Tan no estoy de acuerdo con su campaña de anular el voto que les contesto para que lo distribuyan entre sus familiares y amigos.
Primero fue el voto útil, donde académicos e intelectuales y sociedad civil se sumaron alegremente con la consigna de alentar la alternancia y ver al PRI fuera de Los Pinos y el resultado fue que tuvimos a un pendejo oportunista y corrupto seis años haciendo estupideces.
Ahora la campaña es anular el voto, y no le piensan que con eso sólo se beneficiarán los tres partidos ‘grandes’ de este sistema político mexicano, que son el PRI, el PAN y el PRD, pues quienes no anularán sus votos son precisamente los incondicionales de estos partidos.
Tendremos un Poder Legislativo carente de representatividad pero con plenos poderes y débil ante los embates de este cuarto poder, quien a propósito, apoya oportunistamente esta absurda campaña para tomar al Congreso débil de rehén en sus intenciones de mantener el status quo que tanto les favorece.
Si de verdad quieren hacer pensar a la gente como lo mencionan en su propaganda de manera soberbia, pónganse ustedes a pensar primero en las consecuencias que esto traería al país.
Si de verdad quieren un cambio, hagan algo más contundente y no campañas pendejas con resultados obscuros.
Alienten a la gente a votar con conciencia y díganle que ya es tiempo de que nos gobierne la izquierda. Este proyecto económico está feneciendo y este gobierno se sigue aferrando a esta propuesta neoliberal que ya demostró a todas luces que no resuelve los problemas de desigualdad y pobreza al que se está enfrentando el mundo entero, no solamente nuestra nación.
Las alternativas están a la vista:
Reforma del Estado.
Abandonar la propuesta neoliberal.
Una propuesta económica que aliente el mercado interno y por ende la generación de empleos.
Protección al campo mexicano para asegurar el abasto.
¡Ni un voto al PAN ni al PRI!
¡Démosle una oportunidad a la izquierda!
Iván Enríquez.
