No cabe duda que el dolor ajeno pasa inadvertido para tanta gente involucrada en el caso
de Mexicana de Aviación., esa gente con corazones llenos de avaricia, corruptos, enfermos de poder,
van por la vida haciendo daño y creen que con eso son más importante, sin darse cuenta que ellos mismos
se van aniquilando poco a poco, porqué descubrirán que su miseria más grande es ser PECADORES.
Que haya prudencia y buena voluntad en las personas a las que les toque tomar decisiones en cuanto a la resolución
del concurso mercantil de Mexicana de Aviación, de ello dependen miles de familias bastantes dañadas con la maldad
del hombre.
"Pero los ímpios perecerán, y sus hijos mendigarán el pan"
NI el poder ni la riqueza dan acceso a la herencia que DIOS PROMETE A SUS HIJOS.