Los hechos que ayer tarde se dieron en ASSA, no son otra cosa más que la desesperación de un pequeño grupo de agremiad@s (que no compañeros), que en ansias de quedarse con la asociación utilizan los únicos argumentos a su alcance, la agresión.
Est@s agremiad@s, que quieren vivir sin trabajar y que de manera eficaz han engañado a otr@s compañer@s con sus mentiras, deberían decirles como funciona un sindicato blanco, que es su fin más apremiante.
Me pregunto y pregunto, ¿qué? ¿A los supuestos sobrecargos que se identificaron con credenciales falsas, no les fueron proporcionadas éstas con ayuda de alguien de la sria. del interior? ¿O qué, las mandaron hacer en los portales de Santo Domingo?
Si se dice, de los que agarraron, que son del sindicato del metro, entonces estamos hablando que pertenecen al prd. ¿Y quién gana con esto? ¿Y quién los mandó como ayuda?
Ya nos vamos dando cuenta, los que nos queremos dar cuenta, que no es por Lisette el que quieren dañar a la ASSA, sino que quieren el poder que da una sindicato, hasta ahora DEMOCRÁTICO, sí DEMOCRÁTICO.
Si tanto quieren su sindicato los agremiad@s inconformes formen uno para que así les alcancen los puestos a todos, o háganle como Antonio Bourge, que en su tiempo se fué al stias y mírenlo tan contentito y sin broncas.