28 noviembre 2021

Rumbo a una nueva esperanza, presupuesto ASSA

 

Rumbo a una nueva esperanza, presupuesto ASSA

 

En fechas recientes hemos sido testigos de grandes cambios gestados desde la base de los sobrecargos agremiados al Sindicato de Sobrecargos, ASSA de México. Por eso es vital tener presente el trabajo arduo que los compañeros han estado llevando a cabo, para vislumbrar una luz de esperanza dentro de la asociación.

 


Hoy, ya de plano es “fantasiosa” la narrativa que Ricardo Del Valle pretende hacerles creer a los sobrecargos, con el tema de las “auditorias”. Con recursos burdos intenta hacerles creer que las cosas siempre han sido transparentes, que siempre han hecho una clara y puntual rendición de cuentas, pero Ustedes lo saben tan bien como yo, la verdad es todo lo contrario.

 

Este espacio es fiel testigo de los ríos de tinta que han corrido sobre todo el desaseo y opacidad con la que Del Valle se ha manejado en la administración del sindicato. Hemos dejado registro de que la rendición de cuentas ha sido pura simulación desde hace ya varios años. Por eso, pretendo con estas líneas esbozar todos los puntos que bien podrían observar en su próxima asamblea de presupuesto, que se celebrará el próximo 14 de diciembre.

 

Y no podemos dilatarnos, porque Ricardo y la representación sindical han buscado, de nueva cuenta, realizar la asamblea fuera de la sede sindical y con la ayuda del hijo del Secretario del STUNAM, Agustín Rodríguez, quien es parte de la representación de nuestro sindicato. Es más que evidente que les “presta” su local, pero el ubicado en la zona de Iztapalapa.

 

Seamos bien sinceros: la zona dónde se ubica no es la “más segura” y menos para un gremio conformado en su mayoría por mujeres. El mismo STUNAM tiene otro edificio sindical mucho mejor ubicado en la misma colonia Del Valle (Av. Universidad 779, Col del Valle Sur, Benito Juárez) donde generalmente se llevan a cabo, cuando le tocan, los desayunos del pleno de la UNT.

 

Este local sindical tiene en su cercanía varios centros comerciales con amplios estacionamientos; la zona es muy cercana a la sede sindical de los sobrecargos, que pueden llegar cómodamente incluso en metro en caso de ser necesario. Es además bastante amplio para albergar una asamblea de sobrecargos con todas las medidas necesarias establecidas por el tema de la pandemia de Covid 19.

 

Yo pregunto ¿por qué mandar a los compañeros a la colonia Granjas Esmeralda, en Iztapalapa? Yo opino, es una manera de desmotivar la presencia natural de los sobrecargos que estén interesados en el tema del presupuesto, y que por “temor” de la zona, no acudan; así aumenta la posibilidad de que Del Valle y sus compinches puedan celebrar la asamblea como están acostumbrados, con su gente votando a favor, sin necesidad de exponer realmente el presupuesto de ingresos y egresos para los próximos seis meses (de enero a junio del 2022).

 

Ahora, ¿qué es lo que tendrían que exponer los representantes sindicales? Me queda claro que en caso de que la asistencia a la asamblea de presupuesto sea nutrida, la estrategia por parte de la representación será “aventar” un montón de cifras, buscando que el Lic. Mungarro junto con la Comisión de Hacienda, hagan toda clase de suertes circenses para evitar el escrutinio en el manejo patrimonial del sindicato.

 

Como agremiados podemos exigir que aquellos que exponga la representación sindical, quede suficientemente claro, que todo lo pongan por escrito y que muestren facturas, nombres de los proveedores junto con su RFC correspondiente. Y esa exigencia tiene que ser firme porque no es una concesión, no es un favor… es un derecho. El manejo presupuestal no es cosa menor, y debe quedar bien definido cuánto, cuándo y cómo se distribuirá el dinero en los próximos seis meses de gestión sindical.

 

Todas las Secretarías sindicales deben presentar su solicitud de presupuesto, por más absurdo que parezca, lo deben presentar a la Comisión de Hacienda por escrito luego ser mostradas a ustedes, para que sepan las necesidades de cada cartera. No olvidemos que va a entrar una nueva representación sindical y deben ellos de saber cuánto les van a asignar de presupuesto para trabajar durante seis meses, aunque en los hechos, la nueva representación sólo usará cinco meses; no olvidemos que toman posesión de sus cargos el 1° de febrero del próximo año.

 

Por insignificante que sea, cada cartera debe hacer un desglose de los gastos que tiene programados. A modo de acordeón, y para que sepan qué gastos son los que normalmente tiene cada cartera procederé a enumerar algunos de los rubros más destacables, esperando que esta información les sea de utilidad para la próxima asamblea.

 

La Secretaría General tiene un rubro llamado “Gastos de representación” y es dinero que se utiliza para pagar sus comidas con las empresas. Se hace un cálculo y con base en ello se saca una cifra. En caso de no ejercer este rubro, el dinero se debe reintegrar; en ocasiones sólo se ocupa una parte. Se le paga al Secretario General un equipo, con servicio y toda la cosa, de telefonía celular. Fuera de esos dos gastos, la Secretaría General no tiene más presupuesto; es una mentira burda lo de la “Comisión Política” que se adjudica a su cargo.

 

La Secretaría del Trabajo tiene, al igual que el Secretario General, “Gastos de representación”, y anteriormente cuando existía la empresa Nextel tenía un radio. Bien puede ser que lo cambie por un equipo de telefonía celular, cuyos gastos corran por ASSA de México.

 

Después tenemos a la Secretaría de Conflictos. Aunque en nuestro país ya existe la digitalización de procesos, en el área laboral todavía se requiere hacer expedientes en papel, por lo que uno de los más grandes gastos que tiene esta Secretaría son las copias de los expedientes, que luego se tienen que sacar más copias, (aunque lleves las tuyas, así se las gasta el gobierno).

 

Continuamos con la Secretaria del Interior, que es la que administra la sede sindical y se encarga del personal administrativo. Su presupuesto debe contemplar todos los gastos, comenzando por los sueldos del personal. Desde hace muchos años se contrata -yo nunca estuve de acuerdo, he de decirlo­- a una empresa de outsourcing que brinda el servicio de limpieza de la sede sindical; el presupuesto de esta secretaría debe incluir los gastos de papelería, cafetería, gasolina e insumos para las camionetas en comodato, pagos de luz, agua, servicio de telefonía local, internet, multas y recargos, pago de “radios” del personal administrativo, el mantenimiento y equipo necesario para las copiadoras e impresoras de todo el sindicato, que siendo francos, a estas alturas, el gasto es mucho menor, pues ASSA manda todas las circulares en formato digital, incluso las firmas son digitalizadas, así que no debería de ser un gasto excesivo. También maneja el presupuesto de mobiliario y equipo de oficina, por ejemplo si fuera necesario el cambio de una silla o un escritorio, pero es un gasto que podría no ejercerse como tal. Luego tenemos el servicio de vigilancia, es decir el pago de los policías de ASSA, que pertenecen al grupo de policías bancarios, pero hay que pagarles al mes a sus jefes y ellos se encargan de darles su salario a “los polis”. También se pagan el mantenimiento, la vigilancia de la Guardería (que desde el 2007 por acuerdo de asamblea se iba a vender, pero ahí sigue en pie); y el mantenimiento en el equipo de cómputo. Esto es sólo a grandes rasgos.

 

Asuntos Técnicos tiene a su cargo varias Comisiones, como la de Seguridad e higiene y por lo tanto debería tener el presupuesto para el pago de los comisionados, a quienes se les paga los días que vayan a sesionar al sindicato. ¿por qué dejaron de hacerlo?

 

En lo que toca a la Secretaría de Relaciones, se tenía contemplado el gasto en arreglos florales, en caso de deceso de un compañero o de un reconocimiento; también tendría que contemplarse en esta secretaría los gastos que se hacen con los pagos por pertenecer a la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF) y su cuota anual. También hay una cuota por pertenecer a la Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios (FESEBS). No tengo idea en qué calidad se encuentre la Federación de Sindicatos del Sector Aéreo (FEDSSA), cuya presidencia, según sus estatutos se rolaba cada año a un sindicato de los que la integran.

 

Con respecto a la Secretaría de Actas, el único gasto que tiene esta cartera son las copias certificadas de las Tomas de Notas, nada más.

 

Nos vamos ahora con la Secretaria Tesorera; ella es la encargada de pagarle al despacho de contadores, de los diferentes abogados, el traslado de valores, las comisiones bancarias, y los emolumentos de los representantes sindicales. Aquí tendrían que desglosar -en esta ocasión y en las subsecuentes- cuánto es el emolumento y a cuántos representantes sindicales se les paga, pues sí estás volando no eres acreedor a los mismos. Recordemos la naturaleza de tal prestación, que es subsanar la pérdida de viáticos que se tiene al estar bajado de vuelo con permiso sindical. Como pueden observar en las circulares de “ingresos y egresos” de la actual representación hay gastos “dobles” en la cartera del Interior y en con la Tesorera. Y por supuesto, en este rubro deberá quedar muy claro cuál es el porcentaje que “se están descontando” los actuales representantes sindicales. En asamblea dijeron que iba a ser un 30%. Es el momento perfecto para preguntar ¿a dónde se esta yendo ese dinero que no se eroga?

 

Luego pasamos a Cultura y Deportes, quien debe tener presupuesto para eventos como el día del niño, el día de la madre, el primero de mayo; eventos deportivos, o sea pagarle al árbitro del fucho, porque no hay mucho incentivo en el tema del ejercicio y practicar deportes. En cuanto a la parte cultural, firma muchos acuerdos para tener descuentos a obras de teatro, exposiciones, centros culturales y de esparcimiento.

 

Con la Secretaría de Previsión Social, es una cartera que maneja arreglos florales, como la Secretaría de Relaciones pero en caso de que los compañeros se enfermen y se encuentren hospitalizados, más allá no debería de manejar más presupuesto.

 

Y concluimos con la cartera de Prensa. Ya no se imprime la “revista”, ahora es “digital”, pero debe de contar un presupuesto para la realización de este. Dentro de su presupuesto viene el pago de mantenimiento de la página web, el manejo de redes sociales, debiendo realizar la labor de un Community Manager, pudiendo tener una partida presupuestal para “atención a periodistas”, esto es, se les paga a los reporteros para que cubran un comunicado del sindicato. Así se maneja la prensa. Pero si tienes buenas relaciones con ellos, puede que saquen la información sin tener que darles una “gratificación”.

 

Las Comisiones en sí no tienen un presupuesto designado.

 

Y muy a grandes rasgos es lo que podría venir en la asamblea de presupuesto para el próximo año. Espero que estas líneas les sean de utilidad. Como ustedes pueden ver, no es un tema menor ni mucho menos intrascendente. No permitan, por favor, que la práctica rastrera de Ricardo Del Valle de no realizar estas asambleas, y sustituirla con una simple declaración de “vamos a usar el presupuesto del semestre anterior, pero pueden estar seguros de que siempre lo haremos pensando en el bienestar de todos ustedes, compañeros… felices vuelos”, y ya. Es la columna vertebral para el trabajo del sindicato. Es el momento de definir proyectos, explorar panoramas y tomar decisiones. Declarar que se va a usar el presupuesto anterior es un reconocimiento total de que el sindicato es un barco sin rumbo.

 

 

Ximena Garmendia
28 de noviembre 2021

20 noviembre 2021

¿A quiénes se deben los representantes sindicales?

 

¿A quiénes se deben los representantes sindicales?

 

Con esta pregunta abrimos la columna del día de hoy. Justo después de la derrota de los candidatos oficiales del Secretario General, Ricardo Del Valle Solares, en redes sociales se vino una andanada de comentarios con una narrativa que a la vez que “engañosa”, fue también muy perversa.

 




En estos años recientes el sindicato de sobrecargos perdió el rumbo democrático, se instauró una dictadura de facto en torno a la figura del Secretario General, al que colocaron por encima del resto de las carteras que integran el Comité Ejecutivo, las distintas Comisiones y hasta de las Delegaciones.

Con a llegada del funesto personaje, en agosto de 2011, en ASSA de México comenzó la “verticalidad” y se perdió ´la “horizontalidad” enmarcada en nuestro Estatuto. Por eso el pago de emolumentos no es diferenciado… o no lo era hasta antes de esa fecha… pues a todos los representantes se les pagaban la misma cantidad de dinero en los emolumentos. Y hay que decirlo, ese dato no lo tenemos porque no aparece en las circulares de “Ingresos y Egresos” que emite el sindicato. Desconocemos si se le paga más a Del Valle por ser Secretario General que a Víctor Núñez por ser presidente de la Delegación de la Compañía Mexicana de Aviación (CMA pa’ los cuates).

 


Dicho lo anterior, entremos de lleno a la materia que nos interesa. Como dije al inicio del texto, una vez que en las urnas se concretó la aplastante victoria de los candidatos agrupados bajo el mote “Ubuntu”, no se hicieron esperar algunos comentarios en los perfiles públicos, tanto del Sindicato como de Ricardo Del Valle, así como también en su perfil personal. Y en todos ellos comenzó a gestarse una narrativa engañosa a la vez de perversa, pues “dan la bienvenida”, al grupo de candidatos electos para que se “integren, sumen, añadan” -y todos los sinónimos que se les puedan ocurrir- al Secretario General.

Y ese es justo el problema, ¿se deben sumar a un proyecto que gira en torno a la veneración del Secretario General?, ¿o deben de trabajar por y para los sobrecargos agremiados al sindicato?, ¿qué respuesta es la correcta?, ¿la primera o la segunda?

Es muy fácil compañeros, la segunda opción es la respuesta correcta, los representantes sindicales cumplen la función de ser interlocutores de ustedes ante las empresas con la que se tiene contratación colectiva. No son sus jefes, ni sus superiores.

¿Por qué es perverso por parte de los sobrecargos afines a Ricardo y su gente usar ese tipo de narrativas?, pues porque pretenden obligar a los candidatos electos a que trabajen para un proyecto que claramente ha sido vencido en las urnas: el proyecto de “continuidad” contra “el cambio”. Y es importante tener claro que lo que se busca con la llegada los compañeros de Ubuntu es un cambio de rumbo dentro de la asociación sindical. Dejar atrás la opacidad en el manejo financiero de sindicato, que se transparente a dónde, cómo y cuándo se gasta el dinero de los sobrecargos.

 


Ricardo Del Valle y su gente siguen sin la capacidad de realizar un análisis de qué fue lo que los llevó a perder las pasadas elecciones, por lo tanto, continúan con su mismo discurso como si los sobrecargos hubieran sufrido una gran merma en su capital humano.

Por eso es necesario dejar muy en claro cuál debe de ser el papel de los próximos representantes sindicales: estos deberán trabajar para los sobrecargos y no para los dos tercios de la representación que sigue ahí incrustada. Sin duda tendrán que negociar con ellos, pero desde un plano de igualdad, porque reitero, la organización sindical es horizontal. Deberán establecer un diálogo, sin perder de vista que la que mandan es, y siempre será, la Asamblea, el máximo órgano del sindicato conformado por los agremiados.

No permitan que los confundan, que les creen la duda de que los candidatos electos y próximos representantes sindicales deben de trabajar “hombro con hombro” con el Secretario General, al que han puesto por encima del resto de la representación sindical, y no olviden que Ricardo es un sobrecargo igual que lo somos todos nosotros, no es nadie especial.

 

Ximena Garmendia
21 de noviembre 2021

 

 

 

 

 

 

 

 

14 noviembre 2021

Un castillo de naipes

 

Un castillo de naipes

 

Hemos escuchado muchas veces frase ¨ERA UN CASTILLO DE NAIPES¨, y es que desde que la utilizó por vez primera el célebre poeta y escritor inglés John Milton, en el siglo XVII, su significado no ha cambiado mucho. Un castillo de naipes es una estructura frágil, que aparenta tener la estabilidad necesaria para mantener bella y de pie, pero un leve soplo de aire, un golpe o movimiento ingenuo en las tarjetas, o incluso el más ligero cambio en la mesa sobre la que descanse la derriban irremediablemente. Hoy en día, cualquier cosa que tenga una aparente estabilidad exterior, pero la probabilidad de un colapso total o casi total puede considerarse que es “un castillo de naipes”

 


Esto es justamente lo que los agremiados a la ASSA de México hemos presenciado, la caída de una dictadura tan frágil como un castillo de naipes, y ha sido posible gracias a los sobrecargos. Ya en otras columnas he hablado de las cabezas más visibles que generaron este cambio, pero hoy quiero aprovechar para agradecerles a ustedes “la gran masa silenciosa”.

 


Les llamo así, sin intención alguna de faltarles el respeto, todo lo contrario; quiero corresponderles pues sin su importante, aunque silencioso trabajo, el cambio no hubiera sido posible. Son ustedes precisamente a quienes hay que reconocer, quienes desde su anonimato, han gestado e impulsado este inspirador soplido que hace que el castillo que construyó Ricardo se empiece a venir abajo.

 

Ustedes, compañeros sobrecargos, en sus castigados vuelos, en las pocas pernoctas que quedan, desde los galleys y las reservas, observaron minuciosamente el actuar de la representación sindical. Sin la necesidad de llegar a una confrontación directa con sus verdugos, se liberaron de las cadenas de la censura, el escudriñamiento, el pago de favores de la representación sindical; ¿requirieron de una revolución armada y violenta?, ¡no!, decidieron usar el simple pero poderoso “voto libre, directo, personal y secreto”.

 

Sabemos que falta mucho camino por andar, que la recuperación del sindicato de las manos de Ricardo Del Valle no es una tarea fácil y que no está terminada; estamos conscientes de que habrá escollos en el sendero todavía vigentes, que  convirtieron en una “dictadura perfecta” aquel sindicato democrático que gozamos durante muchos años, y al que anhelamos regresar.

 

¿Construyó Ricardo ese castillo, sin percatarse que era de naipes? Si parecía tan sólido su liderazgo ¿en qué momento se torció la historia? Sin duda alguna el gran responsable del colapso es el propio Secretario General, de quien sabemos de sus limitadas facultades intelectuales. Él es el primero en reconocerlo, y por eso desde siempre ha buscado gente que se encuentre en su mismo nivel cognitivo, para evitar que alguien de su “equipo” lo pueda opacar.

 


Detrás del membrete de Secretario General, está Ricardo, el personaje gris, sin carisma ni personalidad, sin talento para hablar y comunicarse. El mismo que buscó paliar sus deficiencias con premios y castigos y que puso a su círculo cercano a colocar a los sobrecargos en “problemas” (reales o ficticios) para posteriormente, salir él como el gran “héroe” que los rescata del abismo, y justo ahí obligar al sobrecargo vulnerable a firmar con sangre el pacto de fidelidad y obediencia absoluta.

 

Déjenme contarles, a manera de anécdota, cómo fue que San Richie buscó infructuosamente que la de la voz “cayera” en su trampa. Corría el mes de agosto del año 2011, justo cuando ganó las elecciones para Secretario General. Es conocido por muchos de ustedes que en ese entonces resguardé como perro embravecido el expediente de las elecciones, temerosa que me fueran a tirar el proceso (la burra no era arisca, ya había pasado por una negativa a la Toma de Nota), así que me reuní varias veces en el despacho de Arturo Alcalde, para revisar las actas y que no hubiera un solo error que pudiera echar abajo el proceso. En esas reuniones, también acudía Ricardo, con Doris, pues siempre iban juntos.

 

Una vez entregado el expediente a la autoridad, debo ser franca, me sorprendió el tiempo récord en que nos dieron la Toma de Nota. A menos de una semana de terminadas las elecciones, y tomando en cuenta que el Secretario del Trabajo y Previsión Social era nada más que Javier Lozano, el mismo personaje que dos años antes (2009) había metido al sindicato en camisa de once varas al negarnos una Toma de Nota.

 

El tiempo y la distancia dan claridad a los hechos. A toro pasado no me extraña en lo absoluto que esa Toma de Nota no fuera entregada ni al entonces Secretario del Interior, ni a una servidora, como Titular de la Secretaría de Actas. Javier Lozano se la entregó directamente a Ricardo en las oficinas de la Secretaría del Trabajo Federal, acompañado de Doris y de Arturo Alcalde Justiniani.

 

Hoy se me hace más que evidente esa colusión entre el abogado y Ricardo, junto con Javier Lozano. Le entregué la cartera a Doris, y le dije que le entregaba todos los libros de actas, de mi puño y letra, que me había sido imposible transcribir las actas pero los acuerdos estaban transcritos y entregados, tal cual lo marca el estatuto. Le mencioné que tenía que limpiar la “laptop” que se me había proporcionado para desempeñar mi cargo, porque tenía cosas del sindicato y personales y que quería hacer un respaldo y ordenarle todos los archivos.

 

La respuesta inicial de Doris fue “claro, no te preocupes”. Con lo cual me dediqué durante 3 meses a realizar dicho trabajo; en el inter, tuve una llamada de Ricardo quien me “invitó” a ser su centro de estudios, que me esperase a que lo hiciera oficial en la Junta de Comité. La verdad es que yo nunca me esperé dicha propuesta, pero le di las gracias. Al cabo de esos tres meses, cuando le entregué finalmente a Doris la “laptop”, fui citada por la Comisión de Vigilancia, estando Mariano y Cristina Occelli como representantes de dicha comisión, quienes me dijeron así tal cual “Doris te consignó por robarte las actas”. Ya sabrán la cara que puse ¿robarme las actas?, le expliqué que no pude transcribirlas pero que estaban en los libros de actas de mi puño y letra, que al final es lo que vale para la autoridad.

 

Ambos trataron de intimidarme, intentando hacerme creer que estaba metida en un gran problema; les dejé a ambos con la palabra en la boca y subí al quinto piso, enfurecida y sin anunciarme entré a la oficina del Secretario General para gritarle lo siguiente: “dile a tu gente que no me amenace, gracias a que cuidé el proceso electoral con mi propia vida, es que ustedes pueden estar ahora aquí sentados… ¿y ahora quieren acusarme de un “robo”?, si es que robé algo se están tardando en levantar un acta por sustracción de documentos en el Ministerio Público. A mi no me va a amenazar nadie”.  En vano trató Ricardo de “tranquilizarme”, diciendo que iba a hablar con “su gente”. Para mí fue una clara muestra de su modus operandi, el policía malo y el policía bueno.

 


Los que me conocen personalmente, o quienes me ha leído por algún tiempo, saben muy bien que conmigo no van ese tipo de juegos. Le dije al Señor Del Valle que su centro de estudios se lo metiera por salva sea la parte, y que no estaba mi dignidad en venta. Al año siguiente, en 2012, me lancé como candidata a la Secretaría de Prensa, y Ricardo por su parte apoyó a Claudia Quijas. Fue entonces que comenzó la leyenda negra que su círculo cercano no se cansó de repetir, hasta la náusea: “ella es gente de Clavel”.

 




Mi anécdota es solo un botón de muestra de lo que fue el pan de cada día con todos y cada uno de los agremiados al sindicato; les citaban en Relaciones Laborales, o en Vigilancia, les amedrentaban diciendo que habían hecho “algo muy gordo” y les sugerían “ve a hablar con Ricardo”, como sí de un dios todopoderoso se tratara y dependiendo el sapo, era la pedrada.

 



No todos, pero la gran mayoría de la planta de sobrecargos observó por años esta manera tan burda y cruel de mantenerlos a raya; jugaron con las reglas planteadas por Ricardo y su círculo. Si había que dar likes en sus publicaciones de Facebook lo hacían, sí tenían que tomarse la foto cada vez que iban a ASSA y poner su mejor sonrisa lo hacían, todo con tal de no levantar las aguas y poder seguir remando.

 

Las palabras de afecto, las fotografías, las porras, los aplausos, todos eran impuestos y nada fue de manera orgánica. Del Valle construyó su liderazgo bajo amenazas de perder el empleo. Prácticas como obligar a escribirle palabras de agradecimiento, o tomarse fotos al final de las asambleas, se convirtieron en un largo “besamanos”, había que quedar bien, pero nada era sincero, todo era falso.

 

Es por eso que al verse libres del yugo que representó por años que el voto no fuera libre y secreto, la gran masa silenciosa decidió votar por una opción distinta, cansados de no poder hablar, de no poder decir lo que viven día a día, esa masa tuvo la fuerza suficiente para que constara que, aunque no se ven, no se escuchan, saben el poder que tienen en sus manos, lo han recuperado. Hago votos porque jamás lo vuelvan a perder. No necesitan encabezar ningún movimiento, ejerciendo su voto, ahora fue en las elecciones, pero en las asambleas, en las Juntas Particulares, la voz de esta masa se tiene que seguir escuchando fuerte y claro.

 

Gracias por hacerme recuperar la esperanza de tener de nueva cuenta, un sindicato democrático.

 

 

Ximena Garmendia

14 de noviembre 2021

 

 

 

 

 

 

 

07 noviembre 2021

Cuando ser representante sindical se convierte en negocio

 

Cuando ser representante sindical se convierte en negocio

 

Estas elecciones están marcadas por un profundo tufo de desesperación por parte de la representación sindical, pues en su desesperación no se percatan de que terminan “matando” a la gallina de los huevos de oro, léase “su cargo sindical”, pues estar todos los representantes en el área del estacionamiento de la sede sindical, termina por hacer sentir a los sobrecargos de pie, los que van a ejercer en estos días su voto, una sensación de asfixia por parte de los integrantes de la ASSA.

 


Pero dejando ese tema a un lado, vamos a hablar brevemente de los “prósperos negocios” de los representantes sindicales, y sólo de lo que se alcanza a ver. Tenemos el caso de Lucía Navarrete quien es parte de la Comisión de Vigilancia y el cargo le ha dejado tiempo para montar una inmobiliaria en la ciudad de Tampico, cuna de la aviación mexicana, que lleva por nombre Navarrete Navarro Constructores.

 




A diferencia del resto de la base de sobrecargos que han estado penando todo este tiempo ya sea por las repercusiones de la pandemia o antes, de la sobrepoblación de la planta de sobrecargos, nuestra querida compañera ha ingresado nada más y nada menos que al próspero mercado inmobiliario.

 

Y esto es sólo lo que se ve, en el caso de Ivonne Jurado, Secretaria de Prensa, quien antes se anunciaba como coach (en llano español seudo psicólogo) y vende talleres, cursos de “finanzas, sexualidad y autoestima”, ahora se anuncia como “escritora”, pero sigue ofreciendo sus servicios. Mismos que “vende” a ASSA, vaya, negocio redondo.

 



El sindicato se ha vuelto una “mina de oro” para la actual representación y es por eso que muestran en estos días una franca desesperación por perder el “hueso” y no poder seguir haciendo negocios. Está en sus manos compañeros, el cambiar el curso de la historia y ese poder lo tienen a través del voto, vayan y ejérzanlo, no permitan que este grupo de seudo compañeros se siga enriqueciendo a sus costillas, mientras ustedes padecen.

 

 

Ximena Garmendia

7 de noviembre 2021