EL ESTADO DE INDEFINICIÓN, LA BURLA, Y FUNCIONARIOS Y EMPRESARIOS QUE SON CONDENADOS POR SPANAIR
Vuela a la deriva el caso de Mexicana de Aviación, la gente afectada y sus familias (a reserva de algunos que han podido encontrar empleo), viven una situación de desesperanza e incertidumbre, esto es; un estado de indefinición y de constante burla. Las autoridades continúan dañando lo que queda de la aerolínea, ya sea con obstáculos, con mentiras, con declaraciones ridículas que merman día a día los senos familiares, obviamente porque su sueldo en el mejor de los casos se ha disminuido considerablemente.
Las promesas de más de 30 inversionistas quedaron en el aire, algunos de ellos cansados de entregar y demostrar solvencia y calidad moral, cansados de los malos recibimientos en las oficinas de los tribunales, fastidiados de la burocracia extrema de los servidores públicos designados ex profeso para darle machetazo a tan importante empresa Mexicana.
Recientemente en una nota de “El País” de España, se habla de la inhabilitación de funcionarios del consejo de Administración, además uno de ellos que fungió como presidente y que trabajaban para la aerolínea española “Spanair”. Antes de ser declarada en quiebra (no fue a tiempo la declaración) se reconoció que existía insolvencia, con riesgo de suspender la licencia de vuelo, la empresa también debió ser considerada en concurso mercantil desde mediados de 2011, hubo negociaciones para inyectar fondos con Qatar Airways y otra empresa proveedora de fondos de Catalunya y no se concretó nada. Dentro de la sentencia de la aerolínea resalta que, a pesar de ello, la aerolínea “seguía vendiendo billetes como si no ocurriese nada, dando al mercado una apariencia de solvencia que se puede calificar en ese momento de irreal” como que nos suena el caso ¿no?, sin embargo en el asunto de esta aerolínea, SI se están señalando y castigando a los culpables, partiendo del principio de que; “Si una empresa es tomada para trabajarla y para que genere, debe ser vigilada, cuidando los intereses y derechos de sus trabajadores, así como para el bien de la Nación en el caso de las empresas que estén directamente relacionadas con los gobiernos”, con Mexicana no es así.
Ahora, retomando el tema, nos preguntamos ¿Hasta cuándo se definirá la situación de Mexicana? ¿Será acaso un final de fotografía? Los escasos recursos con que cuenta la gente, están a punto de agotarse –para todos- ¿Se castigará a los culpables de frenar a Mexicana, siendo que fue un paro que nunca tuvo el sustento real y legal para detenerla? ¿Cómo se reparará a los trabajadores y jubilados sus derechos? ¿Acaso quedará impune este sonado y vergonzoso caso para México?
Desafortunadamente, esto es el México que vivimos actualmente, fraude, desaliento y desánimo, no la maravilla que se habla de nuestro país en los foros internacionales con reformas y proyectos maravillosos.
Por Miguel Ángel Jiménez Islas