Como los hechos van demostrando, la "crisis" anunciada por Emilio Romano era falsa, el fantasma de la "quiebra" sencillamente no existía y por supuesto que los dueños de Mexicana están en un muy buen negocio que les reditúa y redituará un poco más del precio pagado. 11.7 millones de pasajeros transportados es la cuenta con la que cierran 2008.
Bien pues ahora nada más falta que el director de Mexicana, se desista del conflicto de naturaleza económico planteado.
Ayer leí en el diario Universal, que la secretaria del sindicato comentaba que estarían en buena disposición para negociar su situación.
¿Negociar?, ¡por favor! si tienen todo para ganar y conservar totalmente su mini contrato contractual.
La base deberá estar muy atenta, porque nada más nos falta que la secretaria nos salga peor que el pasado charro sindical, y finalmente, tanto esfuerzo, tanta lucha, tanta espera pueda terminar en una negociación, inaceptable, inadmisible porque los argumentos iniciales que presentará en su tiempo Emilio Romano, finalmente, en la realidad han sido insostenibles. ¡NO al convenio! y SI A LA DIGNIDAD.
Es lamentable que la clase trabajadora esté tan desamparada y expuesta a las ocurrencias de los que llegan prometiendo ser líderes y al final los quieran convencer de que es mejor negociar.
