Aeroméxico y ASSA pactan alza de 4.5%
Carolina Gómez Mena
La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) y Aeroméxico lograron acuerdo sobre los dos emplazamientos a huelga previstos para la media noche de ayer, al aceptar un aumento salarial de 4.5 por ciento, la solución a dos violaciones al contrato colectivo de trabajo y la revisión de un número similar de cuestiones relativas a los derechos laborales.
Las partes convinieron en prorrogar dos horas el emplazamiento a huelga por revisión contractual y violaciones al contrato, por lo cual al cumplirse el plazo para el estallamiento no se colocaron las banderas rojinegras en las instalaciones de la aerolínea.
Minutos antes de que venciera el plazo se acordó la prórroga con la finalidad de redactar el convenio de la revisión contractual y culminar con el conflicto. Al cierre de esta edición persistía la duda acerca de si estallaría la huelga por otras violaciones al contrato.
Al respecto, las partes manifestaron su confianza en resolver el conflicto.
Descontento y aceptación
Anoche, en la sede sindical ubicada al sur de la capital, la asamblea de trabajadores aceptó la propuesta empresarial. Inicialmente ésta generó descontento, porque no cumplía con las expectativas de los sindicalizados. Por tal razón, se sugirió a los sindicalizados la posibilidad de solicitar una prórroga de dos horas para el inicio de la huelga.
Desde la mañana de ayer Aeroméxico elevó su oferta salarial en 0.25 por ciento al pasar de 4.25 a 4.5 por ciento, y al anochecer la asamblea accedió a reducir su demanda, que hasta ese momento era de 5 por ciento, lo cual hacía prever que se abría el camino hacia un pronto acuerdo entre las partes. No obstante, eso no sucedió.
Al cierre de esta edición los trabajadores flexibilizaron su postura al aceptar que se eliminaran de sus prestaciones las cortesías de alimentos durante los vuelos, la ayuda para estacionamiento y el pago de tintorería. Además, renunciaron al pago por concepto de recuperación de itinerario y vuelo (puntualidad), así como a la dotación de uniformes, maletas y zapatos cada año.
La primera demanda del gremio consistió en un incremento salarial de 7 por ciento, y revisar 29 puntos en prestaciones. Posteriormente redujo su exigencia a 5 por ciento y disminuyó su petición de revisar sólo 11 de los 29 puntos. La empresa ofrecía 4 por ciento de incremento salarial, después 4.25 y finalmente 4.5.
Carolina Gómez Mena
La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) y Aeroméxico lograron acuerdo sobre los dos emplazamientos a huelga previstos para la media noche de ayer, al aceptar un aumento salarial de 4.5 por ciento, la solución a dos violaciones al contrato colectivo de trabajo y la revisión de un número similar de cuestiones relativas a los derechos laborales.
Las partes convinieron en prorrogar dos horas el emplazamiento a huelga por revisión contractual y violaciones al contrato, por lo cual al cumplirse el plazo para el estallamiento no se colocaron las banderas rojinegras en las instalaciones de la aerolínea.
Minutos antes de que venciera el plazo se acordó la prórroga con la finalidad de redactar el convenio de la revisión contractual y culminar con el conflicto. Al cierre de esta edición persistía la duda acerca de si estallaría la huelga por otras violaciones al contrato.
Al respecto, las partes manifestaron su confianza en resolver el conflicto.
Descontento y aceptación
Anoche, en la sede sindical ubicada al sur de la capital, la asamblea de trabajadores aceptó la propuesta empresarial. Inicialmente ésta generó descontento, porque no cumplía con las expectativas de los sindicalizados. Por tal razón, se sugirió a los sindicalizados la posibilidad de solicitar una prórroga de dos horas para el inicio de la huelga.
Desde la mañana de ayer Aeroméxico elevó su oferta salarial en 0.25 por ciento al pasar de 4.25 a 4.5 por ciento, y al anochecer la asamblea accedió a reducir su demanda, que hasta ese momento era de 5 por ciento, lo cual hacía prever que se abría el camino hacia un pronto acuerdo entre las partes. No obstante, eso no sucedió.
Al cierre de esta edición los trabajadores flexibilizaron su postura al aceptar que se eliminaran de sus prestaciones las cortesías de alimentos durante los vuelos, la ayuda para estacionamiento y el pago de tintorería. Además, renunciaron al pago por concepto de recuperación de itinerario y vuelo (puntualidad), así como a la dotación de uniformes, maletas y zapatos cada año.
La primera demanda del gremio consistió en un incremento salarial de 7 por ciento, y revisar 29 puntos en prestaciones. Posteriormente redujo su exigencia a 5 por ciento y disminuyó su petición de revisar sólo 11 de los 29 puntos. La empresa ofrecía 4 por ciento de incremento salarial, después 4.25 y finalmente 4.5.
Conjuran huelga en Aeroméxico
El sindicato aceptó una prórroga por 2 horas para la redacción del documento en el que se establecerán los acuerdos tomados entre ambas partes
Lilián Cruz
Ciudad de México (1 de junio de 2008).- La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) decidió cancelar la huelga que tenía prevista para el primer minutos de este domingo, luego de que aceptó un incremento salarial de 4.5 por ciento y algunas modificaciones de su contrato colectivo de trabajo.
Minutos antes de las 00:00 horas, el sindicato aceptó una prórroga por dos horas para la redacción del documento en el que se establecerán los acuerdos tomados por la empresa y la dirigencia sindical que encabeza Lizette Clavel.
De las peticiones que realizó el sindicato a la empresa destaca la conservación del pago de viáticos y la no reducción de tripulación en todos los vuelos.
No obstante, los sobrecargos cedieron en algunas peticiones que solicitó la empresa, tales como establecer un tope máximo de vacaciones de hasta 35 días y renunciar al pago que se les otorgaba por el concepto de recuperación de itinerario y vuelo.
Asimismo, los sobrecargos sindicalizados aprobaron que Aeroméxico deje de pagar cortesías en alimentos, gastos de tintorería, ayuda económica para estacionamiento, así como la entrega de zapatos y uniformes.
El estallamiento de una huelga en Aeroméxico también consideraba violaciones al contrato colectivo de trabajo, y en este sentido, los sobrecargos lograron obtener dos de las peticiones que solicitaron a la empresa, como un pago retroactivo del "dead head" (cuando un trabajador vuela sin prestar servicio a otro aeropuerto para volar en un nuevo vuelo).
El resto seguirá negociándose sin necesidad de estallar la huelga.
Mientras los sobrecargos sindicalizados establecían los acuerdos alcanzados, algunos de sus compañeros alistaron en el aeropuerto capitalino las banderas rojinegras, que fueron guardadas por las trabajadoras que estuvieron alerta en caso de un estallamiento.
En la terminal aérea, antes de las 00:00 horas, comenzaron a acercarse a los mostradores de Aeroméxico decenas de personal de seguridad privada, así como familiares de pasajeros que estaban atentos a cualquier probabilidad de una huelga.
Debido a que no hubo el estallamiento, la gente se quedó esperando por varios minutos algún tipo de información, ya sea por trabajadores o por la propia aerolínea.
Este domingo, operarán de manera formal entre 250 y 270 vuelos de la aerolínea.
El sindicato aceptó una prórroga por 2 horas para la redacción del documento en el que se establecerán los acuerdos tomados entre ambas partes
Lilián Cruz
Ciudad de México (1 de junio de 2008).- La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) decidió cancelar la huelga que tenía prevista para el primer minutos de este domingo, luego de que aceptó un incremento salarial de 4.5 por ciento y algunas modificaciones de su contrato colectivo de trabajo.
Minutos antes de las 00:00 horas, el sindicato aceptó una prórroga por dos horas para la redacción del documento en el que se establecerán los acuerdos tomados por la empresa y la dirigencia sindical que encabeza Lizette Clavel.
De las peticiones que realizó el sindicato a la empresa destaca la conservación del pago de viáticos y la no reducción de tripulación en todos los vuelos.
No obstante, los sobrecargos cedieron en algunas peticiones que solicitó la empresa, tales como establecer un tope máximo de vacaciones de hasta 35 días y renunciar al pago que se les otorgaba por el concepto de recuperación de itinerario y vuelo.
Asimismo, los sobrecargos sindicalizados aprobaron que Aeroméxico deje de pagar cortesías en alimentos, gastos de tintorería, ayuda económica para estacionamiento, así como la entrega de zapatos y uniformes.
El estallamiento de una huelga en Aeroméxico también consideraba violaciones al contrato colectivo de trabajo, y en este sentido, los sobrecargos lograron obtener dos de las peticiones que solicitaron a la empresa, como un pago retroactivo del "dead head" (cuando un trabajador vuela sin prestar servicio a otro aeropuerto para volar en un nuevo vuelo).
El resto seguirá negociándose sin necesidad de estallar la huelga.
Mientras los sobrecargos sindicalizados establecían los acuerdos alcanzados, algunos de sus compañeros alistaron en el aeropuerto capitalino las banderas rojinegras, que fueron guardadas por las trabajadoras que estuvieron alerta en caso de un estallamiento.
En la terminal aérea, antes de las 00:00 horas, comenzaron a acercarse a los mostradores de Aeroméxico decenas de personal de seguridad privada, así como familiares de pasajeros que estaban atentos a cualquier probabilidad de una huelga.
Debido a que no hubo el estallamiento, la gente se quedó esperando por varios minutos algún tipo de información, ya sea por trabajadores o por la propia aerolínea.
Este domingo, operarán de manera formal entre 250 y 270 vuelos de la aerolínea.
