Pide Chamas respetar garantías: juez. En Fórmula Financiera
18 de Noviembre, 2011
El juez que lleva el concurso mercantil de Mexicana de Aviación, afirmó que no se pueden dar datos de los posibles inversionistas y de las transacciones que éstos realizaron por motivos de confidencialidad.
El juez que lleva el caso de Mexicana de Aviación, Felipe Consuelo Soto, afirmó que a pesar de que ya se tiene el documento que avala la posesión de dinero necesaria para reactivar a la aerolínea no se pueden dar detalles de éste ni de las personas involucradas por razones de confidencialidad.
En entrevista para Fórmula Financiera, Consuelo Soto declaró que el contrato que se le entregó, en estatus de confidencial, será dado a conocer una vez que éste se encuentre debidamente requisitado y con toda validez, esto debido a que Michael Chamas, inversionista del caso Mexicana, solicitó discreción al respecto hasta que se garantice que el dinero que se empelará en el caso sea utilizado con los fines que será entregado.
"Fue un contrato que se me entregó como confidencial, cuando ya esté requisitado con toda la validez ya podremos dar los datos, pero antes no sería prudente. Además, Chamas es muy especial y pidió confidencialidad, la cual receptará", declaró el juez Felipe Consuelo.
Además, advirtió que aunque la transferencia electrónica con el monto de los 400 millones de dólares ya fue realizado, el depósito todavía no llega al fideicomiso correspondiente, por lo que, dijo, podría crearse uno fideicomiso específico para este tema, lo cual se determinará la próxima semana "si todo sale bien, iremos paso a paso, no quiero adelantar vísperas".
Según declaró Consuelo Soto, el dinero no ha llegado a México debido a que Chamas, en conjunto con el empresario Iván Barona, desea que sea respetadas las garantías ofertadas por parte del gobierno mexicano, esto en sentido de que efectivamente se va a hacer la operación, en las rutas, los slots, etcétera.
Esta postura de Chamas se debe a que el dinero no es de su propiedad completamente, motivo por el cual sus clientes están nerviosos porque el recurso, al llegar a México, podría ser involucrado con lavado de dinero, por lo tanto, podría ser congelado y catalogado como ilícito.
18 de Noviembre, 2011
El juez que lleva el concurso mercantil de Mexicana de Aviación, afirmó que no se pueden dar datos de los posibles inversionistas y de las transacciones que éstos realizaron por motivos de confidencialidad.
El juez que lleva el caso de Mexicana de Aviación, Felipe Consuelo Soto, afirmó que a pesar de que ya se tiene el documento que avala la posesión de dinero necesaria para reactivar a la aerolínea no se pueden dar detalles de éste ni de las personas involucradas por razones de confidencialidad.
En entrevista para Fórmula Financiera, Consuelo Soto declaró que el contrato que se le entregó, en estatus de confidencial, será dado a conocer una vez que éste se encuentre debidamente requisitado y con toda validez, esto debido a que Michael Chamas, inversionista del caso Mexicana, solicitó discreción al respecto hasta que se garantice que el dinero que se empelará en el caso sea utilizado con los fines que será entregado.
"Fue un contrato que se me entregó como confidencial, cuando ya esté requisitado con toda la validez ya podremos dar los datos, pero antes no sería prudente. Además, Chamas es muy especial y pidió confidencialidad, la cual receptará", declaró el juez Felipe Consuelo.
Además, advirtió que aunque la transferencia electrónica con el monto de los 400 millones de dólares ya fue realizado, el depósito todavía no llega al fideicomiso correspondiente, por lo que, dijo, podría crearse uno fideicomiso específico para este tema, lo cual se determinará la próxima semana "si todo sale bien, iremos paso a paso, no quiero adelantar vísperas".
Según declaró Consuelo Soto, el dinero no ha llegado a México debido a que Chamas, en conjunto con el empresario Iván Barona, desea que sea respetadas las garantías ofertadas por parte del gobierno mexicano, esto en sentido de que efectivamente se va a hacer la operación, en las rutas, los slots, etcétera.
Esta postura de Chamas se debe a que el dinero no es de su propiedad completamente, motivo por el cual sus clientes están nerviosos porque el recurso, al llegar a México, podría ser involucrado con lavado de dinero, por lo tanto, podría ser congelado y catalogado como ilícito.