Fatiga
de las tripulaciones
Como
usuario de las líneas aéreas ¿me afecta la fatiga de las tripulaciones
aeronáuticas? La pregunta viene a colación porque, como muchos saben, la
empresa Aeroméxico se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados
Unidos y dentro de la reestructura de la empresa, se vulneraron las condiciones
laborales son distintas.
Pero
no todo son números. Antes que nada tenemos que hablar del desgaste físico que
sufren los tripulantes de aviación. En 2016 se publicó en el Diario Oficial de
la Federación la Norma Oficial que establece las especificaciones para las
gestiones de la fatiga en la tripulación de vuelo (NOM-117-SCT3-2016). No se
trata de una lista de “recomendaciones” que pueden cumplirse o no; se trata de regulaciones
técnicas de observancia obligatoria, y en consecuencia, deben ser tomadas en
cuenta al momento de cualquier restructura y en toda negociación de convenios
entre empresa y trabajadores, pero… ¿esto sucede así?
Empecemos
diciendo que las causas de “fatiga” pueden abarcar desde un mero aburrimiento, la
alteración del ritmo circadiano, hasta el esfuerzo físico extremo. En términos
sencillos, la fatiga se puede definir simplemente como cansancio. Pero desde un
punto de vista operacional, la fatiga es “una condición caracterizada por una
sensación de incomodidad creciente con reducción de la capacidad para trabajar,
reducción de la eficiencia en cumplir metas, pérdida de la capacidad para
responder a estímulos, y usualmente está acompañada por la sensación de
cansancio y agotamiento.”
Pero en
tripulaciones de vuelo, la fatiga es sólo un punto a considerar. A continuación
haré una lista de todos y cada uno de los factores que alteran la salud,
física, mental y emocional de los tripulantes:
·
Factores médicos inherentes al
vuelo
·
Cambios de presión atmosférica
·
Cambios de temperatura
·
Aceleraciones
·
Jornadas Laborales y periodo
de servicio de vuelo
·
Condiciones meteorológicas
·
Humedad
·
Ruido
·
Vibraciones
·
Radiaciones
·
Humos y ases
·
Olores
·
Diseños de cabinas
Es muy
probable que usted, amable lector haya padecido algo parecido, o por lo menos
habrá escuchado comentarios, ya sea en reuniones familiares o con amigos y
colegas de trabajo, sobre el cansancio tras regresar de un viaje; que le dio
“jetlag” y que trae el horario todo chueco. A mí, como tripulante de cabina,
inevitablemente me viene a la cabeza el siguiente pensamiento “eso no es nada,
se siente morir y es sólo un vuelo”.
Como
dije al principio la empresa Aeroméxico ha adaptado, reducido, acortado y
abaratado las condiciones laborales, a un año habría que hacer un corte de
caja. Esto solo puede traducirse en personal fatigado, proclive a realizar
errores a bordo, y en la aviación los errores pueden costar vidas. No podemos
dejar de mencionarlo.
Esto a
pesar de que varias áreas de la empresa Aeroméxico están contratando personal,
pilotos en el caso de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA),
personal de tierra pero a través de Orión y con contrato temporal que deben
firmar mes con mes, personal de rampa vía Menzies y otras empresas de “Servicios
Especializados” (outsourcings).
Y por
supuesto, hay un sinfín de rumores que indican que habrá una gran masiva en el
mes de junio, eso aunado a las reuniones que se han tenido en el CECAM (Alas de
América) para afiliar ahí varios sobrecargos de empresas como VivaAerobus y
Volaris, pues han echado en marcha desde la Asociación Sindical de Sobrecargos
de Aviación (ASSA).
En el
caso del grupo de sobrecargos, antes de pensar en contratar personal, urge se
haga un análisis de cómo ha contribuido el convenio de ahorros en la fatiga del
personal de vuelo en cabina de pasajeros, a un año de distancia no pueden echar
el tema de la fatiga en saco roto. La relación de fatiga y seguridad
operacional van intrínsecamente de la mano.