07 junio 2008

LAS NOTAS DE LA TARDE NOCHE

Exigen sobrecargos a STPS y JLCA que Mexicana cumpla la ley
sábado 7 de junio, 04:17 PM

México, 7 Jun (Notimex).- La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) solicitó que la Secretaría del Trabajo y a la JFCA sometan a Mexicana de Aviación al cumplimiento del orden jurídico y que respete los tiempos de ley para que los magistrados resuelvan la demanda de amparo que se interpuso en su contra.

Lizette Clavel Sánchez, secretaria general de la ASSA, consideró que la empresa viola el Estado de derecho cuando contraviene la suspensión otorgada por el Décimo Tribunal Colegiado que impide que "nos sean reducidas nuestras condiciones de trabajo mientras no se resuelva el juicio de amparo, conforme a la decisión de la SCJN.

En entrevista estableció que ninguna negociación debe sujetarse "al chantaje de lesionar empleados en sus condiciones de trabajo", y anunció que iniciarán estrategias de rechazo a estas medidas, a efecto de evitar la culminación del agravio.

Tal parece, dijo, que es una reacción de la parte patronal a la decisión de los magistrados de atraer este conflicto, luego de que la empresa modificó unilateralmente las condiciones de trabajo de poco más de un centenar de sobrecargos advirtiendo que continuaría en esta actitud hasta en tanto no se llegara a una negociación.

Indicó que en última instancia se debe esperar a la resolución de las autoridades competentes y en este caso estamos obligadas a la decisión final que adopten los magistrados.

Por ello, enfatizó, "acudimos ante el presidente de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje y ante el secretario de Trabajo para que en el ejercicio de sus facultades sometan a la empresa al cumplimiento del orden jurídico".

Exigió que se respeten los tiempos que la ley establece para que las autoridades tomen las resoluciones correspondientes, y exhortó a Mexicana de Aviación para que recapacite y pondere la gravedad de sus actos.
Ven riesgo de alza en tarifas aéreas

La aerolínea Interjet no pide subsidios a la turbosina, más bien que las autoridades quiten el subsidio al diesel, o bien, recibir un trato equitativo con un costo similar, aseguró José Luis Garza, director general de la firma


Aída Ulloa
El Universal
Sábado 07 de junio de 2008

aida.ulloa@eluniversal.com.mx

La aerolínea Interjet no pide subsidios a la turbosina, más bien que las autoridades quiten el subsidio al diesel, o bien, recibir un trato equitativo con un costo similar, aseguró José Luis Garza, director general de la firma. “De lo que nos estamos quejando es que hoy hay un privilegio para los autobuses de lujo”, una de sus principales competencias.

En el marco de la presentación de su nueva ruta Toluca-Huatulco-Toluca, Garza consideró que hay una incongruencia en la política pública actual, porque el sector aéreo quedó fuera del programa de apoyo a la industria del transporte. Actualmente la turbosina cuesta poco más de 11 pesos por litro, en tanto, el diesel está en 5.30 pesos.

“Queremos reglas competitivas. Nos encantaría ver un diesel a 11.35 u 11.40. Hoy el diesel no está referido a un precio internacional, en el momento en que lo hicieran se iría a un precio semejante al de la turbosina”, expuso. Si aumenta el diesel, agregó, lo harían también los boletos del transporte terrestre, y por tanto, estarían en condiciones competitivas.

Para la aerolínea que se autodefine como de alta eficiencia, el combustible representaba menos de 22% de sus costos de operación en 2005 (cuando inició operaciones), ahora ya significa casi 48%.

Al cuestionarle si planean reducir empleos por este motivo, manifestó que buscarán que sea la última opción, es decir, tratarán de ser más eficientes antes de cortar al personal.

Afirmó que hasta el momento no han observado una reducción en ventas. Tampoco han subido tarifas, pero si los precios del combustible siguen aumentando y no reciben respuesta a las demandas planteadas al gobierno federal, Garza dijo que no les quedará otro remedio más que aumentar el precio al pasajero, sin embargo, se corre el riesgo de que la gente deje de volar.

No obstante, de tener que hacerlo, acotó, tendrá que darse cuidadosamente y no sería de forma generalizada: “Algunos vuelos pueden aguantar el aumento de precio sin que se venga la demanda para abajo, pero otros, particularmente los turísticos, son mucho más sensibles al precio”.