19 enero 2010

DE LA COLUMNA DE ROSARIO AVILÉS

Opinión de
Despegues y Aterrizajes(Rosario Avilés | )

Dando tumbos
Rosario Avilés | Opinión
Martes 19 de Enero, 2010 | Hora de modificación: 01:57

Dicen los que filtran información, que la SCT se decidió a hacer una propuesta de política de transporte aéreo. Este tipo de ejercicios, siempre a la sombra, siempre "controlados" para que los actores convocados no se salgan del huacal, terminan con documentos tipo el del 29 de octubre de 2001 que enlista las buenas y muy generales intenciones de los redactores y cuya fecha de caducidad siempre es el final del sexenio. Esa película —esa también— ya la vimos.

El problema de todo ello es que las administraciones públicas en México tienen como 30 años de atraso en casi todo. En lugar de convocar ampliamente a los sectores de la sociedad, sentarlos en mesas abiertas, con criterios explícitos y públicos y generar una política de Estado, de largo plazo, de auténtico consenso y visión de largo aliento, cuyas directrices se respetarán porque en ella intervengan legisladores y los auténticos protagonistas del negocio, prefieren la receta antigua.

La receta antigua, ya se sabe, sirve para llenar el expediente, pero no funciona. A lo mucho, el primer día del siguiente sexenio o el primer día del siguiente secretario, nos dedicamos a inventar el hilo negro. Por eso Aeroméxico y Mexicana han pasado de Herodes a Pilatos, el pueblo mexicano ha perdido miles de millones de dólares en ellas y todavía no llega el día en que sean rentables. Ni lo serán, como dijo Don Teofilito.

No lo serán, porque en este país tal parece que lo que llega a funcionar le molesta profundamente a los encargados de hacer que funcione. Por eso la saña contra Aviacsa. Por eso nuestras principales troncales se venden por separado y luego se vuelven a unificar. Por eso se alientan nuevas aerolíneas y luego las patean para que caigan. Por eso se gastan millones de dólares en parches aeroportuarios que pagan los usuarios a través de tarifas prohibitivas. Por eso pululan las "ideas geniales" para abrir los cielos y de una vez terminar con lo poquito que nos queda de aviación.

Y mientras tanto a justificar el presupuesto. Consultores van, consultores vienen. Se reciclan las propuestas, se refrescan los mismos documentos con una actualizadita de datos pero con las mismas ideas refriteadas.

Pero el mundo sigue avanzando: Delta y Northwest ya son una empresa y Japan Airlines está a punto de ser adquirida por ella. Las empresas europeas ya se fortalecieron y están en posibilidades de hacer acuerdos conjuntos con Estados Unidos. Varig y Gol ya están juntas. Lan Chile se multiplica en todos los países vecinos. Copa gana dinero y crece. TACA y Avianca se fusionan. Y nosotros seguimos hablando de aerolíneas bandera. ¡Por Dios!, ¿no habrá alguien que nos despierte antes de que sea demasiado tarde?

Uno de los problemas de nuestro sistema político es que los secretarios de Estado, por el simple hecho de serlo, creen que saben todo. Nadie le ha explicado todavía al secretario de Turismo y a sus homólogos de los estados que abrir los cielos no hace que automáticamente bajen las tarifas, sino que profundizaría la crisis del transporte aéreo mexicano. Y es que lo que se necesita no es tener más competencia en las mismas rutas (las rentables), sino habilitar nuevas y para eso hay que pensar, conciliar, arriesgar, invertir... Trabajar, pues.

Y hay que darle certidumbre a las inversiones manteniendo durante décadas una sola línea de acción. Si cada vez que cambian los funcionarios hay nuevas reglas nadie arriesgará su dinero de forma real, sino que pretenderá obtener el máximo beneficio antes de que cambie el viento.

Por eso no hay empresarios de huesos viejos en la aviación. Los únicos que sí se quedan son los trabajadores. Habrá algunos que tengan más de cuarenta años en el sector y han visto mil veces los mismos problemas: vieron a Taesa, a AeroCalifornia, a Aerofiesta, a Allegro, a SARO, a Azteca, a Volaris, a Interjet…Y han visto —y sufrido en carne propia— las administraciones que van y vienen en Aeroméxico y Mexicana, los intentos de fusión, las separaciones dolorosas, los recortes y hasta han cargado con la culpa de la situación.

Si de verdad quieren hacer una política seria, los funcionarios de la SCT deberán cambiar la receta. Si siguen haciendo lo mismo de siempre las cosas seguirán siendo como siempre. Y luego se quejan de que Brasil ya nos rebasó…y cuidado que ahí vienen los demás países.

Lo oí en 123.45: Por ahí se dice que en el lugar del accidente del helicóptero Augusta en el que viajaba la familia Saba se hallaba uno más de los cinco cuerpos correspondientes a la lista de pasajeros y tripulantes. ¿Será?

raviles_2@prodigy.net.mx