Sin avances en el diálogo, una lleva 22 días en huelga de hambre
Duele y sorprende a ayunantes de
Mexicana la indiferencia oficial
Fernando Camacho Servín
Periódico La Jornada
Miércoles 17 de abril de 2013, p. 28
Miércoles 17 de abril de 2013, p. 28
A pesar de los ofrecimientos de la Secretaría de Comunicaciones y
Transportes (SCT) para acercarse a los dos trabajadores de Mexicana de Aviación
que se encuentran en huelga de hambre, ninguno de ellos ni sus compañeros han
recibido hasta ahora alguna propuesta concreta para realizar foros donde se
analice cuál es la mejor opción para elegir un inversionista que rescate a la
compañía.
Instalada en una tienda de campaña frente a los mostradores de Mexicana, en
la terminal uno del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, Rocío
Guerra Peimbert cumplió ayer 22 días de ayuno en demanda de solución al
conflicto que tiene dos años y ocho meses y tiene a 8 mil empleados de la
aerolínea sin trabajo; aunque ha sufrido momentos de debilidad física y dolores
de cabeza, afirmó que desea continuar con la protesta.
La semana pasada vino la mano derecha del director de la oficina de vinculación de la SCT, Gemi José González López, para justificar la ausencia de los funcionarios, porque tenían órdenes del más alto nivel de sacar primero la nueva ley de telecomunicaciones, y posteriormente ya empezaban a ver todo lo demás, recordó Guerra, quien ha sido analista contable en el área de contraloría operativa de Mexicana desde hace 25 años.
Sin embargo, tras la discusión sobre ese tema iniciaron los debates sobre el
Plan Nacional de Desarrollo, por lo que la probabilidad de que atiendan en breve
las peticiones de los trabajadores en huelga de hambre es incierta,
deploró.
Nos duele y nos sorprende la indiferencia de la SCT, de Gobernación y de la Secretaría del Trabajo. La única autoridad que nos ha mostrado apoyo ha sido el director del AICM, Alfonso Sarabia, quien hizo gestiones para que nos recibieranlas autoridades federales y escucharan la petición de que se realicen foros con la participación del gobierno y los trabajadores, donde se analice cuáles son las mejores opciones de inversionistas para rescatar la empresa, indicó Guerra.
Rafael Arcos Márquez, quien ayer cumplió 13 días en huelga de hambre, también
externó su voluntad de seguir con la manifestación, aunque admitió sentirse
cansado, con mucho sueño y con pocas fuerzas para mantenerse sentado sin
dormirse.
Tengo buen ánimo, porque me incentivan mucho mis compañeros y la convicción de que esto saldrá adelante. Los de vinculación de la SCT nos hablaron muy bonito, pero ya no queremos seguir esperando más tiempo. No me cabe en la cabeza lo que han hecho con gente que tiene tanta capacidad, lamentó Arcos, quien trabajó durante 10 años en el área de ventas de Mexicana.