía que platican con Adolfo Crespo, un personaje fanático del glamour y los salones VIP aunque también lleva los temas de comunicación, les dice que todo es mentira, que son “campañas” y que en la aerolínea siguen business as usual.

Además a Crespo le encanta jugar con tres bandas, donde tiene a Zimat como su agencia de relaciones públicas, contrata a otras más por proyectos y él lleva otros contactos de manera personal.

El resultado es que business as usual o no, ha permitido que la opinión pública vea a Mexicana en articulo mortis, lo que se traduce en proveedores menos dispuestos a darles crédito y, peor, en viajeros que ya no quieren boletos pagados con anticipación, para no perder su dinero como ocurrió después de la quiebra de Aviacsa o Aerocalifornia.